Los mercados mostraron su entusiasmo tras los resultados de las PASO y aguardan que se confirme la tendencia

Tal como se anticipaba, la amplia y sorpresiva victoria de la oposición en las elecciones primarias derivó en un arranque de semana eufórico en los mercados. Las acciones de empresas argentinas que cotizan en Wall Street, conocidas como ADRs, cerraron el lunes con alzas de hasta 16% y y también escalaron los bonos argentinos, con subas cercanas al 5%. 

Por otra parte, el dólar blue bajó $4, se ubicó en $181, y llevó la brecha con el oficial por debajo del 90%. En el mercado formal, la divisa cerró en $103,6 según el promedio diario que elabora el Banco Central, el mismo valor que el viernes pasado. Los dólares financieros, CCL y MEP, se encarecieron apenas por encima de 0,5%. 

También acusó recibo el riesgo país, ese indicador elaborado por JP Morgan que compara los rendimientos de los bonos argentinos con los de Estados Unidos: cayó 4,2% y se ubicó en 1.476 puntos básicos. En su pico de 2020, este mismo dato estaba por encima de los 4.000 puntos.  

“Es razonable que todo suba, porque no estaba internalizado en precios el triunfo de Diego Santilli en la provincia de Buenos Aires y la pérdida de quórum del Frente de Todos en Senado”, dijo a elDiarioAR Juan Ignacio Paolicchi, de Emipria. La pregunta es ahora si los inversores mantendrán el optimismo o si se trata de una reacción circunstancial a resultados sorpresivos y mucho más amigables de los que esperaban. 

El propio Paolicchi considera que “el mercado va a esperar a que se consolide este resultado en noviembre”. Tal como adelanta Facimex Valores, los números que arrojaron las urnas importan más por sus señales hacia 2022-23 que por los potenciales cambios en la relación de fuerzas en el Congreso, por eso los inversores se están enfocando más en los resultados a nivel nacional.

Para Federico Furiase, economista de Anker Latinoamérica, los resultado dibujan un trazo más perdurable. “Esta derrota contundente del oficialismo, que deriva en un cambio de balance al interior del Congreso en favor de la oposición, genera un repricing en los activos financieros que es estructural y va más allá de la reacción de hoy, consistente con una suba en los precios de las acciones y con una curva de bonos en dólares que puede rendir 200, 300 punto básicos menos de lo que rendían el viernes”, consideró.

Furiase identificó un riesgo en la posible “radicalización del Gobierno”, que podría generar una mala lectura del mercado. De todos modos, anticipó que esa estrategia tiene un límite. “Es posible que el Gobierno intente poner toda la carne en el asador, plata en el bolsillo de la gente antes de las elecciones, pero hay una restricción financiera que pone límites y no veo que rompa las negociaciones con el FMI —detalló—. Es una macroeconomía flujodependiente donde no hay margen para seguir de largo sin acordar con el Fondo; no hay nafta en las reservas del Banco Central ni acceso a los mercados internacionales de crédito”. 

Gustavo Neffa, director de Research for Traders y Fin.Guru, consideró que además de la estrategia de dar pasos más certeros en el sentido de recomponer el poder adquisitivo de los argentinos y argentinas, es probable que el Gobierno evalúe la posibilidad de hacer un recambio de figuras dentro del gabinete. De esos movimientos dependerá también, según considera, el humor de los mercados. No es lo mismo Martín Guzmán frente al Palacio de Hacienda que Augusto Costa.

Un informe de Portfolio Personal Inversiones (PPI), que dirige Sabrina Corujo, considera que la victoria de la oposición en las PASO está lejos de arreglar los problemas en los que está sumergido el país, pero representa un “bálsamo de cara a las expectativas futuras”. “No solamente limitaría la fuerza de la coalición gobernante en el Congreso, sino que abriría la posibilidad de un cambio de administración en el 2023. Falta mucho, es cierto. Sin embargo, tan solo aumentando la probabilidad de ese escenario es fundamento suficiente para mejorar el cash flow esperado de todos los activos financieros”, apunta.

Pea los próximos meses PPI anticipa “algo de calma en el CCL, aunque la perspectiva no es muy alentadora para adelante”. Puede generarse una situación de reducción de riesgo país, suba de bonos y acciones, y a su vez, suba del tipo de cambio. Por otro lado, señala que una postura de política económica más “agresiva”, como la que podría tomar el Gobierno para achicar la brecha con Juntos, genera dudas sobre la posibilidad de cerrar el acuerdo con el FMI a corto plazo. “Difícilmente el FMI quiera apurarse en medio de un potencial deterioro de las condiciones económicas y sin tener el aval para posibles condicionantes”. 

DT