Cruje la lealtad peronista: grupos cristinitas convocan para el 17-O una marcha “paralela” a la de la CGT

Todos los peronismos, en varios “17” y con múltiples identidades. Esa fecha “patria” del PJ, a un mes de la derrota de las PASO y con pronóstico reservado sobre el futuro político del Frente de Todos (FdT), perfila la dispersión del panperonismo y amaga con volver a poner sobre la mesa otro manojo de tensiones que cruzan, en todas direcciones, el dispositivo oficial.

Por cuestiones de calendario, la mayor movilización por el Día de la Lealtad, mojón emblema de las efemérides del PJ, se hará un lunes porque el 17 cae domingo y, además, coincide con el Día de la Madre. Lo organizó la CGT, con bendición de Alberto Fernández, soporte del PJ y apoyo de las organizaciones sociales. Pero más que de almanaque, el pulseo en torno a la marcha, los convocantes y la fecha es un asunto de diván para la amplísima, diversa y convulsionada familia peronista.

En estas horas, a cuatro días de la marcha oficial, irrumpió con más fuerza una nueva tensión a partir de la convocatoria a una movilización “paralela” a la que oficial. La otra marcha se proyecta para el domingo 17 a la tarde y a Plaza de Mayo, mientras que la que convocan CGT, el PJ y las organizaciones, es el lunes y de unas pocas cuadras por avenida Independencia hasta el monumento al trabajo en Paseo Colón.

Desde hace días circula, un poco silvestre, otro poco motorizada por grupos focalizados y dispersos, el planteo de una movilización “pura”, sin la intermediación de CGT, y el domingo. Esa idea ganó fuerza este jueves cuando Andrés “Cuervo” Larroque, ministro de Desarrollo Social de Axel Kicillof y además secretario general de La Cámpora, se plegó a los convocantes a esa jornada y anunció que participaría en persona aunque, se aclaró luego, no será en nombre de La Cámpora sino como parte de otro colectivo político llamado “La Patria es el Otro”, un mix de agrupaciones que se lanzó oficialmente hace algunos días con un acto en Ensenada del que participaron Máximo Kirchner y Juan Zabaleta, además de la candidatura Victoria Tolosa Paz.

Desde hace días comenzó el llamado de otros sectores y personalidades afines al cristinismo, entre ellas Hebe de Bonafini, titular de Madres de Plaza de Mayo, que levantó un menú de consignas propias, entre ellas la de rechazar cualquier acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Creo que la gente va a ir a la Plaza. Me parece que es natural, que hay una gran expectativa y una voluntad del conjunto de la militancia de expresarse el 17”, dijo el funcionario durante una entrevista con radio El Destape. “También el 18 hay otro acto convocado. Me parece que será el 17, el 18 y muchos días más que nos encuentren movilizándonos porque eso hace la esencia del peronismo y de nuestra fuerza política”, agregó.

Larroque apareció como convocante no desde La Cámpora sino desde ese grupo. Llevará, asi y todo, la propuesta a la mesa de la agrupación que tiene como jefe político a Máximo Kirchner para que también participe de la jornada del 17. Hasta ahora, La Cámpora resolvió acompañar la movilización oficial del lunes aunque de manera si se quiere simbólica, dejando la centralidad a los gremios y las organizaciones.

Lo de Larroque, ministro de Kicillof, es peculiar. Lanzó su LPO con la presencia de Máximo pero hace tiempo contiene, por fuerza de La Cámpora, a otras organizaciones y grupos. Es difícil imaginar que los movimientos de Larroque no tengan un guiño o una validación de Máximo. Esos movimientos, de todos modos, alimentan las teorías sobre tensiones internas de la agrupación sobre la orientación y el ritmo, un viejo antagonismo entre Larroque y Eduardo “Wado” De Pedro, el primero más radicalizado, el segundo más centrista.

En paralelo, en la semana en la que el FdT vivió en peligro, luego de la derrota entre renuncias y cartas y dinamita para todos, la CGT fue uno de los sectores que jugó más fuerte a favor de Fernández cuando ardía la relación entre el presidente y su vice, Cristina Kirchner. En esos días incendiarios, Héctor Daer cuestionó la actividad de la vice y de Máximo Kirchner. Es una vieja tirria que nunca se aplacó y tiene, además, derivaciones en todos los frentes: el armado de listas, las pertenencias en el gabinete, las terminales en la fórmula del FdT.

El domingo, según explican desde La Cámpora, habrá “presencia” en la plaza de carácter personal de distintos dirigentes y sectores aunque se mantendrá como marcha oficial de la del lunes. “Compañeros y militantes van a ir el domingo, es una movilización inorgánica, no es una marcha opuesta a la del lunes”, apuntó una fuente de la agrupación.

La marcha de la CGT está prevista para el lunes con la consigna: Desarrollo, Producción y Trabajo, a las 2 de la tarde desde Independencia y Defensa hacia el monumento al Trabajo girando en Av.Paseo Colón hacia Av.Belgrano. La marcha será sin oradores y, los organizadores, pidieron que los participantes usen barbijo y respeten el distanciamiento social. En CGT hablan de una concurrencia de 200 mil personas. Habrá, se supone, un saludo de Alberto Fernández como presidente del PJ aunque el gobierno no quiere aparecer como organizador, entre otros motivos, por la cuestión de las medidas de cuidado sanitario.

PI