Cocaína adulterada

El “error del cocinero” y el ensayo para introducir el fentanilo en el conurbano

El fentanilo, una droga sintética más potente que la heroína, es más cara que la cocaína. Ese argumento, simple pero contundente, aparece como primer mandamiento para sostener que no tiene sentido que se haya usado como corte para estirar o abaratar la cocaína de venta al menudeo. En la Justicia y la policía, tampoco termina de tomar fuerza la teoría de que se trató de una “cama” entre bandas narcos.

La hipótesis que tomó volumen en estas horas, y que parte de la base de que los antídotos para el fentanilo respondieron y eso supone que efectivamente el “corte” que tiene la cocaína adulterada tiene esa sustancia, sugiere que pudo tratarse de un ensayo para introducir esa droga sintética en el mercado local.

Es, en estos momentos de teorías y especulaciones, una variable que aparece sobre la mesa pero que se propone como “más probable” aunque no se da, todavía, como definitiva. Primero, de hecho, hay que esperar que los resultados toxicológicos certifiquen que el corte que tenía la cocaína adulterada era, efectivamente, fentanilo.

“Se analiza que se trata de una experiencia y no un corte para abaratar”, dijeron fuentes involucradas en la investigación a elDiarioAR y plantearon, en ese marco, que se trató de un ensayo que por el resultado “salió mal”. Se habló, desde otro sector, de la idea de que se trató de un “error del cocinero”, es decir el que se encarga de controlar y hacer el corte de la droga. Sergio Berni, el ministro de Seguridad bonaerense, mencionó de hecho que entre los detenidos estuvo el “cocinero”.

El consumo del fentanilo se disparó en las últimas décadas en EEUU como un reemplazo más barato de la heroína. Además de consumir solo se suele usar como “corte” de la heroína, para abaratarla, y de la cocaína para darle más intensidad al efecto de euforia.

La producción y el consumo está enfocado, sobre todo, en EEUU pero se encontró una “síntesis” más barata y de producción menos compleja procedente de China y México, según se menciona entre fuentes involucradas en la pesquisa sobre lo ocurrió con el caso de la cocaína adulterada que dejó, hasta ahora, al menos 20 muertos y mantenía a una cifra más alta de internados con asistencia respiratoria.

Guerra narco

El planteo del ensayo para introducir un nuevo producto en el mercado local, que salió mal por un “error casero de elaboración para el corte”, parece desactivar la lectura de que se trató de una guerra narco y que el envenamiento fue producto de un ajuste de cuentas. “La experiencia indica que en las guerras entre los grupos no se meten con la calidad de la mercadería”, apuntó una fuente.

El miércoles por la noche, apenas se conoció el hecho, se bajó el tono a la teoría de que se haya tratado de una maniobra de un grupo narco de poner en el mercado cocaína adulterada para perjudicar a otro grupo. La pelea territorial, admiten, se producen y suelen tener formas más rudimentarias.

De ahí, surge el análisis de que se trató de un error de elaboración y que ese error no tuvo que ver con un corte para abaratar la cocaína, sino de un ensayo para ver si se introducía el fentanilo en el mercado local.

La crisis sanitaria y política que generó el episodio se filtró en la gira de Alberto Fernández por Moscú. Axel Kicillof, que integra la comitiva, se mantuvo online con los funcionarios bonaerenses abocados al tema. La noche del miércoles y la mañana del jueves realizó un zoom con un grupo de funcionarios para ponerse al tanto de cómo avanzaba la crisis, por un lado el tema de salud -el alcance- y por el otro la investigación judicial y policial.

Se especuló, en un momento, que Kicillof podría interrumpir la gira y volver a Argentina sin seguir viaje a China. Finalmente, siguió viaje a Beijing. Desde La Plata, el jefe de asesores Carlos Bianco le informó que la situación se había “estabilizado” y que, según los indicios, la ola de casos fatales se había frenado.

Alberto Fernández, en la mañana del jueves, también analizó el tema. Fue uno de los que conversó con funcionarios que participan del viaje.

PI