¿Qué es una VPN y para qué sirve?

Internet se ha convertido en toda una autopista de la información. Una herramienta que nos aporta infinidad de ventajas, pero que también ha abierto multitud de brechas de seguridad. Por todo ello, cada vez somos más exigentes a la hora de demandar mayores beneficios y elementos de seguridad mientras navegamos en la red de redes. Prueba de ello es el reciente aumento en la demanda de VPN pro. A continuación, os hablamos un poco sobre este tipo de redes y, lo que resulta aún más importantes, sobre qué ventajas aportan en su formato más profesional con respecto a las opciones gratuitas de dudosa procedencia y calidad.

¿Qué es una VPN pro?

Una VPN viene a ser, grosso modo, una red privada virtual (de ahí sus siglas). Es decir, una suerte de cortafuegos remoto, geográficamente hablando, desde el que nos conectamos para que nuestros datos se transmitan de forma totalmente anónima, cifrada y segura. Algo imposible de conseguir en las redes públicas. Entonces, ¿qué diferencias existen con las VPN pro? Pues básicamente hablamos de una cuestión de seguridad, rendimiento y velocidad. En relación con lo primero, con las VPN pro, de contrastada solvencia, nos garantizamos estar conectados a unos servidores gestionados por una empresa privada en los que nuestros datos quedan a buen recaudo. ¿El motivo? Evitar que ningún hacker pueda lucrarse con ellos.

Pero es que la cosa no se queda ni muchísimo menos ahí. El rendimiento y la velocidad es otra cuestión vital. Y es que no son pocos los usuarios que tras conectarse a VPN de dudosa calidad o procedencia ven como navegan de forma mucho más lenta e inestable. En este caso suele ser debido a unos servidores sobresaturados. Por suerte, las VPN pro suelen incorporar servidores dedicados con el suficiente tamaño y capacidad de respuesta para que la velocidad y latencia de tu conexión no se vean comprometidas en ningún momento.

Ventajas de un VPN pro

Algunos de los principales beneficios del servicio que aquí nos ocupa ya los hemos comentado unas líneas más atrás. No obstante, nunca está de más recordar las múltiples ventajas que una VPN pro puede aportar a tus conexiones habituales:

- Acceso a contenidos geolomitados. Es decir, posibilidad de acceder a servicios específicos de un país concreto. No en vano, dichas VPN nos permiten cifrar nuestros datos para que parezca que proceden de dicho territorio.

- Mayor seguridad en tus conexiones WiFi o de datos. ¿Sueles conectarte a redes públicas? Las VPN pro cifran tus datos para que tanto estos últimos como el historial de navegación queden fuera del alcance de personas no deseadas.

- Evita la discriminación y las subidas de precio. No son pocos los servidores que, sin consentimiento, venden nuestros datos a terceros. Terceros que, en función de nuestras preferencias, pueden modificar al alza el valor de determinados productos si se encuentran, precisamente, entre nuestros favoritos.

En definitiva, a riesgo de parecer repetitivos, apostar por una VPN pro es toda una garantía que aporta un plus de seguridad, tranquilidad y profesionalidad a uno de los servicios más demandados de los últimos años en la red de redes.