La justicia federal de Córdoba confirmó este viernes que se hallaron restos humanos en el predio donde funcionó La Perla, el mayor centro clandestino de detención de la última dictadura militar en el interior del país. El anuncio lo hizo el juez federal N° 3, Hugo Vaca Narvaja, quien precisó que el hallazgo se produjo en los primeros días de excavación en el sector conocido como Loma del Torito, dentro de la zona denominada Las Lomitas.
Los restos fueron encontrados por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) en el marco de una nueva campaña de 70 días ordenada en la causa “Averiguación de Enterramientos Clandestinos”, iniciada en 1998 a partir de denuncias de Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, y familiares de desaparecidos. Se trata del primer hallazgo de restos óseos en el predio de La Perla, que funcionó entre 1976 y 1978 bajo el mando del Tercer Cuerpo de Ejército, a cargo de Luciano Benjamín Menéndez.
“Hemos logrado encontrar restos humanos en La Perla en las proximidades de la Loma del Torito”, señaló Vaca Narvaja. El magistrado remarcó que durante años los juicios de lesa humanidad permitieron reconstruir la sistematicidad del terrorismo de Estado, pero que ahora comienzan a aparecer pruebas materiales. El secretario de Derechos Humanos del juzgado, Juan Miguel Ceballos, agregó: “Este buen comienzo nos augura un futuro que nos entusiasma y nos tiene entusiasmados para desandar el largo camino que nos queda”.
El EAAF explicó que los huesos se hallaron en un relleno consistente con alteraciones detectadas en imágenes aéreas de 1979, que mostraban movimientos de tierra en la zona. Esas fotografías, analizadas por el geólogo Guillermo Sagripanti de la Universidad Nacional de Río Cuarto, resultaron decisivas para acotar la búsqueda a unas diez hectáreas dentro de un predio de 3.200.
El sector donde se hallaron los restos coincide con lo denunciado en 1985 por el trabajador rural José Julián Solanille durante el Juicio a las Juntas. El testigo relató haber escuchado gritos desgarradores en 1976 y haber encontrado pequeñas tumbas en las inmediaciones del cuartel.
La noticia generó una fuerte expectativa entre los organismos de derechos humanos y los familiares de desaparecidos. Según el Archivo Provincial de la Memoria, entre 2.000 y 2.500 personas pasaron por La Perla, la mayoría de las cuales permanece desaparecida. En distintos procesos judiciales se acreditó que allí se torturaba, se asesinaba y que muchas víctimas eran fusiladas en el mismo predio en los llamados “traslados”.
Los especialistas aclararon que el proceso recién comienza y que la identificación de los restos podría demorar meses. Los fragmentos -entre ellos un fémur y partes de cráneos- serán cotejados con el Banco Nacional de Datos Genéticos. “Cuando uno encuentra los restos y los identifica, esa persona deja de ser un desaparecido. La necesidad de dar por terminado este estado de incertidumbre es lo que hay que resaltar”, enfatizó Vaca Narvaja.
“El hallazgo marca un auspicioso reinicio de la búsqueda”, celebraron desde el EAAF. Con nuevas tecnologías, la pericia de especialistas y décadas de lucha de los organismos, la búsqueda de los desaparecidos continúa.
CRM