Después de pasarse semanas acusando al Gobierno de Nigeria de no hacer frente a la persecución de los cristianos, Donald Trump anunció una serie de ataques en el país africano el día de Navidad.
Los ataques, dirigidos contra militantes del Estado Islámico (EI) en el norte del país, suponen la última intervención militar en el extranjero de Trump, quien durante su campaña presidencial de 2024 prometió sacar a Estados Unidos de décadas de “guerras interminables”.
¿Qué sabemos sobre los ataques?
En su anuncio, Trump dijo que los ataques estaban dirigidos contra militantes del Estado Islámico que estuvieron “atacando y asesinando brutalmente, principalmente a cristianos inocentes, a niveles nunca vistos en muchos años, ¡e incluso siglos!”.
Una fuente del Departamento de Defensa dijo a Associated Press que Estados Unidos colaboró con Nigeria para llevar a cabo los ataques y que estos fueron aprobados por el Gobierno de ese país. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Nigeria afirmó que la cooperación incluye el intercambio de información y la coordinación estratégica.
Las Fuerzas Armadas nigerianas remarcaron este viernes que lanzaron ataques aéreos de manera conjunta. “Las Fuerzas Armadas de Nigeria, en colaboración con Estados Unidos de América, han llevado a cabo con éxito operaciones de ataque de precisión contra elementos extranjeros identificados, vinculados al EI, que operan en zonas del noroeste de Nigeria”, declaró el portavoz de las Fuerzas Armadas. “Los ataques se basaron en información fidedigna y una cuidadosa planificación operativa, con el objetivo de debilitar la capacidad operativa de los terroristas, minimizando al mismo tiempo los daños colaterales”.
¿Por qué Trump se centra en Nigeria?
Durante años, parte de la derecha estadounidense ha estado amplificando las denuncias de que los cristianos están siendo perseguidos en Nigeria. En septiembre, el senador republicano Ted Cruz presionó para que se sancionara a los representantes nigerianos que “facilitan la violencia contra los cristianos y otras minorías religiosas, incluidos los grupos terroristas islamistas”.
Las denuncias de que los cristianos sufren persecución religiosa en el extranjero se han convertido en una importante fuerza motriz para la base de Trump, y entre los seguidores más entusiastas del presidente de EEUU están los cristianos evangélicos.
A principios de este año, Trump pareció actuar en respuesta a algunas de estas preocupaciones al designar a Nigeria como “país de especial preocupación” en virtud de la Ley de Libertad Religiosa Internacional de Estados Unidos, tras semanas de presión por parte de legisladores estadounidenses y grupos cristianos conservadores. Poco después, ordenó al Pentágono que comenzara a planificar una posible acción militar en el país. En ese momento, el presidente dijo que podría intervenir “a tiros” si el Gobierno nigeriano seguía “permitiendo el asesinato de cristianos”.
¿Existe una persecución religiosa en Nigeria?
En el pasado, el Gobierno de Nigeria ha respondido a las críticas de Trump afirmando que personas de muchas confesiones, no solo cristianos, sufren a manos de grupos extremistas que operan en todo el país.
Nigeria es oficialmente un país laico, pero está dividido casi a partes iguales entre musulmanes (53%) y cristianos (45%), y el resto de la población practica religiones tradicionales africanas. La violencia contra los cristianos ha suscitado una gran atención internacional y a menudo se presenta como persecución religiosa, pero la mayoría de los analistas sostienen que la situación es más compleja y que los ataques pueden tener motivaciones diversas.
Por ejemplo, los enfrentamientos mortales entre pastores musulmanes itinerantes y comunidades agrícolas predominantemente cristianas tienen su origen en la competencia por la tierra y el agua, pero se ven agravados por las diferencias religiosas y étnicas. Por otra parte, muchos analistas consideran que los secuestros de sacerdotes son una tendencia impulsada más por el dinero que por el odio religioso, ya que se les considera figuras influyentes cuyos fieles u organizaciones pueden movilizar fondos rápidamente.
¿Qué dice el Gobierno nigeriano?
Tras los ataques del jueves, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Nigeria ha elogiado la cooperación con Estados Unidos, pero se ha negado rotundamente a reconocer que las acciones de este país tuvieran algo que ver con la persecución de los cristianos.
“La violencia terrorista en cualquiera de sus formas, ya sea dirigida contra cristianos, musulmanes u otras comunidades, sigue siendo una afrenta a los valores de Nigeria y a la paz y la seguridad internacionales”, dice el Ministerio en un comunicado.
Los sucesivos gobiernos nigerianos han luchado por controlar la crisis de seguridad que se ha ido agravando en el país, con miles de personas asesinadas y cientos más secuestradas en los últimos años.
En el noreste, Boko Haram y sus grupos escindidos, como la Provincia del Estado Islámico de África Occidental (Iswap), han llevado a cabo una insurgencia desde 2009, que ha causado decenas de miles de muertos y millones de desplazados. En el noroeste, grupos criminales fuertemente armados, a menudo denominadas “bandidos”, llevan a cabo secuestros masivos y redadas que afectan tanto a las comunidades musulmanas como a las cristianas.
El Gobierno de Nigeria ha respondido anteriormente a las críticas de Trump afirmando que personas de muchas religiones, no solo cristianas, han sufrido a manos de estos grupos.
El mes pasado, el presidente de Nigeria, Bola Ahmed Tinubu, afirmó que la caracterización de Nigeria como un país intolerante en materia religiosa no refleja la realidad. “La libertad religiosa y la tolerancia han sido un principio fundamental de nuestra identidad colectiva y siempre lo serán... Nigeria es un país con garantías constitucionales para proteger a los ciudadanos”.