La Coronavac, de origen chino y producción brasileña, arroja una eficacia general de sólo 50,3%
La vacuna Coronavac contra el coronavirus, una de las principales opciones para la inmunización en Brasil, tiene una eficacia global del 50,38%, según informó hoy el Gobierno del estado de San Pablo, donde se encuentra el instituto estatal Butantan, encargado de la producción. El porcentaje informado es de los más bajos entre los principales proyectos internacionales de inmunización y apenas supera el umbral requerido por la Organización Mundial de la Salud.
Esta nueva cifra llega unos días después del anuncio del 78% de eficacia para la utilización de la vacuna en casos leves. La noticia había sido celebrada por el gobernador de San Pablo, Joao Doria, un rival de Jair Bolsonaro que considera como un triunfo político el avance de la vacuna desarrollada por la farmacéutica china Sinovac. Luego de negarse a incluirla en el plan de vacunación dado el origen en Pekín, el Presidente finalmente aceptó considerarla.
El anuncio de la eficacia de la vacuna a nivel general llega después de rumores y quejas por la demora en la publicación de los resultados de los ensayos clínicos, que estaban previstos para diciembre. El porcentaje anunciado es menor al que arrojaron otras vacunas como la Sputnik V (91%), la de Pfizer\BioNtech (95%), e incluso a los de la Coronavac en Turquía (91%) e Indonesia (65,3%).
El colombiano Ricardo Palacios, director de Investigación Clínica del Instituto Butantan, explicó que resultado de eficacia es menor que otras vacunas porque se hizo un ensayo sobre mayor número de personas mayor que otros laboratorios. “Fue una decisión consciente. Decidimos sacrificar la eficacia para aumentar el número de casos y tener una respuesta más rápida. Fue una decisión arriesgada”, agregó.
El Gobierno argentino se encuentra negociando actualmente con el Instituto Butantan para la compra de dosis de esta vacuna y otros países como Chile también han apostado al proyecto para cubrir las dosis necesarias para alcanzar la inmunización. En este último caso, sin embargo, las dosis llegarían desde China y no desde Brasil.
Además de la Coronavac, la Agencia de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) brasileña se encuentra evaluando a la vacuna de AstraZeneca-Oxford, de la cual espera un embarque de 2 millones de dosis, que están en India y no fueron aún liberados. Recién con la autorización del ente regulador, Brasil va a poder anunciar un inicio a su plan de vacunación, que por ahora no tiene fecha.
Con información de agencias
NZ
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