La inflación cerrará en 2021 cerca del 50% y anticipan que se recalentará más a partir de enero

La inflación volverá a ser este año, como lo fue en 2021, una de las preocupaciones centrales del Gobierno. Este jueves se conocerá el dato oficial de diciembre y, según estimaciones privadas, 2021 culminaría con una suba de precios cercana al 50%, en la zona de los niveles récord de 2018 (47,7%) y 2019 (53,8%). Hacia adelante, el pronóstico no es alentador: los analistas relevados por el Banco Central esperan, a partir de enero de 2022, al menos seis meses de inflación por encima del 3,5%. 

Ya en noviembre el Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumulaba 45,4%, número que superó el pronóstico oficial –recalculado– de 45,1%. Para diciembre de 2021 la mediana de las estimaciones del mercado que releva el Banco Central se ubicó en 3,4%, casi un punto por encima de la inflación de noviembre, que fue de 2,5% y cuyo nivel empieza a quedar muy atrás. Los que analistas privados anticipan una aceleración de los precios con nuevos picos de 4% para marzo y abril, valores que no se registraban desde abril de 2020. 

Concretamente, el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) publicado el viernes pasado por el organismo que conduce Miguel Pesce prevé una inflación de 3,4% en diciembre, 3,7% en enero y febrero y un pico de 4% en marzo y abril que daría inicio de una desaceleración; mayo marcaría 3,6% y junio, 3,5%. 

“Como suele suceder los meses de diciembre, esparcimiento presentó el incremento más elevado por el pico que tiene el turismo al comenzar la temporada de verano. Le siguió alimentos y bebidas, el rubro de mayor ponderación, que tuvo un fuerte repunte luego de la moderación que se había dado en noviembre por el congelamiento de precios y bajas estacionales fuerte”, apuntó la consultora C&T. 

Agostina Myronec, analista de Ecolatina, señaló que en la inflación de diciembre “incidió mucho la aceleración del precio de la carne, que dio en torno al 10% mensual”.

En vivienda y servicios básicos se destacó el alza de las expensas por el aguinaldo de los encargados de edificios y, en el capítulo de transporte y comunicaciones, se combinaron el ajuste de 30% en los taxis con una fuerte suba del precio de los autos. Equipamiento y mantenimiento del hogar, por su parte, estuvo influido por el aumento de 5% en el sueldo de las trabajadoras de casas particulares. 

En el mes también hubo un alza de 7% en el precio de los cigarrillos que quedó incorporada en “otros bienes y servicios”, mientras que salud, un rubro que en los meses previos subió mucho, se mantuvo relativamente estable porque no tuvo lugar un ajuste en las prepagas y porque con el congelamiento de precios los medicamentos casi no variaron. El equipo de Roberto Feletti, secretario de Comercio Interior, trabaja por estos días para renovar –del mismo modo que hizo con las empresas de consumo masivo en el caso de Precios Cuidados– el acuerdo con los laboratorios. 

“Si bien las ventas minoristas y en consumo masivo las ventas crecieron en forma interanual la variación de precios no cedió en el último mes del año, que vino acompañada por el mes de mayor emisión de pesos por parte del Banco Central en el año para asistir al Tesoro. Este accionar se verá reflejado en los próximos meses en la variación de precios y cotización de los dólares paralelos donde los argentinos buscan refugiarse con los pesos que pierden valor”, sumó Damián Di Pace, director de Focus Market, que estima para diciembre una inflación de 3,8%. 

De acuerdo con María Castiglioni, directora de C&T, la inflación anual de 2021 cerrará cerca del 52%, lo que la ubica cerca de los niveles récord de 2019, aunque en un contexto distinto. “En este momento hubo una devaluación muy fuerte del tipo de cambio, de más del 60% y un contexto de incertidumbre política y económica. Este 2021 el tipo de cambio oficial se movió 23%”, apuntó. 

La economista considera que hay una serie de desafíos en el frente inflacionario de cara a 2022. Por un lado, “la alta expectativa que tiene la población de la inflación, que cree que se va a repetir el número pasado”. Por otro, las presiones en los precios contenidos vía acuerdo, que vencen en enero y serán ajustados en la renovación. También mencionó la inercia que viene de diciembre, sumado al aumento que se anticipa en las tarifas de los servicios públicos, más allá de que no esté definido todavía la magnitud y el Gobierno hable de un tope del 20%. 

Según la economista, otro signo de pregunta es de cuánto va a ser la emisión para financiar el déficit y qué ritmo tomará la devaluación del tipo de cambio oficial. “El Gobierno sigue pensando en un esquema similar al de estos dos años frente a la inflación, y está claro que tiene resultados cada vez menos efectivos, con costos cada vez más evidentes”, apuntó Castiglioni.  

Si se mira la primera semana de enero de 2022, el relevamiento de precios de alimentos realizado por LCG arrojó una suba promedio de 1,18%, medio punto porcentual más que la última semana de diciembre. Frutas registró el mayor aumento de la semana, de 3,4%. En la comparación mes contra mes, la inflación es liderada por los lácteos (6,6% aumento promedio), mientras que el índice general de precios de alimentos y bebidas promedió 3%.

A más largo plazo, los analistas incluidos dentro del REM estiman que la inflación de 2022 se ubicará en 54,8%. Si se mira solo las proyecciones de las consultoras que más acertaron en el último tiempo el dato se eleva a 55,7%. Por otro lado, se estima una inflación de 43,4% para 2023 y de 35% para 2024.

DT