Milei expone el armado de su gabinete a un “toma y daca” con Macri, Bullrich y Schiaretti

Atrincherado en el piso 21 del Libertador Hotel, Javier Milei está al frente del armado de un gabinete al que ayer se le notaron todas las costuras. Fue una jornada de feroz rosca política, con cargos claves confirmados solo extraoficialmente y el corrimiento del eje de poder de algunas figuras importantes que ya estaban en la línea de largada para el 10 de diciembre, lo que anticipa que el pacto político firmado por el presidente electo con Mauricio Macri y Patricia Bullrich pasó de ser “incondicional” a un toma y daca que podría derivar en un co-gobierno explícito entre La Libertad Avanza y el PRO.

El inminente arribo de Luis “Toto” Caputo al Palacio de Hacienda, el regreso de Bullrich a Seguridad y la posibilidad de que el radical Luis Petri se quede con Defensa reflejan que hay una espesa bruma en el gobierno entrante. Ayer mismo fue eyectado del armado mileísta Emilio Ocampo, quien estaba presto para asumir en el Banco Central y acelerar con su plan de dolarización. También quedó deslucida la posición de la vice electa, Victoria Villarruel, que debería relegar su deseo de conducir desde el Senado las fuerzas armadas y de seguridad.

Esos enroques de fichas fuertes se complementaron con otros que revelan una segunda alianza táctica de los libertarios para sumar volumen político a su administración: esta vez con el cordobés Juan Schiaretti. Así, está en suspenso la llegada de Carolina Píparo a la Anses y ahora el nominado es el cordobés Osvaldo Giordano, actual ministro de Finanzas de la provincia y ex secretario de Previsión Social. Ayer también se lo vio junto al futuro ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, a Franco Mogetta, actual responsable de Transporte en el gobierno cordobés y quien podría asumir ese cargo a nivel nacional. 

El frenesí del día obligó al presidente electo a suspender a último momento un viaje “espiritual” que tenía previsto para este fin de semana a Estados Unidos. La intención de Milei era visitar la tumba del rabino Menachem Mendel Schneerson, más conocido como “el rebe de Lubavitch”. “Hoy no viaja”, confirmaron al lado del presidente electo al cierre de esta nota.

Todo el zigzagueo en la agenda y el manejo político de Milei cobró dimensión por un fuerte hermetismo oficial: ayer no hubo parte de la llamada Oficina de Prensa del Presidente Electo, pese al compromiso asumido el lunes de dar a conocer comunicados todos los días a las 18.00. Un tuit de Fernando Cerimedo, asesor en la comunicación del nuevo presidente, acrecentó ese silencio ensordecedor: “Una vez más, es importante remarcar que cualquier nombramiento o anuncio oficial SOLO lo hará el propio Presidente Electo @JMilei o en su defecto los comunicados de la @OPEArg”.

El amarillo sobre el violeta

La falta de una confirmación oficial del desembarco de “Toto” Caputo en Economía acrecienta la expectativa de cuál será la reacción de los mercados y el dólar cuando abran este viernes. Porque la política libertaria se define en hoteles, fue Nicolás Posse, el futuro jefe de Gabinete de Milei, quien le ofreció al exministro de Macri asumir ese rol en un encuentro que mantuvieron en el exclusivo Four Seasons. 

De la mano de Caputo llegaría también Demian Reidel, otro exfuncionario macrista, quien sería el encargado de “desarmar la bomba” de las Leliqs desde la presidencia del Banco Central. Por ese movimiento ayer se bajó de integrar el nuevo gobierno Ocampo, el hombre que había convencido a Milei de avanzar con la eliminación del peso y “dinamitar” el BCRA. En lo concreto se patearía para adelante la dolarización.

La figura de Caputo retrotrae automáticamente a lo que fue la gestión financiera de Macri, que por estas horas digita su influencia a miles de kilómetros de distancia: está de viaje en Arabia Saudita. “Mauricio es jefe y siempre va a querer serlo. Javier puede tener un problema con él”, pintó el panorama sobre el armado de la nueva administración una voz amarilla. 

El revival del PRO en el poder también se refuerza con el sorpresivo anuncio extraoficial de que Bullrich se haría nuevamente cargo de Seguridad. Ese nombramiento fue confirmado a elDiarioAR por una fuente libertaria y otra bullrichista. Igualmente es llamativa ya que la ex candidata presidencial de Juntos por el Cambio apuntaba más alto: ser jefa de Gabinete. 

En tándem con Bullrich tendría un lugar en el nuevo esquema de poder Petri, que fue su compañero de fórmula en la contienda electoral. El radical díscolo tendría un premio por haber incluso fiscalizado para LLA el domingo pasado: Defensa, el otro botín que se le escurre de las manos a Villarruel.

El cambio en el color del poder de violeta a amarillo también lo representaría la posibilidad de que Federico Sturzenegger se haga cargo de un “ministerio de Modernización”, cartera que no estaba en el organigrama original del libertario.

El cordobesismo mileísta

Y si Córdoba le armó un fernetazo de votos a Milei para su arrolladora victoria contra Sergio Massa –en la provincia la diferencia fue 74/26– el saliente gobernador aportó ayer con dos porotos “técnicos” pero de alto valor político. El primer movimiento sería con Giordano a la Anses, desplazando a Píparo, que había llegado a anunciar públicamente una reunión de transición con la camporista Fernanda Raverta para el lunes próximo. El segundo es Mogetta, que pasaría a ser el secretario de Transporte nacional.

“Son dos especialistas en sus áreas, pero todavía se está negociando que se sumen al gobierno”, recogió este medio de una voz del schiarettismo. Mogetta estuvo ayer con Ferraro en el Palacio de Hacienda en la reunión de transición con actuales funcionarios de Massa –entre ellos el actual ministro de Transporte Diego Giuliano–, pero cerca del futuro ministro de Infraestructura aclararon que solo es parte del equipo técnico: “Mogetta no está confirmado como secretario”, dijeron.

Con todo, el acercamiento del gobernador mediterráneo al esquema mileísta es innegable. Ayer incluso Villarruel se reunió con el viceintendente electo de Córdoba, Javier Pretto, expresidente del PRO cordobés y recientemente incorporado a las filas del schiarettismo.

El “toma y daca” por el poder en el que quedó inmerso Milei ya marca a fuego la dinámica diaria de libertarios, tras la victoria de las elecciones. En la medianoche del jueves, cuando este medio preguntó si habría este viernes anuncios oficiales, una figura cercana al presidente electo respondió: “Para mañana falta un siglo”.

MC/DTC

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