En Catamarca, una provincia marcada por la religiosidad y el conservadurismo, Vicky, Cris e Inti se organizan para continuar una tarea tan ancestral como revolucionaria: acompañar decisiones. Son garantes amoroses de un derecho que suele necesitar más que la letra fría de la ley: un aborto en el norte argentino.
Cris tiene 37 años, Inti 22 y Vicky 40. Son parte de las múltiples y heterogéneas colectivas que integran Socorristas en Red, una articulación de grupas feministas y transfeministas que desde 2012 -mucho antes de la masividad y popularidad de los pañuelos verdes- brindan información y acompañan abortos en diferentes provincias.
Decisiones y derechos
Acompañar abortos sigue siendo tan necesario ahora como antes de la Ley N° 27.610 de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), alcanzada en diciembre de 2020, tras décadas de luchas, abortos clandestinos y debates públicos.
En Catamarca, como en tantos otros lugares del territorio plurinacional, acceder a un aborto seguro sigue siendo una experiencia desigual. Es una práctica aun cargada de estigmas, miedos, desinformación y obstrucciones por parte de las mismas instituciones y agentes del sistema de salud, responsables de garantizar un acceso libre y gratuito al aborto.
La cantidad de consultas que llegan a Socorristas disminuyó con la sanción de la ley aunque volvió a crecer en los últimos meses: “Atrás de eso hay un montón de realidades. No son números, son personas que han decidido pasar por un acompañamiento con socorristas”, cuenta Vicky.
“Hay lugares donde la ley no llega. Hay profesionales que siguen obstaculizando, hay personas que no saben que pueden abortar de manera legal y gratuita”, advierten desde Socorristas.
La difusión activista se vuelve clave: “La información es poder. Si sabes que podes, que tenés derechos, ya es un paso enorme”.
La alternativa socorrista es vista como un acompañamiento amoroso pero tiene también razones territoriales : la centralización de la atención en la ciudad capital, se vuelve una barrera para las personas del interior provincial. Les socorristas arman red en los territorios teniendo en cuenta barreras étnicas, raciales, de clase y hasta de género.
Poner el cuerpo
Conversar con les integrantes de Socorristas Catamarca es recorrer casas y espacios de activismo: como el salón del centro cultural La Dorila, donde brindan talleres presenciales, hasta sus habitaciones personales donde muchas veces están al teléfono en acompañamiento o reunides organizándose.
La intervención socorrista comienza desde el primer contacto: una llamada, un mensaje, una consulta espontánea que abre la puerta al acompañamiento. “Los acompañamientos empiezan con una conversación. No opinamos, escuchamos. Y confiamos en la decisión de la otra”.
Las formas de acompañamiento incluyen un sistema organizado a partir de años de experiencia: después de la llamada, una entrevista contextualiza la situación y se concreta un taller grupal presencial cuando es posible o virtual si es necesario. Allí se brinda información técnica sobre el uso de la medicación, los cuidados, y sobre todo, se comparten las historias y experiencias. Explican: “el aborto deja de ser un hecho individual y se transforma en una experiencia colectiva”.
El socorrismo apuesta por la autogestión de los abortos. Cada persona resuelve su propio aborto, contando con la información brindada por socorristas, con el acompañamiento de la grupa y a veces de alguna amiga, pareja, familiar, aunque muchas veces “están solas” abortando en sus casas sin que nadie sepa, y eso es lo que el socorrismo viene a romper. Dejan de estar solas desde el momento en el que llegan a ese taller.
Todo es voluntario y basado en el compromiso: “No cobramos por esto. Lo hacemos porque lo creemos necesario. Y muchas veces lo sostenemos con nuestro propio bolsillo”.
Acompañar a quien decide abortar no es solo acompañar el aborto. “Le preguntás: ¿qué vas a hacer después? ¿Qué te atraviesa en tu día a día? ¿Qué sigue para vos?”, cuenta Inti. Es una forma de devolverle agencia a quien muchas veces ha sido reducida a un cuerpo gestante.
Visibilidad
“Si yo me escondo, si tapo mi cara, ¿cómo te voy a dar seguridad a vos?” La frase retumba con fuerza en la plaza del barrio de Inti, mientras hablamos de visibilidad en una provincia donde todo el mundo se conoce, donde hablar de aborto todavía genera susurros y prejuicios, donde mostrarse como activista transfeminista es una apuesta política.
El hacer socorrista se hace visible en las calles, en los talleres, en las redes, pero también en las vidas públicas de sus integrantes. Son docentes, estudiantes, vecines, madres, hermanes, mujeres y disidencias sexogenéricas. Ponen el cuerpo y el rostro para que otras y otres puedan decidir sobre el suyo. Acompañan desde el afecto y la información, pero también desde una convicción profunda: visibilizar es resistir y existir.
Un legado ancestral
Para muchas el socorrismo no es solo una práctica contemporánea sino que remite a una práctica histórica. Vicky plantea la necesidad de reconocer a aquellas mujeres que abortaban con otros elementos y técnicas, con plantas medicinales, reconociendo en sus propias abuelas, madres y ancestras un legado. “Mi abuela era la abortera del barrio. Me enteré hace poco por mi viejo y ahí entendí que esto que hago tiene raíces profundas, que hay una fuerza que no viene solo de mí… No hay que olvidarse de las viejas”.
Esa tradición se encuentra con un respaldo científico que es importante conocer a la hora de difundir la información segura sobre cómo acceder a un aborto y decidir sobre nuestros propios cuerpos en un marco de legalidad y con métodos aprobados por la Organización Mundial de la Salud que contemplan el uso de Mifepristona y Misoprostol para interrumpir el embarazo hasta la semana 12 de forma segura.
Una y otra vez vuelve la palabra “acompañar”: “No te estoy diciendo que tenes que hacer y ya está, sino que te comparto todo lo que fui aprendiendo de esta larga historia que tenemos, y te lo doy con todo el amor del mundo sin esperar recibir nada a cambio”, señala Inti. “No te cargamos de culpas, no te cargamos con nada, al contrario, tratamos de expiar todo eso”.
Cris lo ve como una forma de vivir la feminidad y la disidencia: “No es que yo ayudo. Es que construimos redes… No nos salva la individualidad. Nos salva lo colectivo”.
MG / MA
“Decimos que acompañamos interrupciones de embarazo, pero en realidad acompañamos decisiones”, explican. El contacto telefónico sigue en talleres donde se brinda información. Les socorristas no proveen medicamentos

