El 90% de las familias de barrios populares cree que terminar la escuela ayuda a conseguir trabajo

Nueve de cada diez familias que viven en barrios populares consideran que sus hijos e hijas tienen mayores posibilidades de conseguir empleo si terminan el secundario. Además, sostienen que es importante profundizar la enseñanza de oficios, idiomas y actividades vinculadas con el mundo del trabajo.

Los datos surgen de una encuesta realizada por el Observatorio Argentinos por la Educación junto a Secretaría de Integración Socio Urbana del Ministerio de Desarrollo de la Nación. “La valoración de la escuela sigue siendo positiva”, afirmó una de las investigadoras que realizó el sondeo.

Se trata de un estudio exploratorio realizado en los barrios que integran el Registro Nacional de Barrios Populares ( ReNaBaP) en los que se encuentran las villas y asentamientos de Argentina. Según la encuesta, realizada a 540 familias, la educación sigue siendo valorada positivamente, sobre todo en cuánto al futuro laboral de sus hijos e hijas.

La investigadora del Observatorio y autora del informe “¿Qué esperan de la educación las familias de los barrios populares?, Gabriela Catri, considera que “las familias siguen asociando a la escuela con la posibilidad de conseguir un buen empleo, con ser alguien en la vida”. “El hecho de que, a pesar de todo, la escuela siga teniendo una valoración tan buena es un dato positivo. Hay una asociación entre la escuela y la posibilidad de un futuro mejor, con un trabajo en blanco. En las demandas, aparecen predominantemente estas actividades vinculadas al mundo del trabajo”, le dijo Catri a elDiarioAR.

El estudio indagó sobre las demandas espontáneas de las familias y sobresale la necesidad de orientar una formación vinculada a la salida laboral. Si bien pretenden que la escuela aborde cuestiones como Educación Sexual Integral, arte, deporte, cultura, los intereses por oficios, idiomas y actividades vinculadas al mundo del trabajo, son predominantes. En cuanto a las demandas de infraestructura, el 35% de las familias señala que la escuela a la que asiste su hijo se encuentra en condiciones regulares y el 50% afirma que está en buenas condiciones; ​ el 13% restante percibe malas condiciones. Los aspectos que más se repitieron fueron los déficits en calefacción (40%) y baños (39%). También se evidenció la necesidad de más aulas, espacios de recreación, mayor mantenimiento y seguridad. 

Otro de los puntos relevantes de la encuesta tiene que ver con la comida, en la mayoría de los casos, solo reciben una comida liviana. En primaria, solo el 10,4% de los que van 4 horas o menos reciben almuerzo mientras que ese porcentaje aumenta a 62,1% para los que van más de 4 horas. En la secundaria, reciben almuerzo el 25,2% de los que asisten 4 o menos horas y el 25,9% de los que asisten más de 4 horas. “Ahí es donde habría que poner el foco”, afirmó Catri.

La especialista también se refirió a la elección de las escuelas y sostuvo que uno de los principales motivos es la cercanía. “Es el principal factor de elección de la escuela, se relaciona con el tiempo que los niños y niñas tardan en llegar. En general, es bastante bueno: más de un 70% tarda menos de media hora en llegar a la escuela”, agregó. 

En relación con la conectividad, casi 7 de cada 10 familias informaron que las escuelas de sus hijos e hijas tienen conexión a internet. “Es un número alto”, indicó Catri y diferenció los porcentajes entre los distintos niveles escolares. “En general te da el 70% de conectividad, pero en la primaria te da 45% (hay un 25% que no sabe si la escuela tiene conexión) y en la secundaria 75%”, explicó.

CDB/MG