Duque advierte que Colombia no vacunará a venezolanos sin papeles

Más de 800 mil venezolanos que residen en Colombia pueden quedar fuera de los planes de vacunación. La alerta se desprende del anuncio que hizo el lunes el presidente Iván Duque, en el cual avisó que los ciudadanos colombianos tendrán prioridad para recibir la vacuna y que los venezolanos que no estén regularizados serán excluidos. Según las últimas cifras difundidas por la Cancillería colombiana, 1,7 millones de venezolanos viven en el país, de los cuales sólo el 45% está regularizado. 

“Quienes no tengan en este momento la acreditación de ser ciudadanos colombianos, y que no tengan regularizada su situación migratoria, por supuesto que no (serán vacunados)”, dijo el presidente en declaraciones a Blu Radio. Duque defendió su posición alegando que la admisión de migrantes irregulares en los planes de vacunación podría provocar una “estampida”. “Imagínese lo que estaríamos viviendo: tendríamos un llamado a la estampida a que todo el mundo cruce la frontera para pedir que lo vacunen”, dijo el mandatario, delfín del expresidente Álvaro Uribe y autor de un libro de ensayos titulado “El humanismo importa”. 

El anuncio recibió severas críticas. “Este mensaje logra que millones de colombianos aplaudan olvidando que hay millones de colombianos en Venezuela, Ecuador, EEUU y España, y que para nada nos gustaría que los excluyeran de la vacuna. La xenofobia es uno de los pilares del fascismo. Logra aplausos mientras mata”, dijo Gustavo Petro, líder del partido de oposición Colombia Humana.

Alejandro Gaviria, rector de la Universidad de los Andes y exministro de Salud durante el gobierno de Juan Manuel Santos, afirmó: “No vacunar a los venezolanos es una mala idea desde un punto de vista epidemiológico. Pero es sobre todo una propuesta antiética: excluye a los más vulnerables y discrimina de forma casi amenazante en contra de un grupo de personas por su nacionalidad y estatus migratorio”. 

Las declaraciones de Duque implican un cambio en relación a lo que venía diciendo sobre los migrantes venezolanos desde su llegada al cargo. Colombia es el país que más venezolanos recibió y, a diferencia de otros como Brasil o Perú, las condiciones para acceder a la reglamentación y otros beneficios fueron desde un comienzo más fáciles. La postura de Duque hacia la cuestión migratoria le valió críticas dentro de su partido, el derechista Centro Democrático, que acusaban al presidente de ser demasiado permisivo y débil. Para Sandra Borda, profesora de Relaciones Internacionales de la Universidad de los Andes, detrás del giro en la posición de Duque hay una percepción de que la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, una figura en ascenso, podría estar sacando rédito de la estigmatización de los venezolanos como promotores de inseguridad.

En noviembre, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) hizo un llamado a que los gobiernos “no olviden a los migrantes ahora que la batalla contra el COVID-19 entra en una nueva fase”. “Para que todos prosperen, los países deben intensificar sus esfuerzos para garantizar que nadie se quede atrás y que todos los migrantes, sin importar su estatus legal, tengan acceso a los beneficios de las vacunas que salvan vidas”, dijo Jaime Calderón, asesor regional para la salud de la organización. La Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) emitió un mensaje similar: “Es esencial que abordemos las múltiples barreras hacia la cobertura sanitaria internacional y que los migrantes sean incluidos completamente en las campañas de vacunación nacionales”. 

El anuncio de Duque entra en conflicto con la Declaración de Nueva York para los Refugiados y los Migrantes y El Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, iniciativas de Naciones Unidas de las que Colombia forma parte, en las cuales los estados se comprometen a garantizar y proteger derechos de personas migrantes y refugiadas. La presión por parte de organismos de Derechos Humanos internacionales para que Duque se rectifique podría escalar en los próximos días. Colombia recibe una alta cantidad de fondos en calidad de “ayuda internacional” para lidiar con la crisis migratoria venezolana. 

Duque es uno de los primeros líderes en anunciar la exclusión de migrantes no regularizados en los planes de vacunación. El asunto de la vacunación de migrantes en general y venezolanos en particular no ha sido abordado en la discusión sobre vacunación en la región. En el caso de Estados Unidos, que cuenta con una gran cantidad de migrantes en condiciones de irregularidad, el presidente electo Joe Biden se comprometió en agosto a no excluirlos: “Todas las personas en el país, ya sean documentadas o indocumentadas, deberían tener acceso a una vacuna (...) Es de interés para todos que todos sean atendidos”, afirmó. 

Según el último informe de la Organización de los Estados Americanos (OEA), publicado en diciembre, el número de migrantes venezolanos asciende a 5,4 millones de personas, de los cuales la gran mayoría se encuentra en América Latina. De su inclusión o exclusión de los planes de vacunación, al igual que de los otros millones de migrantes de otros países, depende también el control o extensión de la pandemia. 

NZ