“Decimos que acompañamos interrupciones de embarazo, pero en realidad acompañamos decisiones”, explican. El contacto telefónico sigue en talleres donde se brinda información. Les socorristas no proveen medicamentos
Inti tiene 22 años. Apuesta a la visibilidad como primera medida de acceso al derecho y medida permanente contra el estigma. “Lo que no se ve, no existe al ojo público, pero lo que ya se ha visto no se puede volver a ocultar”

Inti tiene 22 años. Apuesta a la visibilidad como primera medida de acceso al derecho y medida permanente contra el estigma. “Lo que no se ve, no existe al ojo público, pero lo que ya se ha visto no se puede volver a ocultar”
Hacer red. El socorrismo es una fuente de información y también de articulación en aquellos espacios donde todavía existen obstáculos para acceder a la ley

Hacer red. El socorrismo es una fuente de información y también de articulación en aquellos espacios donde todavía existen obstáculos para acceder a la ley
No se trata solo del aborto en sí mismo: acompañar implica ver a la persona más allá del cuerpo gestante. Les socorristas mantienen una conversación abierta y buscan agregar pautas de cuidado posterior

No se trata solo del aborto en sí mismo: acompañar implica ver a la persona más allá del cuerpo gestante. Les socorristas mantienen una conversación abierta y buscan agregar pautas de cuidado posterior
La aprobación de la ley implicó una caída en las consultas al socorrismo porque mucha de la demanda pudo volcarse en el sistema de salud. No es excluyente del socorrismo que provee información y escucha

La aprobación de la ley implicó una caída en las consultas al socorrismo porque mucha de la demanda pudo volcarse en el sistema de salud. No es excluyente del socorrismo que provee información y escucha
Cris, Inti y Vicky. Hay diversidad de ambos lados de la línea pero en todos los casos se hace red de cuidado

Cris, Inti y Vicky. Hay diversidad de ambos lados de la línea pero en todos los casos se hace red de cuidado
Los espacios socorristas fueron claves en la campaña para conseguir la legalización y se mantienen como fuente de información y acompañamiento. Custodian el acceso al derecho

Los espacios socorristas fueron claves en la campaña para conseguir la legalización y se mantienen como fuente de información y acompañamiento. Custodian el acceso al derecho
En la calle. Hasta hace algunos años les socorristas escondían su identidad por temor a consecuencias legales. La decisión de exponerse en localidades pequeñas es una decisión política

0