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Después de cuatro meses de caída, la actividad económica creció 2,5% en junio

Junio fue el primer mes de mejora, después de cuatro datos negativos

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Luego del freno experimentado entre febrero y mayo, asociado a la segunda ola de Covid-19, la actividad productiva retomó una senda de recuperación de la mano del avance de la campaña de vacunación y la baja sostenida de contagios. Según los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la economía creció 2,5% en junio, en términos desestacionalizados, y 10,8% en la comparación con el mismo mes de 2020. En el primer semestre del año acumula un crecimiento de 9,7% interanual.

Luego del primer pico de coronavirus, en nivel de actividad comenzó a mejorar a mediados de 2020, pero ese ciclo se interrumpió en febrero pasado. Ese mes el estimador arrojó una caída intermensual de 0,6%, a la que siguieron una baja de 0,2% en marzo, de 0,7% en abril y de 2% en mayo. Junio es, entonces, el mes en el que se logra revertir el signo negativo. “Se ubica solo 2,2% por debajo del nivel pre-Covid, de febrero 2020”, celebraron en el Ministerio de Economía. 

De acuerdo al Estimador mensual de actividad económica (EMAE) publicado este jueves, crecieron de forma interanual 13 de los 15 sectores relevados, ocho de ellos con subas de al menos dos dígitos (pesca escaló 108,7%). Los mayores aportes se registraron una vez más en la industria (16,8% interanual) y comercio (13,2% interanual), sectores que acumulan ocho subas consecutivas. 

Según el último panorama productivo que elabora el Centro de Estudios de la Producción (CEP XXI), del Ministerio de Desarrollo Productivo, la movilidad de las personas (que correlaciona fuertemente con la actividad comercial, gastronómica y de servicios culturales) se encuentra en máximos desde el inicio de la pandemia. Puntualmente, la movilidad al lugar de trabajo ya retornó a niveles del verano de 2020. 

Según anticipa el CEP XXI, los datos preliminares de julio son “en líneas generales positivos”, aunque volverían a mostrar una caída al menos en el rubro de la industria manufacturera. De acuerdo al consumo de energía en las principales plantas industriales, la actividad fabril operó 3,9% por encima de julio de 2019 y 5,2% por encima del promedio de 2019. De 1.020 plantas industriales, el 52,8% consumió más energía que en julio de 2019. Sin embargo, la evolución fue dispar entre sectores: de 14 ramas, la mitad incrementó su consumo de energía desestacionalizado frente a junio y la otra mitad lo redujo. “Tomando el conjunto de la industria, nuestra estimación es una caída del 3,9% mensual desestacionalizado, que en parte se debe a que el dato de junio había sido extraordinariamente elevado, posiblemente por cierta recomposición de stocks tras el parate de fin de mayo. También a lo ocurrido en la industria automotriz, que produjo 8.100 vehículos menos que en junio por paradas por vacaciones de invierno y por faltante de insumos a nivel global”, detalló el informe.

El EMAE permite anticipar las tasas de variación del producto interno bruto (PIB), que según las estimaciones del Gobierno crecerá 7% este años, o incluso un poco más. 

DTC

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