El salario mínimo aumenta 45% y llegará a $47.850 a fin de año

El salario mínimo, vital y móvil aumentará 45% en 2022, según definió esta tarde el Consejo integrado por representantes de las cámaras patronales, sindicatos y funcionarios del Ministerio de Trabajo. La suba, que se repartirá en cuatro cuotas, está por encima de la pauta propuesta inicialmente por el Gobierno, pero por detrás de los pronósticos de inflación para este año, por lo que se prevé una reapertura de la discusión en agosto. 

Con el nuevo aumento el salario mínimo alcanzará en diciembre los $47.850, un valor que está por debajo de la canasta básica familiar de enero y que representa el 60% de la mediana actual de los salarios del sector registrado. 

Según se informó oficialmente, el aumento fue aprobado por unanimidadad, con 31 votos afirmativos y una abstención. Se hará efectivo en cuatro cuotas: 18% en abril, 10% en junio, 10% en agosto y 7% en diciembre. Asimismo, se detalló que “las partes podrán solicitar a partir del mes de agosto una nueva reunión para su revisión”. 

La reunión del Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil, que se realizó de manera virtual, tuvo lugar un día después de que se publicara el dato oficial de inflación de febrero, que arrojó una suba general de 4,7% y de 7,5% en alimentos, una categoría que impacta de lleno en los ingresos de las familias de menores ingresos. De acuerdo con las estimaciones de consultoras privadas, que promedia el Banco Central, la inflación anual estará en torno al 55%. 

En 2021 el salario mínimo pasó de $21.600 a $33.000, lo que significó un aumento acumulado de 52,8%. Inicialmente se definió en abril una suba de 35% en 7 cuotas que, por la aceleración de la inflación, fueron adelantadas. En septiembre se reforzó el monto con una suba extra de 16% en tres tramos, lo que dejó al salario mínimo casi dos puntos por encima de la inflación del año, pero todavía lejos del umbral de necesidades básicas de una familia. De acuerdo con los últimos datos del Indec, correspondientes a enero de 2022, la canasta básica tiene un valor de $78.624, más de dos veces el salario mínimo actual.

Antes de la reunión, la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA-A) había anticipado que solicitaría una suba inicial de al menos 45%, con revisiones posteriores. Hugo Yasky, su secretario general, afirmó que esa mejora debería realizarse “en tramos bimestrales” y que para que el mínimo recupere el poder adquisitivo de finales de 2015 “sería necesario fijarlo en $51.950”.

Claudia Baigorria, de CTA Autónoma, anticipó ayer que buscarían un aumento que apunte a “recomponer el poder adquisitivo perdido y conseguir ganarle a una inflación proyectada que una estimación optimista estima entre 50% y 55%”. El Gobierno, por otra parte, inició las discusiones salariales de este año con la asipiración de instalar una pauta en torno al 40%. 

Aumentar el salario mínimo es, junto con la mejora de los salarios estatales, una de las dos herramientas que el Gobierno tiene a mano para mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores y trabajadoras. Este concepto también impacta en los montos de programas oficiales como el Potenciar Trabajo, cuyo beneficio es la mitad de un salario mínimo. 

Si bien no rige para ninguna actividad en particular, el salario mínimo funciona como una referencia para el sector informal y hubo momentos en que también sirvió como piso de negociación para los privados registrados. Esto último quedó atrás, dado que la gran mayoría de las actividades tienen un salario inicial que lo supera.

Según explicó a elDiarioAR Luis Campos, coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma, en la salida de la crisis del 2001 el Salario Mínimo Vital y Móvil se utilizó como una herramienta para empujar los ingresos al alza, elevando los pisos de discusión. Entre 2005 y 2006 llegó a representar el 70% del promedio salarial, muy cerca del mínimo de convenio, y luego comenzó a desinflarse hasta ubicarse en el nivel actual. A los valores de hoy, el salario mínimo representa el 42% del salario mediano del sector privado registrado.

Los últimos años el valor más alto del salario mínimo en términos reales se registró en septiembre de 2011. Para diciembre de 2021 había caído 44%, lo que quiere decir que se redujo casi la mitad en una década. Si se extrapolaran a la actualidad los valores de septiembre de 2011, el salario mínimo debería ser de $59.166. Este monto es superior a los salarios iniciales de convenio de muchas actividades, por lo que muchos trabajadores registrados perciben hoy un ingreso inferior al salario mímimo a valores de 10 años atrás, calculó Campos. 

De la reunión del Consejo participaron, por el sector empresario, Daniel Funes de Rioja, Juan José Etala, Julio Cordero, Guillermo Moretti y Horacio Martínez (UIA), Carlos Francisco Etchezarreta (CAC), Jorge Hulton (CAMARCO), Ricardo Diab (CAME), Carlos Achetoni (FAA), Abel Guerrieri (SRA), Paulo Ares (CONINAGRO), Alberto Frola (CRA), Verónica Sánchez (FEHGRA), Javier Bolzico (ADEBA), Juan José Gabbi (BCBA), y Jaime Campos (AEA).

En representación del sector trabajador participó Carlos Acuña (Estaciones de Servicio), Héctor Daer (Sanidad), Pablo Moyano, Antonio Caló, Ricardo Peidró (CTA A), Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez, Sergio Romero, José Luis Lingieri, Roberto Fernández, Noemi Geminiani, Gabriela Pérez, Mario Manrique, Noemí Ruiz, Romina Santana y Hugo Yasky.

DT