Los derechos de los animales, en el borrador de la nueva Constitución chilena
Chile puede convertirse en el segundo país en reconocer los derechos de los animales en su Constitución Nacional, al aprobar este sábado el plenario de la Convención incluir ese apartado en el borrador que será sometido luego a una consulta popular.
A propuesta de la Comisión de Medio Ambiente, los convencionales sumaron los derechos de los animales en el capítulo reservado a los derechos de la naturaleza.
La Comisión es una de las que más dificultades enfrenta: hace 15 días, la asamblea había aprobado apenas un inciso de un total de 40 artículos, y el cuerpo debió reformular 39 iniciativas reduciéndolas a nueve.
Fueron aprobadas por 112 votos a favor, 2 en contra y 34 abstenciones.
“Estamos muy emocionados y muy felices. Estas son luchas de años. Esta Constitución empieza desde hoy a ser ecológica. Somos el segundo país del mundo que consagra los derechos de la naturaleza a nivel constitucional”, destacó el coordinador de la Comisión, Juan José Martin, según la agencia de noticias Ansa.
“La naturaleza tiene derecho a que se respete y proteja su existencia, a la regeneración, a la mantención y a la restauración de sus funciones y equilibrios dinámicos, que comprenden los ciclos naturales, los ecosistemas y la biodiversidad”, señala uno de los artículos.
Y otro propone que “la ley podrá establecer restricciones al ejercicio de determinados derechos o libertades para proteger el medio ambiente y la Naturaleza”.
Establece, además que es deber del Estado “adoptar acciones de prevención, adaptación, y mitigación de los riesgos, vulnerabilidades y efectos provocados por la crisis climática y ecológica”.
Un punto destacado es el que dispone que “el Estado y sus organismos promoverán una educación basada en la empatía y en el respeto hacia los animales”.
“Los animales son sujetos de especial protección. El Estado los protegerá, reconociendo su sintiencia y el derecho a vivir una vida libre de maltrato”, afirma otro punto, que fue severamente discutido, sobre todo por quienes denunciaron el “rodeo”, una actividad de práctica intensa en zonas rurales, en las que se suele golpear a los novillos.
Para la convencional comunista Bárbara Sepúlveda, “el rodeo es maltrato aquí, como las corridas de toro lo son en España, aunque acá lo defiendan y les parezca bonito, porque es un espectáculo sádico, en el que se aplaude y disfruta de los golpes a un animal”.
El derechista Manuel José Ossandón recomendó que quienes no gustan del rodeo “no vayan” y les pidió que “no vengan a señalar en base a prejuicios que existen maltratos cuando nunca han asistido personalmente y corroborado el cuidado que existe de parte de los hombres de campo”.
“No vengan a dar cátedra de lo que es el maltrato animal cuando dejan a un gato o perro encerrado en un departamento; eso sí es maltrato animal”, agregó.
El borrador de la nueva Constitución debe pasar por la Comisión Armonizadora y será luego entregado al presidente Gabriel Boric, que deberá llamar a un plebiscito de salida para que la ciudadanía decida si se aprueba o no la nueva carta magna.
Si se aprueba, pondrá fin a la actual Constitución, escrita en 1980, durante la dictadura cívico militar de Augusto Pinochet (1973-90).
CRM con información de la agencia Télam
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