Derrotadas en Corrientes, Karina Milei y Cristina Kirchner llegan desafiadas a la cita electoral bonaerense

“El provincialismo avanza”, mascullaba bronca anoche un operador peronista cuando supo de manera contundente el resultado de las elecciones en Corrientes: el hermano de Gustavo Valdés, Juan Pablo Valdés, ganó en primera vuelta y dejó sin chances al peronista Martín Ascúa –bendecido por Cristina Kirchner– y al diputado libertario Lisandro Almirón –alfil de Karina Milei–. Lo que ocurrió en los comicios provinciales en el NEA fue la reafirmación de que el poder aún se mueve por redes locales más que por discursos nacionalistas. Y profundizan la expectativa política hacia el domingo próximo, cuando se vota en la provincia de Buenos Aires: la ex presidenta fue desafiada por Axel Kicillof al desafiar las elecciones, y el Gobierno apuesta a plebiscitar la gestión de Javier Milei en el distrito más populoso del país.
El cierre de campaña de Karina Milei y Lisandro Almirón de La Libertad Avanza (LLA) fue abruptamente abortado por un episodio de fuerte rechazo popular. Su caminata por el centro de Corrientes terminó con insultos y forcejeos, en un escenario marcado también por el escándalo de presuntas coimas en la agencia ANDIS. La hermana del Presidente viajó en compañía de Martín Menem, el titular de la Cámara de Diputados también en el foco de las críticas.
El resultado fue devastador: Almirón quedó cuarto, apenas con menos del 10 % de los votos. Temprano en las redes sociales habían buscando instalar una encuesta donde ubicaba a LLA como espacio favorito. Nada más alejado de la realidad.
Karina pagó caro el destrato a los gobernadores, en este caso al radical Valdés. Hasta el cierre de listas nacionales se aventuraba un acuerdo entre ambos para la boleta de diputados correntinos al Congreso, pero todo terminó en ruptura. Curioso fue que anoche se mostró con Valdés su par chaqueño, Leandro Zdero, que sí cerró un pacto con los hermanos Milei. Y también estuvo el mendocino Alfredo Cornejo, otro radical, que aceptó con la Casa Rosada que el ministro Luis Petri sea el primer candidato nacional en la provincia.
Salvo en los comicios porteños de mayo, ayer con Corriente LLA sumó una nueva provincia donde los candidatos violetas quedaron relegados. Ya le había pasado en Santa Fe, Formosa, Misiones, Salta. Ahora resta saber el saldo en PBA, donde la apuesta principal de los libertarios es contrarrestar en la Primera Sección electoral (el norte del conurbano) una casi segura derrota frente al peronismo en la Tercera (el sur).
La elección bonaerense también es un desafío para Cristina Kirchner, otra de las figuras derrotadas ayer. La ex mandatario tuvo en Corrientes su último acto partidario antes de su condena en la causa Vialidad. El armado del peronismo K centró sus fichas en Martín “Tincho” Ascúa, jefe comunal de Paso de los Libres, pero quedó lejos: alcanzó cerca del 20 % de los votos. La intención era entrar al balotaje, pero no lo logró.
Cristina se juega parte de su futuro el domingo en PBA. Rechazó siempre el desdoblamiento que propuso Kicillof, por lo que si el panperonismo pierde o no gana con contundencia en el resultado general de la provincia –aunque cada sección electoral vota cargos distintos–, la ex presidenta confirmará que tenía razón en marcar la oposición interna.
Pero si la boleta de Fuerza Patria derrota con firmeza a LLA, cada tribu tendrá motivos para colocarse la cucarda. Kicillof dirá que su estrategia fue acertada, el kirchnerismo recordará que ocupó gran parte de los lugares en las listas –aunque las cabezas en el conurbano, Gabriel Katopodis y Verónica Magario, son del gobernador– y Sergio Massa celebrará la narrativa de la unidad más allá de todo.
Con una victoria el panperonismo apenas demorará la ruptura definitiva que distintas voces internas ya vislumbran para el día después de las elecciones de octubre.
Por último, el triunfo de Valdés se leyó también como una victoria para los dirigentes que están intentando construir una opción centrista: el cordobés Juan Schiaretti viajó el jueves a Corrientes y ayer buscó vender el resultado de Valdés como propio. También se mostraron en sintonía Maximiliano Pullaro (gobernador de Santa Fe) y Carlos Sadir (Jujuy), artífices del frente Provincias Unidas, que buscan quebrar la polarización entre libertarios y peronistas que se anticipa para el 26 de octubre.
MC
0