La jornada todavía seguía oscura. Apenas se dibujaba una línea de luz en el horizonte cuando el jefe de Gabinete, Juan Manzur, llegó a la Casa Rosada. “Hoy 7 de la mañana y ya estamos todos trabajando”, dijo frente a la maraña de periodistas que lo interceptaron cuando el ex gobernador tucumano se disponía a encabezar la primera reunión de Gabinete en seis meses.
Si la convocotaria se produjo en medio de un pico en las internas dentro de la coalición gobernante, el arranque de la reunión no hizo más que sumarle leña al fuego: la “figurita dificil”, el ministro del Interior “Wado” de Pedro no estaba entre los presentes.
Al menos hasta entonces, el objetivo se mostrar una imagen de unidad estaba lejos.
Desde el Gobierno se anunció que De Pedro no podía concurrir debido a un problema personal con uno de sus hijos. Pero para la ola de rumores ya se había echado a correr.
Una hora y media más tarde, desde la cartera de Interior se aclaró que De Pedro ya estaba en la reunión en la Casa Rosada.
El ministro tampoco estuvo en la conferencia de prensa que dieron al término del encuentro, una tarea que quedó en manos de Manzur, junto con los ministros de Defensa, Jorge Taiana; de Salud, Carla Vizzotti; y la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti.
Así, luego de la primera reunión de Gabinete en seis meses y en medio de la interna en el Frente de Todos, el jefe de los ministros, afirmó que “los funcionarios en el Poder Ejecutivo los define el Presidente”. Quizás como muestra de como esta la situación interna, Manzur tuvo que aclarar que “el rumbo de la gestión” también es atribución de Alberto Fernández.
“No odiamos a nadie”, dijo Manzur en respuesta a las últimas críticas vertidas desde el kirchnerismo. “Tampoco hay que darles mucha trascendencia”, agregó sobre las peleas dentro del Frente.
Sin foto de unidad, Manzur anunció que de ahora en más lo que si habrá serán reuniones quincenales del Gabinete.
Uno de los temas principales que se abordó en la reunión fue el alza de la inflación, punto sobre el cual el ministro de Economía, Martín Guzmán, anticipó que espera que el nivel de precios descienda con respecto al mes pasado, que llegó a superar el 6,7%.
En la lista de ausentes siguieron los ministros de Cultura, Tristán Bauer (Cultura), de Transporte y Alexis Guerrera, ambos pasaron parte de enfermos.
A la lista de los ausentes se sumaron los ministros Matías Lamnens (Turismo) y Jorge Ferraresi (de Vivienda), todos de viaje por el exterior.
Los que si dieron el presente en el Salón Eva Perón, de la Casa Rosada fueron los ministros de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; de Relaciones Exteriores, Santiago Cafiero; de Economía, Martin Guzmán; de Educación, Jaime Percyck; de Medio Ambiente, Juan Cabandié; de Mujeres, Género y Diversidad; Elizabeth Gómez Alcorta; de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; de Seguridad, Aníbal Fernández; de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; de Trabajo, Claudio Moroni; de Justicia, Martin Soria: de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus y de Agricultura, Julián Domínguez.
También se encontraban presentes los secretarios de la Presidencia, Julio Vitobello; de Medios, Juan Ross: la secretaria de Legal y Técnica de Presidencia, Vilma Ibarra, el asesor presidencial Juan Manuel Olmos; y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz.
“Siempre hay diferencias y esto es bueno. Es algo normal. Cada uno se expresa como quiere, pero hay que dejar en claro que nuestro gobierno tiene un rumbo, una direccionalidad. Estamos viviendo un momento complejo pero está muy claro cuál es el norte y el camino a seguir”, dijo Manzur, apenas llegó a Casa de Gobierno.
El encuentro entre ministros se da en un contexto complejo, el día martes, Andrés “Cuervo” Larroque, líder de La Cámpora criticó duramente al Presidente, su gestión y al equipo económico, sobretodo a Guzmán y Kulfas.
Al ser consultado sobre si el kirchnerismo puede abandonar la coalición que llegó al poder en 2019, Larroque fue contundente: “Si el Gobierno es nuestro... Nosotros constituimos esta fuerza política, lo convocamos a Alberto y ganamos las elecciones. La intención de voto mayoritaria es a Cristina. Nosotros respetamos, pero Alberto no se va a llevar el Gobierno a la mesita de luz. Acá hay un frente”.
Fue el mismo presidente, Alberto Fernández quien ayer le respondió a Larroque: “Yo no soy el dueño del Gobierno, nadie es dueño del Gobierno. El Gobierno es del pueblo y nosotros solo representamos a ese pueblo. Y estoy seguro de que ese pueblo quiere que trabajemos juntos y cumplamos con las palabras empeñadas”, planteó Alberto Fernández.
También ayer la vicepresidenta Cristina Fernández se expresó en redes sociales. En un mensaje cuyo destinatario pareció ser el presidente Fernández, la vicepresidenta se preguntó si un Gobierno puede “ser legítimo y legal de origen y no de gestión”.
MC/MG