Espinoza acepta la interna en La Matanza por primera vez, con Máximo “operando” para el Evita de Pérsico

La Matanza vivirá su propia batalla política el domingo 13 de agosto de las PASO. Por primera vez habrá internas en el peronismo oficialista, que desde 2005 domina Fernando Espinoza. El actual intendente buscará la reelección –va por su quinto mandato al frente del municipio–, pero tuvo que aceptar la primaria contra Patricia “Colo” Cubría, referente del Movimiento Evita y pareja de Emilio Pérsico. 

La inédita PASO en el flamante sello de Unión por la Patria quedará confirmada este viernes, cuando vence el plazo para que la Junta Electoral oficialice las listas. Hace dos años, el propio Espinoza impidió la rivalidad interna. Argumentó que al frente vecinal que encabezaba el Evita le faltaban avales. Ahora no pudo dar el brazo a torcer por un escollo en particular: la influencia de Máximo Kirchner.

Siendo presidente del PJ bonaerense, el hijo de la vice operó como dueño de la lapicera para llenar los casilleros más codiciados en la trama del poder del conurbano. Como publicó elDiarioAR el lunes, Máximo tuvo directa injerencia en las listas para la Legislatura. La Matanza tiene más de un millón de electores, siendo clave en la Tercera Sección, que este año elige senadores provinciales. El diputado nacional se movió con malicia incluso para premiar a Verónica Magario como vice –otra vez– de Axel Kicillof. 

Pero en el detalle del distrito más populoso del conurbano, la jugada de Máximo fue más invisible. “Tenemos boleta porque él nos bancó. Estamos muy agradecidos”, admitió a este medio una encumbrada voz del Evita matancero. “Estamos muy bien. Seríamos la única lista contra Espinoza. Vamos a polarizar contra él”, agregó la fuente consultada. El sábado también se había presentado una tercera lista por la intendencia encabezada por María Laura Ramírez, funcionaria del ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

El acuerdo Kirchner-Evita

El pacto entre la agrupación de Pérsico y Kirchner se teje desde el año pasado. Uno de los episodios que terminó de confirmar el apoyo implícito del diputado nacional fue el ataque que sufrió una cuadrilla de militantes del Evita, en noviembre, mientras hacían pintadas con el nombre de Cubría. Entonces hubo teléfono abierto entre ambos dirigentes y mucho enojo con Espinoza.

De hecho, la denuncia apuntó contra una patota de barrabravas del club Almirante Brown vinculada al intendente. El caso nunca se esclareció del todo, pero el acuerdo encaminado entre el jefe evitero y el cabecilla de La Cámpora terminó de sellarse cuando la vicepresidenta recibió a la cúpula del Evita en su despacho, en mayo pasado. Un segundo nexo de Pérsico fue Eduardo “Cholo” Ancona, responsable bonaerense de la agrupación.

Ahora Espinoza y Cubría medirán sus figuras en el bastión peronista, aunque el favoritismo del intendente parece seguir en pie. “No veo que pueda mover el amperímetro”, comentó un funcionario nacional que conoce al detalle el territorio. 

Ni siquiera Máximo le soltó la mano del todo a Espinoza: en su lista de concejales hay nombres de La Cámpora. También cerró con la CGT y la CTA locales. Y hasta la Corriente Clasista y Combativa, que dirige el diputado Juan Carlos Alderete y es socia del Evita en el gremio de la economía popular UTEP, juega a dos puntas: el referente Gabriel Aranda es el primer precandidato a concejal por la lista de Cubría, mientras ubicó a Miguelina Gómez como tercera concejal suplente en la boleta de Espinoza.

Las boletas de Espinoza y Cubría irán pegadas con las de Sergio Massa para presidente y Kicillof para gobernador. No acompañarán la fórmula que encabeza Juan Grabois, según supo este medio. El dirigente del MTE tendría una papeleta corta en el distrito, aunque tiene un estrecho vínculo con el Evita.

Todos contra Espinoza

Ante la formalización hoy de todos los postulantes, la campaña ya está en marcha. “Nuestro eje será fortalecer la cercanía con los vecinos y hacer hincapié en que Espinoza no resuelve y no aparece”, confió Cubrió a elDiarioAR. Su latiguillo electoral será, como síntesis, una pregunta incisiva: “¿Dónde está el intendente?”. 

En el municipio destacaron a este medio que uno de los ejes de la campaña de Espinoza es el avance de “un megaplan de obra pública”, que incluye 500 obras de mejoramiento urbano, la construcción de 5000 viviendas y 5000 cuadras de asfalto. Lo publicitan como “el más grande de la historia” del distrito. “Tenemos que escuchar a nuestro pueblo y vamos a ganar las próximas elecciones, porque si hay algo que no se compra ni se vende, y se demostró hoy nuevamente en la Argentina, es el Peronismo de La Matanza”, apuntó el jefe comunal en una de sus primeras declaraciones después del cierre de listas.

Si Cubría desafiará desde adentro, Espinoza también tendrá que soportar los dardos desde la oposición por fuera del peronismo. Juntos por el Cambio también tendrá internas, a tono con la disputa arriba entre Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich. Colgado del jefe de Gobierno irá la precandidatura de Héctor “Toty” Flores, actual concejal y cercano a Elisa Carrió. Peleará en las PASO contra otro dirigente social, Eduardo “Lalo” Creus, que irá por el bullrichismo.

El libertario Javier Milei postuló a David Martínez, más conocido como “El Dipy”, cantante de cumbia villera. No habrá interna en La Libertad Avanza, pero sí en el otro extremo del arco político: el Frente de Izquierda-Unidad llevará dos listas para la intendencia: Natalia Hernández, por el lado del PTS-IS que encabeza Myriam Bregman, y Juan Romero, bajo el binomio presidencial del PO-MST que lidera Gabriel Solano. La apuesta del trotskismo es sumar más concejales, luego del batacazo en 2021, cuando ganaron dos bancas.