Mariano Cúneo Libarona dejará el cargo al frente del Ministerio de Justicia el próximo lunes, luego de que La Libertad Avanza (LLA) se mida el próximo domingo contra Fuerza Patria por la composición del Congreso Nacional.
“El lunes se va. Ahora empezó su propio relato”, confirmaron en el Gobierno. De esta forma, la salida de Cúneo se suma a la del canciller Gerardo Werthein, quien envió su renuncia con fecha del lunes 27 de octubre pero también para hacerse efectiva la semana próxima.
“Me voy muy feliz. Dejé la vida en la gestión. Más que por la salud, es por la necesidad de recuperar mis afectos. De acá en adelante voy a ayudar gratis en lo que el Gobierno precise”, sostuvo el titular de Justicia en diálogo con Infobae.
Su segundo, Sebastián Amerio, un cuadro del universo Santiago Caputo, figura entre los posibles reemplazantes, aunque desde su entorno lo ven lejano.
Así, el juego podría abrirse a referentes del PRO bien ponderados por los libertarios, como el actual intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, futuro legislador bonaerense, con experiencia en la materia, que anota su nombre para la sucesión.
También los rumores apuntan a una posible unificación de las carteras de Seguridad Nacional y Justicia.
El posible sucesor de Cúneo pidió debatir una reforma constitucional y una “perpetua real”
El viceministro de Justicia de la Nación, Sebastián Amerio, pidió debatir una reforma constitucional para limitar a jueces federales y confirmó que avanzarán rápidamente en la designación de magistrados tras las elecciones del domingo.
El funcionario, que podría suceder a Mariano Cuneo Libarona en el Ministerio de Justica, advirtió sobre “control difuso de constitucionalidad”, que permite a cualquier juez federal suspender la aplicación de leyes o decretos de manera indefinida.
“Cualquier juez federal puede, por una cautelar, frenar una ley o declarar inconstitucional un decreto. Eso es peligroso”, alertó y agregó: “Por supuesto algunos me dirán hay que reformar la Constitución, discutámoslo porque no resulta que un juez pueda tomar esa determinación con tanta liviandad”.
Señaló que esas medidas cautelares pueden prolongarse durante años y que, aunque finalmente el Estado gane la causa, “ya no tiene sentido después de cinco o diez años”.
Con relación al nombramiento de magistrados que demoró en la primera parte Javier Milei, Amerio, quien realizó declaraciones en un canal libertario, afirmó que “es el deber de todo Gobierno nombrar jueces, que es lo que vamos a hacer nosotros después de las elecciones”.
También destacó que la política de nombramientos se basará en la meritocracia, con el objetivo de garantizar la idoneidad y reducir la influencia política en el Poder Judicial.
El viceministro remarcó que el propósito es aplicar una “meritocracia pura”, designando a los postulantes que ocuparon los primeros lugares en los concursos.
Según argumentó, un juez elegido por mérito “es menos propenso a la influencia política” y suele “poner la ideología detrás del Derecho porque tiene una formación más sólida”.
El viceministro confirmó, además, el avance de proyectos de ley vinculados al Régimen Penal Juvenil y a la reforma del Código Penal, en el marco de una política de “tolerancia cero” al delito.
“Ya se presentó en el Congreso la ley de Régimen Penal Juvenil, que establece la baja de la edad de imputabilidad a los 14 años”, precisó.
Explicó que la iniciativa prevé que los menores tengan un juicio “como un adulto” y, en caso de condena, “cumplan la pena como un adulto”.
En paralelo, el Gobierno impulsará modificaciones al Código Penal para elevar las penas de los delitos graves, declarar su imprescriptibilidad y eliminar la posibilidad de libertad anticipada o condicional.
“Queremos que los condenados cumplan la totalidad de la pena. Si no, la condena no tiene sentido”, sostuvo Amerio.
Respecto de la prisión perpetua, adelantó que se establecerá una “perpetua real”, sin reducciones.
“Vamos a modificar esto. El tope será 50 años, pero además existirá la perpetua real: quien reciba esa condena permanecerá en la cárcel. Perpetua es perpetua; si no, no es perpetua”, enfatizó.
