Los cinco aumentos previstos para febrero, con foco en los servicios

A diferencia de enero, que llega con ajustes por la temporada de verano, y de marzo, momento en el que se relanza el año escolar y laboral, febrero no es un mes de alta estacionalidad inflacionaria. Sin embargo, viene acompañado con importantes aumentos, focalizados sobre todo en los servicios. En febrero habrá un nuevo ajuste de tarifas y también subas en las cuotas de prepagas y telecomunicaciones, entre otras.   

1. Gas y electricidad

En el primer mes del año se realizaron audiencias públicas con el fin de definir las subas tarifarias para los servicios de transporte y distribución, que son parte del precio final de las boletas de gas y luz. Los aumentos definidos serán aplicados a partir de febrero, pero todavía no fue comunicado oficialmente el porcentaje. De todos modos, los usuarios recibirán el impacto concreto cuando lleguen las facturas de febrero, a partir del mes siguiente. 

2. Medicina privada 

A partir de febrero comenzará a regir la nueva metodología de ajuste de prepagas definida por el Gobierno a fines de 2022, año en que este servicio escaló por encima de la inflación y superó el 100%. La nueva fórmula de aumento para las cuotas toma como referencia la variación salarial (la remuneración promedio sujeta a aportes al Sistema Integrado Previsional Argentino, conocido como Ripte). 

Por un plazo de 18 meses el incremento de las cuotas no podrá ser mayor al 90% del índice Ripte del mes anterior. Pero esto se aplicará solo a los clientes que tengan ingresos netos inferiores a seis salarios mínimos, vitales y móviles ($406.458 en febrero). Para los titulares que superen ese tope, en cambio, las prepagas aplicarán incrementos mensuales que se regirán de acuerdo al Índice de Costos de Salud, de 8,21% para febrero.

3. Telefonía, cable e internet 

El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) autorizó incrementos de hasta 9,8% en febrero y 7,8% en abril para los servicios de telecomunicaciones. Desde 2020, año en que se definió a las telecomunicaciones como un servicio esencial, el Gobierno debe controlar y autorizar las subas en este sector, algo que en los hechos sucede en pocos casos. Las grandes compañías proveedoras del servicio judicializaron la decisión oficial y están protegidas por medidas cautelares que les permiten continuar disponiendo de sus propias tarifas y aplicar aumentos por encima de los definidos por el ente regulador. 

4. Combustibles

El Ministerio de Economía acordó a fines de 2022 con las empresas petroleras un esquema de subas para la nafta y el gasoil según el cual tendrán un incremento de 4% en febrero, aunque no se confirmó todavía qué día. Para marzo hay otra suba prevista, que es del 3,8% en un intento por mostrar un sendero de desaceleración de la inflación. 

5. Alquileres

Quienes deban renovar sus contratos de alquiler en febrero y estén regidos por la ley vigente tendrán subas en torno al 86%. Ese porcentaje surge del índice de actualización establecido por la Ley de Alquileres vigente, que contempla en partes iguales las variaciones mensuales del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y la variación de los salarios (Ripte). De esta manera, un alquiler de $70.000 pasaría a $130.200. 

Además de estos cinco aumentos, a partir de marzo se sumarán otros ya previstos, también en servicios: transporte público, agua y colegios privados, entre otros. En esta línea, un informe de la consultora Focus Market asegura que una familia tipo de cuatro integrantes (dos adultos y dos menores) que a septiembre de 2022 gastaba $179.000 necesitará casi $320.700 en marzo –un 79% más– por mes solo para pagar los servicios. 

El informe toma gastos promedio a septiembre de 2022 y contempla los aumentos derivados de la quita de los subsidios a las tarifas y también las subas en internet, cable y telefonía. Además, suma el alquiler, los gastos en combustible de automóvil particular, seguro de auto, transporte público y uso esporádico de un traslado en taxi. Por otra parte, asume que los dos menores asisten a un colegio privado, con una cuota mensual que pasaría de $20.000 a $55.000, incluyendo a los dos.

De acuerdo con el ejercicio teórico, esta familia testigo que pagaba por su canasta de servicios $178.928 en septiembre 2022 (fecha en que comenzó el sendero hacia la normalización del precios de los servicios públicos) deberá desembolsar en marzo $320.683 por exactamente lo mismo. Es decir, tendrá un incremento de un 79,2% de su canasta de servicios en solo un semestre.                                                                                                                                                                                                 

“Es importante considerar que hay servicios que aún no aumentaron en relación al nivel de la inflación acumulada en los últimos años o quedaron retrasados frente a los porcentajes de aumento determinados a principios de 2022, cuando se proyectaba una inflación anual de 33%, que terminó siendo casi tres veces superior”, apunta Damián Di Pace, director de Focus Market. “Esto dejará precios de servicios retrasados frente a la inflación pasada y futura por lo cual a lo largo de 2023 se proyectan más aumentos que lo estimado en el informe”, advierte.  

Si a los servicios se sumara la canasta básica de alimentos, los gastos mensuales de esta familia tipo se elevarían a $402.983 en marzo. El informe considera una inflación en alimentos moderada del 4% para los próximos meses, lo que llevaría la canasta a $82.300 en marzo. Si tomamos en cuenta que el salario mínimo vital y móvil a marzo de 2023 que será de $69.500, está familia requerirá 5,8 salarios para cubrir su costo de vida. 

DT