En la Cumbre del Clima de Cancún, realizada en 2010, se creó el Fondo Verde para el Clima (GCF) que consistía en un aporte para ayudar en la adaptación climática a países en desarrollo, siguiendo el principio de una “transición justa” para todos. En concreto, era un monto proveniente de fuentes públicas o privadas que apoya acciones de mitigación y adaptación al cambio climático.
En 2020, ese monto debía alcanzar los 100 mil millones de dólares anuales, meta que aún no se logró. En la Cumbre de este año, Argentina propuso que los países con grandes deudas internacionales puedan canjear la deuda por acciones climáticas.
MGF