Al menos seis personas murierony una veintena resulto herida en un tiroteo este lunes en las afueras de Jerusalén, junto a la zona ocupada de la ciudad, según informa el periódico israelí Haaretz.
Una de las víctimas es Sarah Mendelson, de 60 años y nacida en Argentina. Así lo confirmo Bnei Akiva, la organización en la que trabajaba.
La Policía israelí y el servicio de emergencias Magen David Adom (MDA) informaron que los dos presuntos atacantes fueron “neutralizados” junto a la parada de autobús donde tuvo lugar el tiroteo. La Policía detalló posteriormente que un soldado y un civil armado que se encontraban en el lugar “se enfrentaron a los atacantes y respondieron al fuego”.
El tiroteo ocurrió unos minutos pasadas las 10:00 de la mañana hora local en el cruce de carreteras de Ramot –una de las cuales conduce a asentamientos israelíes al noroeste de Jerusalén, como el de Ramot Alon, donde viven judíos ultraortodoxos–.
Otro de los seis muertos en el ataque a tiros de este lunes es un ciudadano español, confirmó el Ministerio de Exteriores. Fuentes consulares y familiares citadas por la Agencia EFE identificaron a la víctima como Yaakov Pinto, un joven español de 25 años natural de Melilla que vivía en Israel, donde se acababa de casar. Pinto murió en el lugar y es la víctima más joven. Según la prensa local, era estudiante de una escuela talmúdica.
Además de Mendelson, los fallecidos son cinco hombres, de entre 25 y 79 años, según detalla Haaretz. Tres de ellos eran rabinos.
El primer ministro Benjamin Netanyahu se reunió con los responsables de seguridad para “evaluar” la situación después del ataque, calificado de terrorista por las autoridades. Además, Netanyahu y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, acudieron al lugar del ataque.
El jefe del Gobierno ultraderechista ha declarado a la prensa que Israel está “librando una dura guerra en múltiples frentes contra el terrorismo”. “Estamos persiguiendo y cercando las aldeas de donde vinieron los asesinos. Atraparemos a todos los que los ayudaron y los enviaron y tomaremos medidas aún más duras”, ha prometido Netanyahu.
Por su parte, Ben Gvir, de tendencia ultranacionalista, ha defendido su plan de armar a los ciudadanos israelíes, algo que su Departamento empezó a hacer después de los ataques de Hamas del 7 de octubre de 2023 contra el sur de Israel –tras los cuales Tel Aviv emprendió su brutal ofensiva de castigo contra la Franja de Gaza–.
El ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, ha confirmado que los dos atacantes eran palestinos. “Dos terroristas palestinos asesinaron a judíos a bordo de autobuses en la entrada de Jerusalén”, ha dicho Saar en una ruda de prensa en Budapest.
Los atacantes llegaron en un vehículo y dispararon contra la gente que esperaba en el lugar, según un portavoz para la prensa internacional de la Policía de Israel. “Es un claro acto de terrorismo, tenían a civiles inocentes como objetivo”, ha afirmado el portavoz Dean Elsdunne.
El jefe de personal del servicio de emergencias israelí Magen David Adom, Uri Shaham, ha explicado que los dos hombres dispararon desde la calle, hiriendo tanto a la gente que esperaba en la parada como a los pasajeros de un autobús. Según The Jerusalem Post, los asaltantes subieron al autobús de la línea 62 y abrieron fuego contra los viajeros.
En vídeos que circulan en las redes sociales se puede ver el caos alrededor de la parada de autobús y en la carretera, donde transitaban bastantes vehículos en ese momento. El de este lunes es uno de los ataques de este tipo más mortíferos de los últimos años en Jerusalén.
El Ejército israelí anunció el despliegue de soldados en la zona donde se produjo el tiroteo y también en las afueras de la principal ciudad de Cisjordania, Ramalá. El Jefe del Estado Mayor de la defensa, Eyal Zamir, también ha acudido al lugar del ataque, donde ha anunciado “el cierre total de la zona de donde provenían los terroristas”. “Continuaremos con un esfuerzo operativo y de inteligencia decidido y continuo, perseguiremos a las células terroristas en todas partes y desmantelaremos la infraestructura terrorista y a sus organizadores”, ha dicho, según un comunicado.
Por su parte, el grupo palestino Hamas ha afirmado en un comunicado que el ataque es “es una respuesta natural a los crímenes de la ocupación [israelí] y a la guerra de exterminio que libra contra el pueblo palestino” en Gaza, donde las fuerzas israelíes han matado a más de 64.000 personas desde octubre de 2023. Sin embargo, no ha asumido la autoría del ataque.