El avión de los vuelos de la muerte
En la antigua Escuela Mecánica de la Armada (ESMA), donde estuvieron secuestrados unas 5000 personas, se exhibirá un avión que usó la dictadura argentina de los años 70 para arrojar opositores al río de la Plata. Es uno de los 5 Skyvan PA-51 utilizados en los llamados “vuelos de la muerte” para hacer desaparecer los cuerpos de detenidos-desaparecidos.
Entre ellos, dos monjas francesas que se reunían en una iglesia en Buenos Aires junto a tres fundadoras de las madres de Plaza de Mayo. Buscaban desaparecidos. Ana Careaga es hija de una de ellas, secuestrada en 1977. “El operativo tuvo lugar en la iglesia, acá en la Iglesia de Santa Cruz, el día 8 de diciembre, que las Madres se habían juntado. Fueron llevadas a la Escuela de Mecánica de la Armada, ferozmente torturadas y a los pocos días arrojadas con vida al mar”, contó Careaga.
En total fueron 12 los desaparecidos de esta iglesia, donde ahora descansan los cuerpos de cuatro de ellos, hallados en la costa tras ser arrastrados por la marea. Uno es el de Esther Ballestrino de Careaga. Su hija Ana valora que el Estado argentino haya recomprado y repatriado el avión con el que fue asesinada su madre: “Es la materialización de lo que significó en la Argentina la solución final de la que los represores se jactaban de haber hallado, de cómo deshacerse de los cuerpos de sus víctimas”
El avión fue hallado gracias a la investigación de la periodista argentina Miriam Lewin, que estuvo secuestrada en la dictadura. Junto al fotógrafo italiano Giancarlo Ceraudo, Lewin persiguió las planillas de vuelo hasta dar con la aeronave en Estados Unidos, donde lo usaba un correo privado.
“Tenían minuciosa descripción de cada uno de los movimientos del avión y los nombres de los pilotos. Dos de los pilotos, uno murió durante el proceso, fueron condenados en noviembre de 2007 a prisión perpetua”, contó Lewin, que espera que los jóvenes conozcan el avión. “En medio de de la profusión de discursos negacionistas, me parece que es fundamental”. Por ejemplo, una candidata a vicepresidenta en las elecciones de este año niega el concepto de terrorismo de Estado.
Horacio Pietragalla, secretario de Derechos Humanos de Argentina, admitió que fue ardua la negociación para recomprar el avión, que el Estado había vendido en 1994. “Este proceso de poder traer un avión acá, que parece un acto tan simple, fue complejo. Pero por sobre todas las cosas podemos hacer estos hechos porque en Argentina se condena a los genocidas, porque no hay impunidad, porque tenemos más de 1200 condenados por delitos de lesa humanidad, porque seguimos abriendo espacios de memoria”, señaló Pietragalla.
Por su parte, el periodista Alejandro Rebossió explicó que “Este no es un avión más. Fue un arma de exterminio masivo de personas arrojadas cerca de aquí, en el río de la Plata, y ahora se convertirá en un instrumento de memoria para Argentina”. El avión se exhibirá en la antigua Escuela Mecánica de la Armada, donde estuvieron secuestrados los 12 de la iglesia Santa Cruz y otras 5.000 personas.
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