En los casi dos años que Javier Milei lleva en el poder los programas destinados a prevenir y atender la violencia de género cayeron un 89%. El programa Acompañar, creado para darle cobertura a mujeres víctimas de violencia de género, pasó de asistir a 100.000 personas en 2023 a 434 en el primer año de administración libertaria. En lo que va de este 2025 la asistencia es tan insignificante que ni siguiera figura como partida presupuestaria identificable.
La línea 144, el principal canal de acceso a atención y protección de las víctimas, redujo en dos tercios su presupuesto en 2024 mientras que el personal también fue achicada en un 45 %. Para 2026, se espera que la situación siga empeorando: la meta es asistir a 60.000 personas, un tercio de las que se atendían en 2023.
Los datos surgen de analizar el presupuesto 2026 y fueron elaborados la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) junto al Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA). Son apenas una muestra de como la motosierra del Presidente se ha ensañado especialmente con las politicas de género pero coincide tanto con un período electoral –en el que se espera escuchar de los candidatos sus propuestas– como con un mes donde la violencia machista parece haber desatado su furia para recordar que sigue estando presente.
Según la organización feminista Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá), en lo que va del año se produjeron 196 femicidios, uno cada 35 horas. Pero en este octubre electoral, la cifra se elevó a 1 cada 28 horas. En total, hubo 11 víctimas.
Dos de esas víctimas son Luna Giardina y su mamá, Mariel Zamudio, asesinadas por Pablo Laurta. El femicida, apresado cuando intentaba huir con su hijo y luego de asesinar en el escape a un remisero, es uno de los impulsores de Varones Unidos, una comunidad digital de Uruguay creada para “proteger los derechos de los hombres” y que tiene entre sus ideólogos a Agustín Laje y Nicolas Márquez, dos de los “intelectuales” preferidos del Presidente.
En este mes electoral donde casi a diario una mujer fue asesinada, una de las pocos voces del oficialismo que se refirió al tema fue la ministra de Seguridad y también candidata, Patricia Bullrich. “Si lo que vos hacés es generar una idea de que estás empoderada y sos capaz de pisotear a cualquiera, sea hombre, tu padre o tu madre; si a alguien lo pisoteás, finalmente lo que termina pasando es que te viene en contra”, dijo en Carajo, el streaming libertario donde las mujeres brillan por su ausencia y lo que sobra es la testosterona de sus conductores. “El desequilibrio que se generó con el feminismo extremo lleva a situaciones donde la violencia es tan fuerte que termina destruyendo a la misma persona que genera esa lógica”, siguió Bullrich.
Karen Reichardt, quien compite por una banca en la Cámara de Diputados pero por la provincia de Buenos Aires, también salió a cruzar al feminismo pero por motivos mas mundanos. En un tweet se enojó con quienes la critican por usar su nombre artístico y no el verdadero –el menos glamouroso Karina Vázquez– y explicó que en realidad el Reichardt es de algún modo una ¿reinvindicación feminista? porque es el apellido de su abuela materna. Lo cierto es que la candidata libertaria terminó la semana con otro polémica a la altura de Bullrich: Repitió –ya lo había hecho antes– que quienes votan al kirchneristmo “tienen una enfermedad mental”. Hasta Diego Santilli, primero en la lista violeta, tuvo que salir a aclarar que la frase le parecía “desafortunada”.
Desde su segundo puesto en la boleta de La Libertad Avanza de Buenos Aires, Reichardt tiene asegurado su ingreso a la bancada oficialista en Diputados, donde compartirá banca con Lilia Lemoine, una de las personas de máxima confianza del presidente Javier Milei, quien, ademas de ser corista de La Banda Presidencial, es una de sus máximas defensoras allí donde la llamen. El pasado 9 de octubre, la diputada publicó en su cuenta de X un posteo de otro usuario, Ave Miler, uno de los tantos que integran la maquinaria libertaria que plagan las redes de noticias falsas, imágenes manipuladas con inteligencia artificial o panegíricos del Presidente. El tweet en cuestión prometía “JAVIER MILEI TRABAJA INCANSABLEMENTE PARA QUE TENGAS ESTO”. Acompañaba el texto escrito en mayúsculas dos fotos , una de Lemoine y otra de la candidata bonaerense Karen Reichardt. Ambas posando en bikini.
Lemoine lleva casi dos años como diputada, dos años en los que presentó dos proyectos, según figura en su página web de la Cámara baja. Uno es del 15 de abril de 2024 y es un proyecto de Declaración expresando la condena al genocidio armenio. El otro es un proyecto de ley para modificar el Código Penal para sancionar las falsas denuncias en causas relacionas con violencia de género, violencia familiar, abuso o acoso sexual, algo que de hecho la legislación actual ya castiga. Entre los fundamentos, Lemoine menciona el apoyo de la Fundación Morelli, una organización que impulsó una denuncia contra el gobierno bonaerense por la distrubución del libro Cometiérra de Dolores Reyes en las escuelas de la provincia. El único proyecto de la diputada, hasta ahora, nunca prosperó.
MG