CABA superó los 40 grados de sensación térmica y el AMBA continúa bajo alerta roja por calor

La ciudad de Buenos Aires (CABA) superó hoy los 40 grados de sensación térmica, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) en su ranking de las 12, y continúa bajo alerta roja por temperaturas extremas junto a varios municipios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), y localidades de Entre Ríos, Corrientes y la provincia de Santa Fe.

Pasadas las 15, el observatorio de CABA del SMN indicó que la temperatura en CABA se ubicaba en 35.3 grados, en tanto una hora antes, se alcanzó el pico de calor del día con 40.1 de sensación térmica.

El AMBA y distritos de Entre Ríos, Corrientes y sur de Santa Fe se encuentran bajo alerta roja por temperaturas extremas “muy peligrosas” que “pueden afectar a todas las personas, incluso a las saludables”.

Bajo alerta roja están, además de CABA, La Plata, Berisso, Almirante Brown, Avellaneda, Esteban Echeverría, Ezeiza, La Matanza, Merlo, Berazategui, Florencio Varela, Lanús, Lomas de Zamora, Presidente Perón y Quilmes.

También, Brandsen, Cañuelas, Magdalena, San Vicente, Escobar, San Fernando, San Isidro, Tigre, Vicente López, Luján, Marcos Paz, Campana, Zárate, General San Martín, Hurlingham, Ituzaingó, José C. Paz, Malvinas Argentina, Moreno, Morón, Pilar, San Miguel, Tres de Febrero y centro y norte del territorio bonaerense.

En Corrientes, Monte Caseros, General Alvear, Paso de los Libres, San Martín, Santo Tomé, Concepción, Curuzú Cuatiá, Mercedes, San Roque y Sauce.

En Entre Ríos, rige alerta roja para Colón, Gualeguaychú, Islas del Ibicuy, Tala, el departamento de Uruguay y Victoria.

Además, Caseros, General López, Constitución, Iriondo, Rosario y San Lorenzo en la provincia de Santa Fe.

En el ranking de temperaturas de las 15 la localidad más calurosa era San Fernando del Valle de Catamarca con 39.4 grados, seguida por cuatro ciudades de la provincia de Buenos Aires: Dolores con 39.2; 9 de Julio con 38.7; Las Flores con 38.4 y Pehuajó 38.3.

Más abajo Marcos Juárez (Córdoba) con 38.1, Ceres (Santa Fe), 38.1ºC; Merlo (Buenos Aires) 38; Santiago del Estero, 37.8 y Venado Tuerto (Santa Fe), 37.7ºC.

A esa misma hora, la ciudad salteña de Rivadavia registró la sensación térmica más alta del país con 43.9 grados y una temperatura de 37.6, Tartagal (Salta), 42 y 36.6 y Las Lomitas (Formosa) 41 y 35.8.

En tanto, el SMN indicó que rige alerta naranja para centro y oeste de la provincia de Buenos Aires, norte, oeste y centro de Entre Ríos, oeste, este y centro de Córdoba, este y norte de Santa Fe, Tucumán, este de Catamarca y oeste de Corrientes.

El nivel naranja implica un efecto moderado a alto en la salud y las temperaturas “pueden ser muy peligrosas, especialmente para los grupos de riesgo”.

Bajo alerta amarilla se encuentra oeste y este del territorio bonaerense, sur, norte, centro y este de Córdoba, centro y noroeste de Santa Fe, este de Santiago del Estero, este de San Luis, casi la totalidad de Santiago del Estero, y este de Catamarca.

Las temperaturas extremas bajo nivel amarillo pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, como niños y niñas, personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas.

Ayer por primera vez, CABA superó el umbral de temperatura máxima de ola de calor (32,3 grados) por 12 días consecutivos y rompió el récord anterior que había sido en 2017 con 11 días, precisó el SMN.

El sábado también se mantuvo en alerta roja con un registro térmico de 38,6 grados a las 14, lo que se convirtió en la temperatura más alta en 117 años para esta época del año, fenómeno que no ocurría desde 1906.

El SMN resaltó también que “es la segunda vez en el mes que (CABA) alcanza el récord absoluto para marzo”.

La anterior fue el pasado día 2, cuando la temperatura llegó a 38 grados.

Frente a las temperaturas extremas que baten récords para marzo en el centro y este del país, especialistas en meteorología advirtieron esta semana que se trata de “las olas de calor intensas más frescas del resto de nuestras vidas” y explicaron que Argentina atraviesa el verano más cálido de su historia por una suma de “factores desafortunados” que van desde la variabilidad natural hasta la influencia del cambio climático.

“Esta ola de calor es una combinación de factores desafortunados. Por un lado, por el efecto del cambio climático producido por actividades humanas cada vez que la atmósfera produce un período cálido hay más chances de que se tenga una ola de calor”, indicó Carolina Vera, doctora en Ciencias de la Atmósfera e investigadora principal del Conicet.

CRM con información de la agencia Télam