Una jugada de riesgo. El equipo de abogados que representa a Leopoldo Luque, neurocirujano, pidió que sea juzgado aparte por un tribunal popular, es decir, gente común. Junto al resto de los imputados -ocho en total-, Luque está acusado de homicidio simple con dolo eventual, un delito que preve una pena de entre 8 y 25 años de cárcel. Pero a consideración de los fiscales Cosme Iribarren y Patricio Ferrari, él fue quién comandó “un plan criminal” que tuvo como objetivo “terminar con la vida de Diego Maradona”.
Que la Justicia bonaerense acepte o rechace la solicitud de un juicio por jurados llevará tiempo. Y aquí podría develarse la estrategia: dilatar, que el juicio por la muerte del ex futbolista no suceda por quedar entrampado entre recusaciones, apelaciones, elevaciones. Porque, al final: ¿quién en ese jurado de gente común no empatiza con Maradona? ¿Por qué le convendría a Luque someterse a un jurado popular si él, mediáticamente, quedó instalado como “el asesino” de Diego?
A todo esto, las hijas mayores de Maradona, Dalma y Gianinna, pidieron que se suspenda el juicio por jurados de la enfermera Gisella Dahiana Madrid, para quien corre la misma imputación pero que iba a ser juzgada aparte. La fecha de arranque quedó en suspenso el jueves, en una audiencia agitada. Ahí, la estretegia es que Madrid sea juzgada con el resto, en un juicio técnico. Luque está pidiendo lo que a Madrid le aceptaron en un principio pero ahora quedó sujeto al alcance de la nulidad del primer debate, cuando saltó el escándalo del documental Justicia Divina, del que participaba la jueza Julieta Makintach.
El juicio por la muerte de Maradona llevaba 21 audiencias y más de 40 testigos cuando Makintach fue recusada. En principio por asumir la conducción del Tribunal de manera repentina y porque parte de las defensas consideraron que su comportamiento con determinados declarantes era “inquisitorio”. Pero el debate se anuló cuando circularon las imágenes que daban cuenta de su participación de una serie sobre el juicio en el que ella tenía voz y voto. Fiscalía, querella y defensas, todos de acuerdo, pidieron que el proceso se suspenda. Verónica Di Tommaso, vocal, y Maximiliano Savarino, presidente del TOC3 y compañeros de Makintach en el estrado, decidieron una semana después anular el juicio. La consecuencia es que el debate debe arrancar de cero. El juicio Maradona II arrancaría en febrero. Ya está viciado.
En tres meses de audiencias nunca se llegó al lapso puesto en cuestionamiento: qué pasó en esos catorce días entre que Maradona salió de Clínica de Olivos operado de un hematoma subdural y el día de su muerte en la casa del Tigre, donde habían montado un dispositivo de cuidados domiciliarios.
Dos series sobre el juicio: la que quedó trunca y una hecha a las apuradas
Juan Manuel D'Emilio, publicista de trayectoria, tiene derecho y razón en plantear esto: “No dejo de sorprenderme con lo que acabo de enterarme. Apenas un par de horas de terminado este escrito, hoy, 10 de julio de 2025, se anuncia el estreno de la serie titulada "Maradona: el juicio que no fue", de la plataforma de streaming DGO; en la que participarían los querellantes de esta causa, abogados, imputados, familiares y testigos, a tan sólo un mes de la anulación del trámite del juicio”. Así arranca el escrito que D'Emilio presentó ante los fiscales Carolina Asprella, Cecilia Chaieb y José Amallo –que investigan a Makintach por su participación en la miniserie Justicia Divina– al que elDiarioAR tuvo acceso.
D'Emilio, fanático de Maradona, se ocupó de confeccionar la escaleta del audiovisual de seis episodios que sería protagonizado por Makintach. No está imputado. La idea original “del proyecto amateur” no la había tenido él sino María Lía Vidal, alias “La Negra Vidal”, amiga de la infancia de la jueza. ¿Cómo surgió la idea de hacer un serie? En un cumpleaños, unas semanas antes del inicio del juicio que terminó anulado. En su escrito, D'Emilio dice que la proximidad del estreno de “Maradona: el juicio que no fue", producida por DirectTV, y la anulación del debate –por el audiovisual en el que él trabajaba– “no hace más que generar en mí el convencimiento sobre la existencia de intereses oscuros y alejados del deseo de esclarecer las causas de la muerte de Diego Armando Maradona, por un lado; y del absoluto y descarado oportunismo con que se me ha injuriado y destratado, por el otro”.
La presentación de los cuatro capítulos de "Maradona: el juicio que no fue" es bastante parecida a la idea original de La Negra Vidal, en la que D'Emilio había sido invitado a colaborar. De acuerdo a la descripción de la serie de DirectTV “el documental reconstruye los últimos días de Maradona y los aspectos más desconocidos del proceso judicial que rodeó su muerte. La serie ofrece una inmersión profunda en el drama íntimo y legal que marcó el final del ídolo más grande del fútbol mundial (...). Cada episodio aborda una dimensión esencial del caso: el traslado a la casa del Tigre, su frágil estado físico y emocional, las decisiones médicas, el minuto a minuto de su muerte, las irregularidades en la atención...”.
Sigue la sinopsis, pero basta eso para empatar con Justicia Divina. La diferencia, quizás, es que la serie de DirectTV no cuenta con el punto de vista de la jueza que integraba el Tribunal, y que está vendida como un “informe periodístico” dividido en cuatro, un docu-instant, hecho con archivo y entrevistas en piso, a las apuradas. La plataforma para verlo es paga. Hay un tráiler. Hablan para la miniserie Fernando Burlando, abogado de Dalma y Gianinna; y Mario Baudry, representante de Dieguito Fernando. De Dalma levantaron una nota que dio en la puerta de los Tribunales de San Isidro. Hay imágenes de Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov y del psicólogo Carlos Díaz.
En el escrito presentado a la Fiscalía 1 de San Isidro, D'Emilio marca la diferencia conceptual entre teaser y tráiler, y entre guion y escaleta. Confirma que Makintach estaba al tanto de la maqueta, es decir, el teaser, que es privado y se ofrece “para que algún supuesto interesado en el proyecto viera bases sólidas y pudiera conocer a la jueza bajo la mirada de una cámara”.
Para D'Emilio, retirado de la industria publicitaria y abocado a la escritura independiente, la posibilidad de un documental sobre el juicio era “una oportunidad única”, un potencial “hito en su carrera”. En el cumpleaños en el que coincidió con Makintach, la jueza le dijo que el debate era oral y público. Con La Negra Vidal como enlace, el escritor supuso que su presencia en la sala estaba permitida. D'Emilio no participó de las grabaciones del 9 de marzo y tampoco estuvo en el recinto el 11, día de arranque del juicio. En ese momento, pasaba sus vacaciones en Uruguay.
Makintach: Kicillof aun no se pronunció sobre su renuncia
Mientras avanza el jury que investiga a Julieta Makintach, el gobernador bonaerense Axel Kicillof no se expidió todavía sobre la renuncia a su cargo que presentó la jueza. Si acepta su dimisión, la magistrada evita el juicio político. Si la rechaza, deberá someterse a ese proceso. En medio de la campaña por la elecciones intermedias, a Kicillof no lo corre ningún plazo.
También hay novedades sobre el juicio Maradona II: el martes, vía bolillero se sortea el reemplazo del juez que se excusó por razones de salud, Alejandro Lago, del TOC7. Hay 18 candidatos a ocupar su lugar. Aun falta nombrar al cuarto juez, un suplente, pedido hecho por los fiscales Iribarren y Ferrari.
VDM/MG