El canciller alemán Scholz llega a la Argentina, interesado en recursos clave y en recuperar el protagonismo de la UE frente a China

Como cierre de un mes de actividad internacional álgida, Alberto Fernández recibirá este sábado la visita oficial del canciller alemán, Olaf Scholz. Es la parada inicial de una gira que incluirá a Brasil y Chile y que busca fortalecer la relación con Latinoamérica en un contexto en el que es especialmente estratégica. La guerra entre Rusia y Ucrania sacudió la mirada de Europa sobre la región, que “redescubrió América”: la ponderó como zona de paz y, a la vista de las consecuencias económicas del conflicto bélico, como posible proveedora de insumos clave.

Según lo previsto, Scholz llegará a las 17.45 al aeropuerto de Ezeiza, en donde será recibido por el canciller Santiago Cafiero. Juntos irán al barrio porteño de Retiro, para depositar una ofrenda floral en la plaza que honra a José de San Martín. El presidente Alberto Fernández lo recibirá a las 19 en el Palacio San Martín, donde  mantendrán una reunión bilateral a puertas cerradas para realizar luego una declaración conjunta en el Patio de Honor. Según fuentes de la Cancillería, la conferencia de prensa compartida fue un pedido del propio Scholz. 

Scholz llega a la región con un fuerte interés por avanzar las negociaciones de hidrógeno verde –sobre todo con Chile, país con gran cantidad de proyectos en marcha– y por el litio argentino

Es la tercera vez que los mandatarios se encuentran frente a frente. En mayo pasado Fernández lo visitó en Berlín y en junio compartieron la Cumbre del G7 en Múnich, a la que el presidente argentino asistió en representación de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC). 

Si bien la agenda de Scholz es mantenida en reserva por la embajada de ese país, elDiarioAR pudo saber que concentrará sus compromisos políticos el sábado y asignará el domingo a actividades “más privadas”, como la visita las sedes locales de empresas alemanas o un recorrido por el Parque de la Memoria. Ese mismo domingo partirá para Santiago de Chile donde continuará con su agenda, antes de cerrar la gira en Brasil. 

La visita del canciller alemán tiene un trasfondo económico fuerte. Scholz llegará al país acompañado de una veintena de ejecutivos de distintas áreas, que incluyen energía, alimentos, agroindustria, biotecnología, farmacéutica y minerales. Según anticipa el Gobierno, el objetivo es ampliar el comercio bilateral, el flujo de inversiones y el financiamiento de proyectos. Por eso el ministro de Economía, Sergio Massa, también será de la partida. El sábado a las 19.30 encabezará un encuentro con los empresarios alemanes y una reunión ampliada con integrantes de ambos países, en la que está previsto que se firmen instrumentos en materia comercial. 

Además de uno de los principales inversores extranjeros en la Argentina, especialmente en el área industrial, Alemania es el principal socio comercial de Argentina en la Unión Europea. En 2022 el intercambio total con ese país superó los US$3.600 millones, con un crecimiento del 8% respecto de 2021. Argentina exportó por un total de US$883 millones (9% más que en 2021), sobre todo carne bovina, productos químicos inorgánicos, plata en bruto, lana peinada y miel natural. E importó por otros 2.719 millones de dólares, lo que dejó un déficit comercial para el país de 1.835 millones de dólares, según cifras oficiales.

Para los países que integran la Unión Europea es una prioridad recuperar terreno en Latinoamérica frente al avance de China, que suele ser más expeditiva en sus desarrollos e inversiones y que desplazó a Europa como aliado principal de la región, al menos en lo que respecta a ciencia y tecnología. Una de las tareas de Scholz en su visita será remarcar lo que considera que es el diferencial de Europa: el valor por la democracia y el Estado de derecho, la protección del medio ambiente y el respeto por los estándares de calidad. 

Por otra parte, Alemania es de los países europeos de participación más directa en su respaldo a Ucrania: en los últimos días, y después de un período de titubeo, el gobierno de Scholz confirmó que entregará tanques de combate Leopard 2, de fabricación nacional, a ese país. Al mismo tiempo, es el país con mayor dependencia energética de los hidrocarburos rusos. El invierno pasado debió quemar carbón para pasar el invierno sin gas ruso, y por eso la Argentina brilla como posible exportador de GNL, pero la apuesta continúa siendo la transición energética. Scholz llega a la región con un fuerte interés por avanzar las negociaciones de hidrógeno verde –sobre todo con Chile, país con gran cantidad de proyectos en marcha– y por el litio argentino, negocio en el que la automotriz alemana BMW ya tiene puesto un pie dado que participa de la explotación del Salar del Hombre Muerto, en Catamarca. 

En Brasil, por otra parte, Scholz buscará reforzar el compromiso de la nueva gestión de Lula Da Silva por frenar la tala en el Amazonas. Si bien puede parecer una problemática lejana al Viejo Continente, la destrucción de este pulmón natural es el principal argumento de bloqueo al acuerdo de libre comercio Mercosur-UE. Los parlamentarios europeos, que deben aprobar el pacto, se niegan a hacerlo en tanto las exportaciones de carne y granos latinoamericanos que lleguen tengan ese costo ambiental asociado.  

DT