El futuro canciller de Lula es Mauro Vieira, el ex embajador brasileño en Argentina

El embajador Mauro Vieira, futuro canciller de Brasil, es muy conocido en Buenos Aires ya que comandó la misión de su país en la Argentina entre 2004 y 2010, bajo los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. También los demócratas convivieron con él, entre 2010 y 2014, en la administración de Barack Obama, cuando Vieira encabezó la embajada de su país en Washington. En 2015 fue designado ministro de Relaciones Exteriores por Dilma Rousseff y permaneció en ese puesto clave hasta el impeachment de la ex presidenta. 

Muy relacionado con los gobiernos del PT, el nombramiento de Vieira contó con el apoyo directo de Lula da Silva y de su asesor internacional Celso Amorim. Para los medios diplomáticos de Itamaraty su nominación es “óptima, desde que facilitará mucho reinserción internacional del futuro gobierno Lula”. Afirman que la “gran tarea” que enfrentará como ministro es, precisamente, la de recuperar la imagen brasileña en el mundo, muy deteriorada durante la gestión bolsonarista. 

Pero tendrá también otros desafíos, entre ellos el de concluir las negociaciones del acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur, suspendido en el tiempo por causa de las políticas ambientales de la actualidad. No por acaso, Vieira acompañó a Lula durante su visita a Egipto, donde participó de la Cumbre del Clima, la COP27. Otro de los asuntos prioritarios de su gestión, en el enfoque del futuro mandatario, es reactivar los tratados multilaterales como los de Unasur, Mercosur, Celac y Brics.

Para la especialista en relaciones Internacionales Monica Herz, con esta investidura de Mauro Vieira, el presidente electo “revela el interés de hacer de la política externa brasileña un elemento central de su gobierno”. Lula quiere retomar sus viajes por el mundo, que prácticamente arregló con Estados Unidos, con la Argentina y con China. Precisamente, le toca al nuevo canciller nombrar el futuro embajador en Buenos Aires, como también en la Organización Mundial del Comercio.

Una de la situaciones difíciles que deberá atravesar el ministro designado es cómo saldar la deuda de Brasil con 43 organismos internacionales, que supera los 1.000 millones de dólares. El riesgo que corre el país es ver disminuidos sus votos en distintas instituciones multilaterales. Desde el punto de vista organizativo interno del MRE, Vieira tiene entre sus prioridades la de revisar el cierre de embajadas y puestos en distintos países, especialmente en Africa y América Central. Entre las primeras medidas de la nueva cúpula de Itamaraty se cuenta la revitalización de la embajada en Caracas y la normalización de las relaciones con Nicolás Maduro. Se dice, en los medios, que su indicación al frente de la cancillería, suscitó el rechazo de algunos sectores del PT que lo cuestionaban por supuestamente  no haber batallado contra el impeachment que alejó a Dilma del Planalto. Lo cierto es que, tal como indicó una consagrada columnista del grupo Globo, Vera Magalhaes, las personalidades que Lula acaba de elegir para su futuro gabinete forman parte del grupo al que decidió premiar de inmediato, por haberlo acompañado en “la travesía del desierto”; es decir, aquellos largos meses de su prisión en Curitiba.

EG