Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Otra sobreviviente de la dictadura cuenta su historia en el subte para pedir que no voten a Milei

Elsa Lombardo es sobreviviente de los CCDTyE el Banco y el Olimpo.

elDiarioAR

0

Cerca de la estación Echeverría, dentro del subte de la Línea B, Elsa Lombardo una sobreviviente de los Centro Clandestino de Detención Tortura y Exterminio (CCDTyE) el Banco y el Olimpo, dedica su tiempo a explicarle a los pasajeros por qué para ella es importante que el próximo domingo la gente no vote a Javier Milei y La Libertad Avanza. Lo hace, por momentos, sostenida de un caño, con una botella de agua en la mano y un tono de voz firme. Cuenta quién es y lo que sufrió, pero no acampa sólo en su historia, sino también en los de los que no la pueden contar.

“Fui secuestrada por un grupo de policías. Fui llevada a dos campos de concentración. Estuve 27 días secuestrada con mucha gente de muchos partidos políticos, con mucha gente de muchas religiones y cuando vino la democracia, con el gobierno del doctor Raúl Alfonsín pude declarar y contar que me habían secuestrado”, dice Lombardo. Todos la escuchan con atención, nadie la interrumpe. Además, la miran mientras hablan y hasta algunos la graban en un video que rápidamente se viraliza en redes sociales.

“Una de las cosas que la gente me pregunta es por qué estoy viva, por qué yo no estoy desaparecida como todos los demás. Yo sí sé, porque me lo dijeron. Me dijeron que habían votado para que yo estuviera viva, porque si ellos sabían que una persona no iba a cambiar de idea la iban a matar. Y traigo esta anécdota porque el domingo hay elecciones y yo no quiero que nunca más ocurra lo que pasó en este país”, agrega la sobreviviente.

Para ella lo que hay que hacer es claro. Elegir defender los derechos y levantar la bandera de Memoria, Verdad y Justicia. “Nosotros no vamos a votar el domingo la vida o la muerte porque no somos asesinos, nosotros vamos a votar por más educación, por más y mejor salud, por mejores viviendas, por mejoras para la sociedad. Entonces, les pido por favor que en nombre de los que no están que son miles y miles y miles, que en nombres de los bebés que nunca aparecieron, por favor pensemos bien nuestro voto para no volver nunca más atrás, a la noche oscura de lo que fueron la dictadura, la desaparición de personas, el miedo y el terror”, agrega.

Su discurso no es el primero. A la serie de llamado a votar en contra del libertario que provoca la posición negacionista de La Libertad Avanza, la semana pasada comenzó a recoger los subtes otra víctima del terrorismo de Estado.

“Les pido disculpas. Estoy un poco nerviosa, nunca en mi vida hice esto y lo hago porque estoy muy preocupada”, dijo  Ana Fernández mientras se sostenía de la baranda de un vagón en la Línea A de Subte que inicia su recorrido en la estación Perú, en Plaza de Mayo. Al igual que Lombardo, habló por lo mucho que le preocupa un posible triunfo de Javier Milei y su compañera de fórmula, Victoria Villarruel. Su mamá, Ana María Careaga fue secuestrada y torturada mientras estaba embarazada y su abuela, Esther Ballestrino de Careaga, fue arrojada viva al mar durante los vuelos de la muerte en la última dictadura cívico militar.

Ella nació en Suecia, en 1977, cuando su mamá se fue exiliada después de estar secuestrada y torturada durante tres meses en Club Atlético. Ana María Careaga tenía 16 años cuando la secuestraron y estaba embarazada de Ana. “Fue a un campo de concentración, donde la despojaron de todo, incluso su nombre: pasó a tener una letra y un número. Fue brutalmente torturada. Cumplió 17 años en ese campo de concentración. Mi abuela salió a buscarla y se encontró con otras madres que hoy son las Madres de Plaza de Mayo. Ella también fue torturada, la llevaron a la ESMA y fue arrojada con vida al mar”, recordó Ana en el subte.

Ella regresó a la Argentina en 1984 cuando tenía 6 años. Por aquel entonces sus maestras repetían la idea de “Por algo será”. “Tenía miedo de que se roben a mi hermano Daniel, que nació en el 83 y era bebé. Yo lo sacaba de la cuna y lo ponía al lado mío y en la cuna ponía un muñeco para que si los militares entraban se equivocaran y se llevaran el muñeco”, le contó a elDiarioAR en una entrevista la semana pasada. Además, explicó el peligro que encuentra en la posibilidad de que Javier Milei gane la Presidencia. “El riesgo es muy grande, es la democracia. Son derechos y valores muy caros a la sociedad argentina y eso está en riesgo. Los hechos más básicos, cotidianos, que ya conseguimos. Hay otros riesgos concretos, que los genocidas estén en libertad, que caminen al lado nuestro, la reivindicación a crímenes de lesa humanidad de parte del Estado. Nosotros tenemos un Estado que pidió perdón por esos crímenes y el riesgo es un Estado que reivindique eso. Y el odio feroz y la violencia que desde el propio Estado apoyan y generan y qué puede entonces hacer la sociedad con eso, tal vez nos haga una sociedad más violenta. Ni pensar si tenemos acceso a las armas. Eso sería siniestro”, señaló.

MM

Etiquetas
stats