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Turismo

Los Andes Sobre Ruedas: El destino de aventura que crece en Perú

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Cusco, en Perú, está a 3,399 metros sobre el nivel del mar, rodeada de montañas que superan los 5,000. Durante años fue conocida solo como punto de entrada hacia Machu Picchu, pero en la última década está ganando visibilidad como destino emergente de ciclismo de montañapara quienes buscan aventura en altura, paisajes dramáticos y contacto real con la cultura andina.

Mientras la mayoría de destinos de MTB se ubican entre 1,000 y 2,500 metros de altitud, en Cusco se pedalea desde los 2,800 hasta casi los 5,000 metros. Los desniveles pueden superar los 1,500 metros en un solo descenso, lo que convierte cada ruta en un desafío físico pero también en una experiencia visual única: se pasa del frío seco de la alta montaña a valles verdes y subtropicales en pocas horas.

Senderos incas que aún están vivos

A diferencia de parques de MTB con infraestructura construida para el turismo, las rutas en Cusco son caminos antiguos que las comunidades locales mantienen porque los usan a diario. Son senderos de herradura, escaleras incas originales y trochas que conectan pueblos donde se habla quechua, se cultiva en terrazas agrícolas de 500 años y se pastorea alpacas.

“Estos caminos no fueron hechos para turistas, forman parte de la vida de las comunidades”, explica un guía local. “Cuando pedaleás acá, estás pasando por territorios vivos, por espacios sagrados para la gente que los habita”.

Esa autenticidad es lo que atrae a viajeros argentinos que ya conocen Bariloche o Mendoza y buscan algo distinto. En Cusco no hay multitudes ni infraestructura masiva. Hay montaña real, cultura andina sin filtro y paisajes que no están adaptados a la comodidad del visitante.

Cuatro rutas que combinan adrenalina y cultura

  • Yuncaypata es la introducción perfecta. Desciende desde 3,766 hasta 3,329 metros entre eucaliptos y caminos de tierra compacta. Son 5,5 a 7 kilómetros con 437 metros de desnivel. Es la ruta donde se prueba cómo responde el cuerpo a la altura antes de ir a rutas más exigentes.
  • Chinchero–Urquillos sale desde el pueblo colonial de Chinchero (3,750 metros) y baja por empedrados incas, terrazas agrícolas en uso y escaleras de piedra originales. Entre 5,5 y 9 kilómetros de bajada técnica con curvas que exigen control. El paisaje se abre en miradores naturales donde se ve todo el valle.
  • Abra Málaga es el descenso largo: parte desde más de 4,300 metros y baja 50 kilómetros hasta el Valle Sagrado (2,800 metros), perdiendo 1,500 metros de desnivel. Lo impresionante es el cambio de ecosistemas: se empieza rodeado de picos nevados y aire que corta la respiración, y se termina entre ríos torrentosos y vegetación tropical. Es como atravesar varios países en un solo día.
  • Maras–Moray es la opción cultural: 20 a 30 kilómetros por caminos rurales que conectan las terrazas circulares de Moray (un antiguo laboratorio agrícola inca) con las salineras de Maras, donde se extrae sal de forma tradicional desde hace siglos. Menos técnico, más paisaje y cultura.

El factor altura

Cusco está a 3,399 metros de altitud. Para alguien que vive a nivel del mar como en Buenos Aires (25 metros sobre el nivel del mar) o Mendoza (800 metros), el soroche (mal de altura) es un riesgo latente. Los síntomas incluyen dolor de cabeza, náuseas, mareos y dificultad para respirar. En casos severos, puede derivar en edema pulmonar o cerebral.

La recomendación médica establece al menos dos días de aclimatación antes de cualquier actividad física intensa. Caminar por la ciudad, tomar mate de coca (legal y tradicional en Perú) y evitar el alcohol contribuyen al proceso de adaptación. Si aparecen síntomas graves, descender a menor altitud es la única solución efectiva.

Cuándo ir y cómo elegir operador

La mejor época es entre mayo y octubre, cuando el clima es seco y las temperaturas diurnas van de 10 °C a 21 °C. Julio y agosto son los meses más secos, aunque las noches pueden bajar de cero. Entre diciembre y marzo, las lluvias convierten los senderos en zonas de riesgo y la mayoría de operadores suspenden actividades.

No todos los operadores tienen los mismos estándares. Algunos priorizan volumen sobre seguridad y conservación del terreno. Las señales de alerta a las que tiene que estar atento incluyen bicicletas en mal estado, guías sin capacitación en primeros auxilios, grupos masivos y ausencia de vehículo de soporte.

Los operadores serios ofrecen bicicletas de doble suspensión (Kona, Trek, Giant), casco obligatorio, equipamiento de protección y trabajan con acuerdos formales con las comunidades locales para mantener los senderos y respetar cierres temporales cuando hay riesgo de erosión.

Más que un destino de aventura

Para los argentinos acostumbrados a viajar por la región, Cusco ofrece algo que pocos lugares pueden igualar: la posibilidad de pedalear en un entorno donde la cultura andina no es decoración turística sino vida cotidiana. El quechua se habla en las calles, las terrazas producen papa y maíz, y las montañas siguen siendo Apus protectores para quienes las habitan.

Pero también exige responsabilidad. Elegir operadores con estándares ambientales, respetar los tiempos de aclimatación y entender que los senderos son espacios compartidos con comunidades forma parte de la experiencia.

Información técnica de recorridos, logística de aclimatación y detalles de rutas en Peru Biking Tours.

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