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“Milei culiadazo” y “papafritazo”: manifestaciones contra la visita del Presidente a Córdoba

Una postal del “papafritazo” en contra de Javier Milei en Córdoba.

Mauricio Caminos

Córdoba —

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“Milei culiadazo”. Solo dos palabras pero un golpe de efecto certero: el apellido del Presidente y el superlativo del tradicional insulto cordobés. Apenas con eso un grupo de autoconvocados generó una fuerte intervención callejera con carteles y pasacalles contra la presencia de Javier Milei en Córdoba y obligó a que la Policía y hasta bomberos tuvieran que salir durante la madrugada de este viernes a “limpiar” la ciudad, un día antes de la visita oficial por el acto del 25 de mayo. Incluso hubo comentarios en grupos de WhatsApp libertarios para organizar una contraofensiva, supo elDiarioAR.

La movida anti-Milei tuvo hoy una “segunda fase”, con un “papafritazo” en pleno centro, a metros del Cabildo y la Catedral, en la Plaza San Martín, donde dará su discurso el jefe de Estaso este sábado por la tarde. La excusa de las papas fritas fue el conocido disgusto que tiene por esa comida el Presidente. Se repartieron gratis conos de papas con la inscripción “Milei culiadazo”.

Además, papafrita (todo junto) es un adjetivo calificativo negativo utilizado antiguamente en la Argentina, Uruguay y México. Según el Diccionario de Americanismos de la Asociación de Academias de la Lengua Española, un o una papafrita es una “persona tonta, ingenua o poco perspicaz”.

“Milei viene a Cordoba y no va a traer nada para la gente, así que por lo menos queríamos hacer algo para todos”, explicó Facundo Armella, cerebro creativo de la campaña crítica al libertario.

La instalación de unos 30 pasacalles y carteles en calles, avenidas y puentes clave de la ciudad de Córdoba se desplegó la noche de este jueves, bajo una llovizna gélida. A las pocas horas efectivos de la Policía de la Provincia, que comanda el gobernador Martín Llaryora, y también bomberos salieron a quitarlos para evitar que durante la mañana del viernes generaran repercusión mediante. Pero las fotos ya habían sido viralizadas en las redes sociales.

“Un vecino gorra llamó a la policía y por eso los sacaron, pero no estamos violando ninguna ley. Fue un gestito para los pituquitos de Recoleta”, diji Armella, que es abogado penalista, en la FM 102.3, en referencia a la crítica hacia Buenos Aires que hizo Llaryora el día que ganó sus elecciones. Los carteles se financiaron con una campaña de donaciones que recolectó cerca de $1 millón en los últimos días.

Pero no sólo motivó un operativo “limpieza” de las fuerzas oficiales. En grupos de militantes libertarios se buscó armar una contraofensiva, pero con menos vuelo viral. “Los que saquen los carteles hagan un video y después ponemos el nombre del boludo este y le ponemos que es culiadazo. Ellos son los papafritas”, fue un audio que circuló en un WhatsApp de simpatizantes de Milei al que tuvo acceso elDiarioAR. Pero el “papafritazo” anti-Milei fue efectivo: este viernes antes de las 13 ya había armada una larga fila de personas en una de las esquinas del Cabildo cordobés y los conos de papas gratis se agotaron en pocos minutos. 

MC/JJD

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