La segunda ola de coronavirus
Por falta de camas en terapia intensiva, clínicas privadas porteñas derivan pacientes a Provincia
La Cámara de Prestadores de Salud del Conurbano (CAPRESCO) advirtió que, ante el alza de la ocupación de las camas de terapia intensiva de las clínicas privadas de la Ciudad de Buenos Aires, se incrementó el traslado de pacientes porteños a clínicas de la provincia de Buenos Aires.
Guillermo Barreiro, gerente del hospital Dr. Alberto Duhau y vicepresidente de CAPRESCO, explicó a Télam que en los últimos días “ante un panorama de alta ocupación de las camas disponibles en terapia intensiva, las clínicas porteñas comenzaron a derivar pacientes a los establecimientos privados bonaerenses, especialmente a los partidos de La Matanza y Tres de febrero”.
El miércoles por la tarde, en una de las clínicas más grandes de La Matanza, ocho ambulancias esperaban su ingreso en la puerta por demoras para poder trasladarlos o hacer el ingreso, una postal atípica aún durante la primera ola de la pandemia, señalaron desde la Cámara.
Según explicaron, la inversión en la lógica de las derivaciones tiene dos motivos: la multiplicación de los casos en la Ciudad de Buenos Aires después de Semana Santa que se atienden en las instituciones de la ciudad y, además, pacientes bonaerenses que viajan a hisoparse y a atenderse a una clínica porteña de su prepaga y que, tras el diagnóstico, son derivados de la Ciudad a la Provincia.
Por su parte, desde la Federación de Cámaras de Emergencias Médicas y Medicina Domiciliaria (FEM) aceptaron que hay demoras en los traslados de emergencia porque a las prepagas y obras sociales se les complica conseguir camas en la Ciudad de Buenos Aires y admitieron que hay demoras de hasta diez horas para acceder a una consulta por videollamada en caso de síntomas leves.
Además, ante la saturación de las líneas telefónicas de algunas obras sociales y prepagas, llamaron a evitar congestionar los números de urgencia con llamadas administrativas o vinculadas a otro tipo de atención médica que no sea Covid-19.
El jueves, el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, afirmó que "el epicentro de esta segunda ola de la pandemia es la Ciudad de Buenos Aires" y que allí “el sistema privado está saturado” y por tanto deriva pacientes a la Provincia.
“El epicentro de esta segunda ola es la Ciudad de Buenos Aires. Esto no es ni un insulto ni una chicana. Los casos en todo el mundo se miden comparados con la población. La incidencia (cada 100.000 habitantes) en la Ciudad es de 623 casos y en la Provincia 340”, afirmó.
El gobernador sostuvo que “en la Ciudad estalló el sistema privado” y a los pacientes “los están mandando para la Provincia”, tras lo cual dijo que “eso está bien, porque el AMBA es casi una zona única” pero remarcó la necesidad de “coordinar” medidas entre ambos distritos.
“Si se deja hacer cualquier cosa de un lado de la General Paz y del lado de la Provincia se restringe, eso no funciona; por eso es necesario coordinarlo. El virus no reconoce un lado y otro de la General Paz”, expresó en conferencia de prensa en La Plata.
Por su parte, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, admitió el viernes que “circunstancialmente alguna persona que vive en la Ciudad se atienda en la Provincia”, pero remarcó que “en la realidad, cuando miramos los datos lo que sucede es totalmente al revés”.
“El 30% de las camas de terapia intensiva, tanto públicas como privadas, están ocupadas por residentes de la Provincia de Buenos Aires, como sucede habitualmente en la Ciudad más allá de la pandemia”, señaló durante una conferencia de prensa.
Según datos oficiales, el 81,4% de la población de la Ciudad está afiliada a algún sistema de atención de la salud: el 46,1% a obras sociales, el 18% a medicina prepaga o mutual vía obra social, el 10% a la medicina prepaga por contratación voluntaria y el resto agrupa a los que tienen mutual o sistemas de emergencias médicas.
Mientras, el 18,6% de los habitantes tiene acceso al sistema público de salud, que cuenta con 33 hospitales: 13 generales de agudos, tres generales de niños, 14 especializados y tres odontológicos.
Cifras récord
Según el parte epidemiológico dado a conocer el viernes por el Ministerio de Salud, en Argentina hay 3.971 personas con coronavirus internadas en terapia intensiva. El porcentaje de ocupación de camas a nivel nacional es del 64,3% y en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) del 73,8%.
La cifra de contagios de Covid-19 en Argentina alcanzó un nuevo récord, con 29.472 casos en 24 horas. Además, en ese período murieron 160 personas, con lo que desde el inicio de la pandemia se registraron 59.084 muertes en el país.
La semana pasada, la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva publicó un informe que indicaba que de un muestro a un total de 53 instituciones públicas y privadas en el Gran Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires “se observó una tasa de ocupación del 93%, de las cuales 57% fueron pacientes COVID 19 con 78% en ventilación mecánica (ARM)”.
El fuerte aumento de la ocupación de las camas de terapia intensiva se registra en varias partes del país, como en Mendoza, donde superó el 87% en el Gran Mendoza y el 84% en todo el territorio provincial, en la semana que va entre el 9 y el 15 de abril. La semana anterior, entre el 2 y el 8, la ocupación llegaba al 71% en el Gran Mendoza y al 65% en todo el territorio, informó el diario Los Andes.
Un caso testigo
La jueza Nacional de Ejecución Penal de la Ciudad de Buenos Aires María Jimena Monsalve contó en su cuenta de Twitter la situación que vivía la noche del jueves, cuando contagiada con coronavirus, tuvo que esperar “destruida” durante 15 horas y sentada en una silla para acceder a una cama en un sanatorio porteño.
Monsalve relató en las redes sociales que se contagió de coronavirus a través de su hijo, que se infectó en la escuela, por lo que tras conocer su resultado positivo, ingresó a una clínica de la Ciudad, donde tuvo que esperar para recibir atención médica.
“Estoy ingresada en un sanatorio con Covid. No hay cama. Desde las 15 horas no me derivan. Sentada en una silla, destruida. Hace 30 años aporto. Contagio por hijo escolar. Soy asmática y me cuide como pocos. Nadie dice esto en los medios. @ospjn @AMFJNArgentina #nohaycamas”, posteó en su cuenta.
Horas después, a las 3 de la madrugada, la jueza posteó: “Ahora sí, acostada en una cama. No importa color político, esto es vida o muerte. Ahogarte o respirar. Volver a ver a tus hijos. Hoy la comunicación en red y los que me conocen transparente y justiciera me ayudaron y confié en cada uno. Conciencia, por favor”.
“Ah y despierta, porque me dieron un vagón de remedios, entre ellos corticoides, que me dan insomnio”, finalizó su posteo la magistrada.
CB con información de Télam
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