“Whirlpool S.A. informa a sus accionistas y al mercado en como parte de su proceso continuo de revisión y mejora de la estructura y en línea con las directrices estratégicas de eficiencia operativa y asignación responsable de recursos, dejará de producir en Argentina a través de su filial”. Con este comunicado, la empresa de electrodomésticos le comunicó al mercado y sus empleados el cierre de planta ubicada en la localidad bonaerense de Pilar y deja sin trabajo a sus 220 empleados.
Asimismo, la compañía aclaró que esta decisión “no afecta a las actividades de importación, comercialización y distribución de los diversos productos ya ofrecidos por Whirlpool en el mercado” y tampoco interfiere con el servicio al cliente, “que seguirá realizándose normalmente”.
“La Compañía refuerza que continúa evaluando oportunidades y alternativas estructurales, que puede contribuir a la sostenibilidad y eficiencia de la operaciones de su grupo económico”, concluye el comunicado que la empresa dio a conocer.
Whirlpool es propietaria de las marcas de electrodomésticos Brastemp y Consul, y la medida se produce después de que anunciara una inversión de US$102,31 millones el año pasado para expandir y modernizar sus plantas en Rio Claro y Joinville, Brasil.
La planta pilarense había abierto a fines de 2022 y en junio último había comunicado que logró las cero emisiones de CO2 en los alcances 1 y 2, en el marco del compromiso de la compañía de alcanzar Cero Emisiones (Net Zero) a nivel global para 2030. La compañía tenía el foco puesto en la reducción del consumo de gases en procesos de combustión, lo que permitió eliminar inicialmente las emisiones directas de gases de efecto invernadero generadas por fuentes que la empresa posee o controla, como la quema de combustible en sus equipos y vehículos.
Este miércoles se le comunicó la decisión a los empleados y que se está negociando con el sindicato (Unión Obrera Metalúrgica) el paquete de salida, que incluirá la indemnización correspondiente más un plus. La medida incluyó tanto al personal de producción como a otros sectores vinculados con la operatoria de la planta (por ejemplo, áreas de ingeniería, calidad, entre otras), de acuerdo a lo que fuentes de la empresa precisaron a Infobae. Y agregaron que Whirlpool “mantendrá su oficina comercial y de distribución en la Argentina, como hace 35 años, en la que seguirán trabajando entre 100 y 120 personas” y que la decisión se tomó porque “se trataba de un modelo de negocio operativo y competitivo para hacerlo mucho más ágil y eficiente, lo que no pudo lograrse en un contexto de fuerte desaceleración del consumo y aumento significativo de las importaciones”. “La idea es empezar el camino de la transición y organizarnos hacia una operación más comercial que de fabricación”, detallaron.
Despidos en Essen y Corven
La fábrica de ollas, cacerolas y sartenes Essen, con sede en la ciudad santafecina de Venado Tuerto, redujo en las últimas horas un 10% de su personal y desde el gremio UOM lo atribuyen a la apertura indiscriminada de las importaciones.
A los más de 30 despidos en Essen, se suma en Venado Tuerto que sufrió 30 cesantías Corven Amortiguadores y otras 120 Corven Moto.