Coronavirus

Un año después de la primera cuarentena, Fernández reactiva la mesa de gobernadores

El jueves 19 de marzo del 2020, Alberto Fernández encabezó en Olivos la primera cumbre Covid-19 con gobernadores, Al atardecer, sin fisuras, se acordó que a la medianoche el país entraba en cuarentena, una medida que parecía temporal pero que, con múltiples diferencias, todavía perdura.

Puede rankear como aniversario. Este jueves 18, casi un año exacto de aquel encuentro, Fernández reactivará la mesa pandémica que está en stand by desde enero cuando frente al rebrote de fin de año se restringió la actividad nocturna. El menú es dual: el acecho de la segunda ola, más agresiva por las nuevas cepas, y el zigzageante plan de vacunación que logró velocidad crucero pero con incertidumbre de la provisión de dosis.

A las 11:30, según el parte oficial, desde Olivos el presidente compartirá un Zoom con los mandatarios para actualizar el mapa provincia por provincia, con un diagnóstico sobre cómo está el sistema sanitario -informes que se hace semana a semana en las reuniones de los ministros de Salud- y un cronograma, optativo, del flujo de vacunas para el suministro, proporcional, entre las provincias.

El “aniversario” de la cuarentena -en rigor, el domingo 16 se habían suspendido las clases y fijado el home office para los mayores de 60 años- frente al fantasma de una segunda ola aporta otra particularidades: esta semana, con como nunca antes, Horacio Rodríguez Larreta abandonó el tono neutro y mostró un lado aguerrido, con línea política más en línea con el macrismo hard que al histórico perfil moderado.

En ese clima ripioso, Axel Kicillof participará de manera remota desde Trenque Lauquén -tiene agenda, anuncios y gabinete itinerante en el oeste bonaerense- al igual que Larreta que lo hará por videoconferencia. El jefe de Gobierno hace meses que no pisa Olivos y estirará esa lejanía en el encuentro que Casa Rosada apuró en las últimas horas mientras ajusta una paquete de medidas que quiere anticipar a los gobernadores.

En particular, Casa Rosada explora la posibilidad de anular las autorizaciones para salir del país con fines turísticos y reducir al mínimo las excepciones para ingresos y egresos. Esta semana, fuentes oficiales indicaron que otra alternativa es que el PCR y el alojamiento durante los 14 días de cuarentena obligatoria los deba pagar quien decida salir y luego regresar al país. El modelo Canadá, explicaron en Gobierno.

El registro de contagios no muestra cambios. En la última semana, la media de casos se ubicó en 5450, uno de puntos más bajos desde agosto pasado: el primero, se registró a principios de diciembre con algo más de 4500 casos promedio en los “últimos 7 días” y el otro a mediados de febrero con una media apenas por encima de los 5100 casos. Luego la curva trepó y se estabilizó.

Hay, ahora, una doble amenaza: la llegada de los primeros fríos, con los cambios en los hábitos que eso produce, y la expansión de las cepas más agresivas en países vecinos, puntualmente Brasil y Paraguay. Este miércoles, el ministerio de Salud de Córdoba confirmó el hallazgo de la cepa de Manaos y de la inglesa en casos confirmados en la provincia mediterránea.

Fernández quiere, en paralelo, repasar el plan de vacunación que en los últimos siete días acumuló más de 900 mil aplicaciones pero que se enfrenta a una sombra: el riesgo de que se interrumpa la provisión de vacunas. Este jueves partió un vuelo a Moscú, a buscar otro lote de Sputnik V y fuentes oficiales confirmaron a elDiarioAR que la semana que viene llegará otra partida de Sinopharm, las vacunas compradas a China. Ya enviaron un millón y luego se firmó un contrato por otros 3 millones. Ese no sería, sin embargo, el número de dosis del próximo envío.

Pero el dato donde el gobierno quiere lograr mayor nivel de acuerdo es sobre la vacuna AstraZeneca, que fue objetada en varios países europeos, y es una pieza clave en el mediano plazo para el Plan de Vacunación en Argentina porque es la que, hasta acá, aportará mayor número de dosis: 22,4 millones. Este miércoles, el gobierno difundió un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que recomienda el uso de la vacuna desarrollada en Oxford.

PI