Amerio concluyó que el objetivo de las reformas es fortalecer la seguridad jurídica y la confianza en el sistema judicial.
“No nos importa la ideología de los jueces, nos importa que cumplan la ley. No queremos más que eso”, finalizó.
Los 20 meses de Cúneo
Cúneo Libarona deja el cargo después de veinte meses de gestión, sin grandes logros a su paso. En su haber acumula el reclamo de los legisladores quienes piden por los pliegos de 337 vacantes judiciales entre el Poder Ejecutivo Nacional y el Consejo de la Magistratura y la derrota que implicó no haber podido nombrar nuevos jueces en la Corte Suprema de Justicia.
Asimismo, el funcionario se ubicó en el foco de la tormenta luego de haberse pronunciado contra la diversidad sexual y en defensa de “la familia. ”Rechazamos la diversidad de identidades sexuales que no se alinean con la biología (…), se acabó sólo el género, nuestro valor es la familia que es el centro de la sociedad y de la Nación“, supo declarar.
Gabinete renovado
Así, por lo menos serán cinco los funcionarios que dejarán su lugar en la gestión libertaria si, a las salidas de Werthein y Cúneo libarona, se le suman las de Patricia Bullrich (Seguridad Nacional), Luis Petri (Defensa) y Manuel Adorni (Vocería), quienes renunciarán a sus cargos para asumir sus roles legislativos después de los comicios.
Sus reemplazos se cocinan en reserva: Alejandra Monteoliva, del riñón de Bullrich, quedaría al frente de Seguridad, así como el número 2 de Adorni, Javier Lanari, pasará a coordinar la comunicación oficial en tanto secretario de Medios. Por su parte, para Defensa suenan los nombres de la jefa de Gabinete de Petri, Luciana Carrasco, y del brigadier Xavier Isaac, actual jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Qué pasa con Cancillería
En el oficialismo circulan varios nombres para reemplazar al canciller saliente, aunque todos dependen del resultado del domingo. Uno es el del jefe de Gabinete Guillermo Francos. ¿Podría mudarse al Palacio San Martín y dejarle su silla al asesor más influyente del Presidente? Milei lo considera indispensable para sostener la relación con los gobernadores, pero Francos no disimula cierto fastidio por el poder informal de Caputo. “Hay algunos que firmamos resoluciones y otros que asesoran”, dijo días atrás, en una frase que cayó como un tiro de advertencia.
En paralelo, comenzó a tomar fuerza una hipótesis que hasta hace poco parecía descabellada: que el propio Caputo asuma en el lugar de Werthein. En su entorno niegan la posibilidad, aunque reconocen que la idea lo seduce. “Le permitiría mostrarse, viajar, tener glamour internacional sin costo político”, ironiza un funcionario libertario. Otros, en cambio, se limitan a confirmar que el destino del asesor es el de finalmente ser funcionario: “El Presidente ya lo decidió. Caputo va a tener firma después del domingo. Falta definir dónde”.
Milei trabaja en el recambio
“El 26 a la noche con los números veré qué necesito”, dijo Milei en una entrevista con la TV Pública conocida este martes. “De cara al segundo tramo de este mandato voy a acomodar el gabinete para lograr los objetivos de segunda generación”, anticipó el libertario.
Para el Gobierno desde el lunes habrá una suerte de “relanzamiento” de la gestión hacia el segundo tramo del mandato. El oficialismo espera sumar fuerza en el Congreso para avanzar en reformas impositivas y laborales, pero deberá ampliar el juego político para tener votos suficientes, ya que ni siquiera con buenos resultados en los distrito más importantes (Buenos Aires, Córdoba, Ciudad de Buenos Aires, Santa Fe) conseguiría superar el tercio de las bancadas.
En ese sentido Milei aspiró a que el domingo La Libertad Avanza alcance el ansiado tercio de las bancas propias tanto en Diputados como en el Senado. “Un tercio en la cámara es una pared de defensa”, dijo el Presidente en la entrevista, en alusión a la mínima cantidad de legisladores que necesita. Con ese porcentaje podría defender los vetos presidenciales y evitar también un potencial juicio político en su contra.