El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este domingo que ordenó la reapertura y ampliación de la cárcel de Alcatraz para enviar a los delincuentes “más violentos de Estados Unidos”. La prisión de máxima seguridad, ubicada en una isla de difícil acceso frente a San Francisco (California) estuvo cerrada por más de 60 años. En un post en Truth Social, el republicano explicó que pidió a la Oficina Federal de Prisiones (BOP), con el Departamento de Justicia, el FBI y el Departamento de Seguridad Nacional, reabrir “un alcatraz ampliado y reconstruido”.
“Cuando éramos una Nación más seria, en el pasado, no dudábamos en encerrar a los criminales más peligrosos y mantenerlos alejados de cualquier persona a la que pudieran hacer daño. Así es como debe ser. Ya no toleraremos a estos delincuentes en serie que siembran suciedad, derramamiento de sangre y caos en nuestras calles”, escribió el presidente. Un portavoz de la Oficina de Prisiones declaró a The Associated Press que la agencia “cumplirá con todas las órdenes presidenciales”.
En el post, Trump también insinúa que las personas sin papeles podrán ser enviadas a esta cárcel. “No seremos rehenes de criminales, matones y jueces que temen hacer su trabajo y no nos permiten expulsar a delincuentes que ingresaron ilegalmente a nuestro país”, señaló el mandatario estadounidense.
De hecho, también volvió a atacar veladamente a los jueces: “Ya no seremos rehenes de criminales, matones y jueces que tienen miedo de hacer su trabajo y permitirnos expulsar a los delincuentes que entraron ilegalmente en nuestro país”. Trump, al regresar a la Casa Blanca el domingo por la noche, remarcó que la idea de reabrir Alcatraz se le ocurrió ante la frustración con los “jueces radicalizados” que han insistido en que los deportados reciban un proceso judicial. Alcatraz, afirmó, fue durante mucho tiempo un “símbolo de la ley y el orden. Tiene una larga historia”.
En reiteradas ocasiones, el presidente se quejó de los fallos judiciales que han evitado que envíe a migrantes la prisión Cecot en El Salvador. La escalada de la guerra contra los jueces llegó al punto que la semana pasada, el FBI detuvo a una jueza de Wisconsin por considerar que había “obstruido” el arresto de una persona sin documentos.
La reapertura de Alcaraz es una idea que el entorno Trump ya había insinuado el pasado mes de enero. Durante la firma de una orden ejecutiva para poder deportar migrantes a Guantánamo, su hijo Donald Trump Jr. compartió el vídeo comentando que se podría hacer lo mismo con Alcatraz. “Ahora esta sí que es una gran idea. ¿¡¿Quizás deberíamos reabrir Alcatraz también?!?”, escribió Trump Jr.
Alcatraz funcionó desde 1934 a 1963. La prisión, con una extensión de 2,01 km² cerró un año después de que tres hombres escaparan y desaparecieran. Aunque la BOP aseguró que el cierre fue a raíz del elevado coste que suponía mantener en funcionamiento el centro penitenciario. Tan solo el mantenimiento de la prisión costaba entre 3 y 5 millones de dólares. Por lo que se espera que la reapertura y ampliación que Trump ha anunciado sea una medida costosa y compleja. Más allá del imaginario de Hollywood, Alcatraz actualmente es un importante sitio turístico que está gestionado por el Servicio de Parques Nacionales.