Por qué Netflix es el enemigo del sueño

Darío Pescador

elDiario.es —

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Nada como una pandemia mundial para quedarse en casa viendo una buena serie. Aunque la tendencia venía de antes, en 2020 el número de seres humanos que paga por Netlix o algún otro servicio de streaming se disparó hasta alcanzar los 1.1000 millones de personas, un 26% más que el año anterior. A cambio, las salas de cine perdieron un 18% de su cifra de negocio.  

Se podría explicar el ascenso de Netfllix y otros como una consecuencia directa de las restricciones impuestas por la pandemia: si no se puede salir de casa tanto como antes, el ocio se consume en casa. Sin embargo, hay indicios para pensar que se trata de algo más. Ver series compulsivamente, una temporada entera detrás de otra, no es simplemente consumir entretenimiento, es una señal de alarma del cerebro, y algo que está afectando al sueño de millones de personas.

Un estudio reciente comparó los hábitos de ver series en 2015 y 2020 y observó que habían aumentado tanto el consumo de series como los “maratones” en los que se ven tres o más episodios de una hora seguidos. La distracción y el escapismo son formas habituales de enfrentarse al estrés y la incertidumbre, pero los atracones de series están muy relacionados con una mayor soledad, insomnio, depresión y ansiedad

Pensamos que vemos series porque nos relaja, y en efecto, puede ser una actividad relajante. Pero en realidad, también vemos series para evitar pensar en nuestros problemas. Esto coincide además con otra epidemia: la del insomnio. Una revisión de estudios ha comprobado que las alteraciones del sueño han aumentado en todo el mundo durante la pandemia hasta alcanzar al 40% de la población.  

El día solo tiene 24 horas y, a menudo, el tiempo que pasamos viendo series se lo estamos robando al sueño.

Netflix contra el sueño

¿Te has “enganchado” a una serie y te has quedado viendo la temporada entera hasta las 3 de la mañana? No es un fenómeno extraño, porque el diseño de Netflix y otras plataformas está pensado para robarte el sueño: reproducen automáticamente un episodio detrás de otro, y que estrenan temporadas enteras a la vez, en lugar de episodios individuales.

“Tienes una serie o una película que realmente te mueres por ver, y acabas quedándote despierto hasta altas horas de la noche, así que en realidad competimos con el sueño, ¡y estamos ganando!”. Por si todo lo anterior te parece consagratorio, estas son declaraciones textuales de Reed Hastings, fundador de Netflix.

Una encuesta realizada en 2019 por la Academia Americana de Medicina del Sueño (AASM) descubrió que un 88% de los entrevistados había perdido horas de sueño porque se quedó despierto “más allá de su hora” para ver varios episodios de una serie de vídeo. En el caso de las personas de 18 a 44 años, esa cifra se elevó al 95%.

Perder horas de sueño, un día tras otro, se traduce en una deuda de sueño, que nunca se termina de pagar, como las tarjetas revolving. Si cada noche, de lunes a viernes, dormimos seis horas en lugar de ocho, la deuda acumulada es de 10 horas. El fin de semana nunca conseguimos dormir diez horas de más, y la deuda se acumula. 

La falta de sueño afecta muy rápidamente a la salud: aumento del peso y el apetito, diabetes, bajada de defensas, menos neuroplasticidad, y más posibilidades de cometer errores durante el día. Un estudio comprobó que incluso una falta de sueño moderada producía un deterioro cognitivo equivalente a la cantidad de alcohol límite para conducir. 

Además, quedarnos a ver series por la noche altera nuestro ritmo circadiano. Estamos despiertos a una hora en la que deberíamos estar dormidos, según el reloj interno de nuestro cerebro, y expuestos a la pantalla, una fuente de luz azul que suprime nuestra producción de melatonina, la hormona que induce el sueño.  

No, ver series no es relajante

El hecho de que estés en un sillón comiendo chocolate mientras vez una serie por la noche no quiere decir que hayas entrado en un estado de relajación. Este es el motivo: es poco probable que se trate de una serie aburrida, en la que no pasa nada. Con toda seguridad hay tensión, acción, suspense y muchas emociones. Todo esto induce un estado de excitación en tu organismo: aumento de la frecuencia cardíaca y de la presión arterial, así como un estado de alerta sensorial y de inquietud. Esto se llama excitación cognitiva previa al sueño, y en este estado no es posible dormir bien

En un estudio con jóvenes se comprobó que quieres se daban atracones de series tenían un 98% más de probabilidades de tener una mala calidad de sueño debida a la excitación cognitiva previa al sueño como factor clave. 

Resulta bastante irónico que uno de los últimos estrenos de Netflix, la película Disomnia, sea una historia de terror sobre las horribles consecuencias de no dormir. 

Defiende tu sueño de tus series favoritas

Perder horas de sueño viendo historias que ocurren a otras personas no nos ayudan a solucionar nuestros problemas, que seguirán allí cuando termine la temporada, y además arruina nuestra salud. Estos son algunos pequeños cambios que pueden ayudar a cambiar los hábitos:

  • Protégete de la luz azul: baja las luces dos horas antes de ir a la cama y en su caso, usa gafas bloqueadoras de luz azul. Activa el modo nocturno de tu móvil, tablee y ordenador.
  • Vuelve a ver películas o episodios antiguos: si lo que quieres es dormir, ver una historia que ya conoces es más relajante que ver un episodio nuevo.
  • Saca la televisión del dormitorio: tu cama debe ser un altar y tu dormitorio un santuario, llevarte las series a la cama es una mala idea, es la mejor forma de que interfieran con tu sueño. 
  • Prepárate para dormir: empieza a desconectar entre media hora y una hora antes de acostarte, y esto incluye ver series. Si te metes en la cama con el cerebro activado por el suspense, dormir se hará más difícil.

¿En qué se basa todo esto?