Apertura de sesiones ordinarias

Milei habla esta noche en el Congreso, en un clima de alta tensión política con diputados, senadores y gobernadores

Tras un verano marcado por los calientes debates alrededor de la fallida ley ómnibus, el presidente Javier Milei dará inicio este viernes a un nuevo período de sesiones ordinarias en el Congreso. Aunque el vocero presidencial, Manuel Adorni, aseguró que el discurso todavía no está escrito, las fuentes consultadas por elDiarioAR no descartan la posibilidad de que el mandatario haga algún anuncio “sorpresa”, además de enfocarse en explicar el sentido de las medidas de ajuste que tomó su gobierno y de las que se verán sus peores consecuencias, según sus propios dichos, en marzo y abril. 

Técnicamente, serán las primeras palabras que pronunciará Milei como presidente ante el conjunto de los legisladores, a quienes no duda en tildar de “coimeros” y “extorsionadores” cada vez que tiene oportunidad. En diciembre, en una decisión atípica, el libertario pateó el tablero al no realizar su discurso en el recinto de la Cámara de Diputados —el “nido de ratas” que supo tenerlo sentado en una de sus bancas— y sí hacerlo en la explanada del Palacio Legislativo, desde donde se dirigió a la multitud que había llegado a la plaza del Congreso para escucharlo. “No hay plata” fue el leitmotiv de aquel discurso, al que no le faltaron ínfulas refundacionales.

En esa línea, la jornada de este viernes contará con al menos dos particularidades inéditas: Milei hablará por la noche, a las 21, en lugar de hacerlo al mediodía, con el argumento de que eso ayudará a tener una mayor audiencia televisiva. Se trata de un cambio tan disruptivo como otro: lo hará parado, delante de un atril que estará ubicado frente al estrado, en una puesta en escena que busca emular el formato del recinto del Capitolio de los Estados Unidos.

Tensión con la oposición

Milei es consciente de sus limitaciones para llevar adelante las reformas estructurales que tiene trazadas en su horizonte. En una entrevista que brindó al medio británico Financial Times, cargó contra los políticos que “no tienen problema en dañar los intereses de los argentinos para mantener sus privilegios” y dio a entender que pretende prescindir del Congreso hasta diciembre de 2025. Sucede que, para el Presidente, mientras el Poder Legislativo mantenga su composición actual —La Libertad Avanza cuenta con una marcada minoría en ambas cámaras— se le va a hacer imposible aprobar los cambios que se propone. Por eso dio a entender que planea avanzar con decretos para consolidar su plan económico, a pesar de las advertencias del propio Fondo Monetario Internacional (FMI). La semana pasada, a través de un comunicado, el organismo pidió reforzar el apoyo a los sectores vulnerables para que la carga del ajuste “no recaiga desproporcionadamente en las familias trabajadoras”.

Aprobado en general gracias al apoyo de las bancadas “dialoguistas”, el proyecto de “Bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos” se empantanó a comienzos de febrero durante su debate en particular. El Gobierno levantó intempestivamente la sesión, lo que retrotrajo a la ley ómnibus y sus más de 600 artículos a las comisiones, para ser debatidos desde foja cero. Una situación que envalentonó a Milei en su cruzada contra los gobernadores y que tuvo su punto más álgido en la pelea con el chubutense Ignacio Torres por los fondos de la coparticipación, que hoy se dirime en la Justicia.

Otro ejemplo de las dificultades de Milei para llevar adelante sus anhelos reformistas es el sinuoso derrotero del mega DNU de desregulación económica. La información que llega desde el Senado no es precisamente auspiciosa para los intereses del oficialismo. Según los cálculos que realizan en La Libertad Avanza, serían 40 los legisladores que se le opondrían, número suficiente para alcanzar el rechazo. Es algo que podría motivar otro hecho por demás singular: solo una vez en la historia una cámara votó en contra de un decreto del Poder Ejecutivo. 

Manifestaciones

Unos 5.000 efectivos de distintas fuerzas estarán desplegados en las inmediaciones del Congreso, en un operativo de seguridad que contará con un vallado apostado a lo largo de toda la Avenida de Mayo. La avenida Callao también estará obstruida en su intersección con Perón y desde la avenida Rivadavia hasta la de Belgrano. Sin embargo, nada de eso parece detener a las organizaciones de izquierda que ya anunciaron que se acercarán a las puertas del Palacio Legislativo para hacer escuchar sus reclamos.

“Desde la Unidad Piquetera nos vamos a movilizar. No importa el horario. Aunque sea a la noche para evitar que los sectores populares que viven en barrios alejados puedan concurrir, de todas maneras vamos a hacer una movilización”, le dijo el referente del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, a la agencia Télam, en referencia a la concentración que está prevista para las 19 y de la que también participarán los diputados del bloque del Frente de Izquierda-Unidad.

“El cuento de la casta tiene patas muy cortas, por eso la agresión constante a distintos sectores es para ocultar que está llevando adelante un ajuste brutal”, resaltó Myriam Bregman, una de las principales referente de la izquierda en el recinto de la Cámara baja. En tanto que el legislador porteño Gabriel Solano vaticinó “un cacerolazo masivo” en rechazo a la gestión que lleva adelante Milei, a la que calificó como “un plan de guerra contra los trabajadores”.

Por su parte, este jueves, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, emitió un breve comunicado para recordar que se pueden realizar denuncias ante virtuales extorsiones para participar de las movilizaciones. “Si sos empresario, comerciante o trabajador independiente, si sos transportista, empleado en relación de dependencia, o cobrás un plan; si sos un argentino que la pelea todos los días para salir adelante y te extorsionan para que el 1 de marzo vayas a la movilización, defendé tus derechos haciendo la denuncia al 134″, reza el texto que difundió la funcionaria en X y que lleva como título ”No hay lugar para la extorsión“.

PL/JJD