Datos del Indec

La inflación de octubre fue de 6,3% y rompe la incipiente tendencia a la baja

La inflación de octubre fue 6,3% y acumula en lo que va del año 76,6%. El dato mensual superó el de septiembre, que fue del 6,2%, y rompe así la tendencia a la desaceleración que se evidenciaba a partir de julio, cuando el IPC hizo un pico de 7,4%. El Gobierno espera comenzar a moderar las subas con la entrada en vigencia, en diciembre, del programa Precios Justos y una serie de acuerdos sectoriales. 

El número informado este martes por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) está por debajo de lo que pronosticó el mercado, que preveía una inflación del 6,5% para octubre según el relevamiento que realiza mensualmente el Banco Central. De acuerdo con esa fuente, la inflación fluctuará en torno al 6% por lo menos hasta abril de 2023, mes donde se cortan las proyecciones. 

La división Comunicación (12,1%) fue la de mayor aumento en el mes, explicado principalmente por la suba de los servicios de telefonía e internet. Le siguió Vivienda (7,5%), por la combinación de ajustes en electricidad, gas y agua con un nuevo incremento en los salarios de encargados de edificios. En lo que respecta a tarifas, de todos modos, la suba se moderó respecto de la prevista inicialmente porque se retrasaron las quitas de subsidios en algunos servicios por cuestiones burocráticas. 

En octubre también se reflejaron los aumentos salariales de las trabajadoras de casas particulares, con impacto en la categoría Equipamiento y mantenimiento del hogar (4,9%); la cuota de la medicina prepaga, que incidió en la división Salud (7,1%). Las subas de peajes y combustibles y el arrastre que dejó el alza de las tarifas del transporte público en septiembre impactaron sobre la división Transporte (4,5%).

Comparada con el mismo mes de 2021, la inflación fue de 88%, número que hace prever que terminará el año en torno al 100% que proyectan las consultoras privadas

A diferencia de otros meses, el impulso de la suba no provino de una categoría puntual. Si bien se destaca el alza más marcada de las comunicaciones, los analistas ya advertían una situación de “suba generalizada”. La gran mayoría de las categorías se encarecieron en un solo mes en el orden del 6% ó 7%. 

Los alimentos y bebidas no alcohólicas, categoría con la mayor incidencia en las canasta de todas las regiones, se encarecieron 6,2%. Por fuera de algunas frutas y verduras que dieron saltos abruptos  por cuestiones estacionales y climáticas (por ejemplo, la papa subió 57,6% en el mes; la batata, 48,4%), otros alimentos escalaron un peldaño muy alto en octubre. La leche fresca entera en sachet se encareció 17,3%; el aceite de girasol, 13%; la gaseosa cola, el agua embotellada y las arvejas en lata, 12%. Las carnes subieron por debajo del promedio: entre el 1,2% de la carne picada y el 4,9% del pollo entero. 

De todos modos, en los pequeños comercios, donde no aplican los programas oficiales de control de precios, la suba suele ser más pronunciada. El Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCI), que mide una canasta de alimentos básicos en el Gran Buenos Aires, concluyó que en octubre la escalada fue de 7,74%. 

Comparada con el mismo mes de 2021, la inflación fue de 88%, número que hace prever que terminará el año en torno al 100% que proyectan las consultoras privadas. La suba interanual más alta es la de la categoría prendas de vestir y calzado, que escaló 121,5% en los últimos 12 meses, seguida de restaurantes y hoteles, que también se ubicó cómodamente por encima del 100% (105,2%). 

El Gobierno buscará contener la inercia hacia adelante ayudado del programa Precios Justos, que postula como una de las piezas de su estrategia económica general. Ese programa, que reemplazará a Precios Cuidados, promueve un congelamiento por cuatro meses de una canasta de cerca de 2.000 productos y busca imponer un ritmo de suba no superior al 4% mensual a los ítems que quedan por fuera. De todos modos, entrará en plena vigencia recién en diciembre, con lo cual el índice de noviembre –el próximo que se difundirá– todavía no dará cuenta de su efecto. 

La estrategia de Massa incluye también los acuerdos sectoriales; ya hay dos vigentes con el sector textil e indumentaria y esta semana buscará avanzar con un entendimiento con el rubro de insumos difundidos. 

DT