Feletti se reunió con mayoristas para impulsar el congelamiento en los pequeños comercios
El secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, se reunió esta mañana con empresarios del segmento mayorista para intentar que, mediante una rebaja de precios en este eslabón de la cadena, el congelamiento de 1.432 productos definido por el Gobierno se pueda reflejar en los comercios de cercanía. Un canal difícil de alcanzar con los programas de precios y que representa más del 60% de las compras de los argentinos y argentinas.
El congelamiento —que Feletti intentó primero acordar con todos los actores del sector y terminó por imponer mediante una resolución— retrotrajo los precios de una canasta de Precios Cuidados extendida al 1° de octubre y ordenó mantenerlos estables hasta el 7 de enero de 2022. Como lo que se especificó fue únicamente el precio en góndola, toda la discusión se da río a abajo y el gran punto de tensión entre los distintos eslabones de la cadena son los márgenes de ganancia: quién y cuánto ajusta cada uno en pos de llegar al consumidor con determinado precio final.
Esta mañana fueron convocadas a la reunión las principales cadenas mayoristas: Maxiconsumo, Vital, Diarco, Yaguar y Makro. Todas, menos la última, son empresas familiares de capitales locales. Según confirmaron fuentes de Comercio, Feletti les solicitó que garanticen la retracción de sus precios al 1° de octubre, como marcó la resolución, pero sobre sus propios precios. Es decir, sus valores de venta quedarían por debajo de los enumerados en la lista oficial, que son los correspondientes a góndolas de comercios minoristas.
“Los mayoristas van a hacer todo lo posible para bajar los precios a lo mínimo indispensable. Al menos la Cámara piensa así”, dijo a elDiarioAR Victor Fera, dueño de Maxiconsumo y presidente de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas. Él no participó de la reunión, pero sí fue su hijo.
Si bien los supermercados son señalados muchas veces como formadores de precio y apuntados como los responsables de las remarcaciones, son también un canal muy directo para negociar y bajar masivamente programas, así como para informar al Gobierno las variaciones en las listas de precio que les pasan los fabricantes. En los locales pequeños, la historia es otra. Se abastecen en mayoristas y distribuidores y solo en algunos casos puntuales reciben productos directamente de fabricantes, como hacen las grandes cadenas. Si ya entre los grandes jugadores del supermercadismo señalan que es muy difícil negociar con “monstruos” como Arcor o Molinos Ríos de la Plata, la capacidad que tienen para hacerlo los pequeños comercios, e incluso cadenas de supermercados regionales, es prácticamente nula.
Según un relevamiento de la consultora Scentia, desde abril de 2020 la diferencia de precios entre supermercados y pequeños almacenes se fue ampliando, hasta llegar a una brecha de 20% en agosto. No es un asunto marginal, dado que los supermercados canalizan solo el 35% del mercado de consumo masivo —por eso en el sector suelen decir que hay una “sobrerrepresentación simbólica” de su lugar— y son elegidos mayoritariamente por los sectores de mayor poder adquisitivo. Ahí está el interés de Feletti de intervenir por la vía de los mayoristas.
“Si los mayoristas tienen buen precio, nosotros lo vamos a ofrecer”, dijo a elDiarioAR Yolanda Durán, presidenta de la Cámara Empresarial de Desarrollo Argentino y Países del Sudeste Asiático (Cedeapsa), que nuclea a 8.000 de los 13.000 supermercados chinos de toda la Argentina. En los pequeños comercios no rigen formalmente los Precios Cuidados, situación que se intentó saldar con la creación, en junio pasado, de una canasta específica de 70 productos denominada Súper Cerca. “Nunca funcionó”, dijo Durán.
Según datos publicados ayer por el Indec, los precios mayoristas aumentaron 2,5% en agosto, en línea con la inflación del mes. Las ventas en supermercados crecieron 4,5% interanual, y en el caso de los mayoristas, 2,4% interanual. Consultoras privadas estiman que el consumo cerrará el año en datos positivos, después de 5 años consecutivos de caída.
Ayer en el debate por la ley de etiquetado frontal distintos legisladores apuntaron contra los fabricantes de alimentos y los señalaron por su supuesta responsabilidad en el encarecimiento de los bienes de consumo elemental, una argumento que también se escucha en la calle. Incluso el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, dijo en declaraciones radiales que la inflación se vincula también a una cuestión de “competencia y de monopolios” que es necesario revisar.
DT
0