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Paro de colectivos: caos en la Ciudad y una mesa de diálogo para el lunes

Una postal de las calles de la Ciudad de Buenos Aires durante el paro de colectivos del viernes.

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Desde la medianoche del jueves y hasta las 17:30 de este viernes, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) realizó un paro total de colectivos de pasajeros para corta y media distancia. Incluso algunas líneas del grupo DOTA, la cual opera mayormente en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), habían dejado de funcionar ayer jueves por la tarde. La medida de fuerza también incluyó a la ciudad de La Plata y las provincias de Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe, Formosa y Tucumán.

El gremio encabezado por Roberto Fernández tenía como objetivo que las empresas del sector cumplan la resolución conjunta de los ministerios de Trabajo y Transporte que fijó los salarios de los choferes. Pretendían un aumento escalonado que incluya un salario de 348.800 pesos en julio, 380.192 pesos en agosto y una remuneración básica de 414.409 pesos en septiembre. Además, reclamaban un aumento de los viáticos con los mismos plazos: 1.997 pesos en julio, 2.176 pesos en agosto y 2.372 pesos en septiembre.

El Gobierno, que en anteriores ocasiones dictó la conciliación obligatoria para frenar el conflicto, no pudo hacerlo esta vez ya que “no se puede dictar dos veces”.

Las líneas que forman parte DOTA y que dejaron de brindar servicio desde ayer jueves fueron: 5, 6, 7, 8, 9, 20, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 44, 50, 51, 56, 57, 74, 76, 79, 84, 91, 99, 101, 106, 107, 108, 117, 130, 135, 146, 150, 161, 164, 168, 177, 188, 263, 271, 299, 370, 373, 384, 385, 388, 403, 405, 410, 421, 429, 435, 503 San Vicente, 514 A. Brown, 520 Lanús y 570 Avellaneda.

Al ser un paro total de servicio, durante el viernes se sumaron todos los colectivos que tienen recorrido entre la Ciudad y la provincia de Buenos Aires.

A las 11:30 de hoy, se organizó una reunión entre empresarios y trabajadores en el Ministerio de Transporte. “El objetivo es poder resolver el conflicto y dar una previsibilidad a todo el sistema del transporte. Hay que ser muy responsables a la hora de administrar fondos que son públicos como lo son los subsidios al transporte”, había dicho el ministro Diego Giuliano.

El titular de Transporte coincidió con su par de Trabajo, Raquel “Kelly” Olmos, quien dijo que se trata de un “lockout patronal”, ya que los empresarios “no han depositado los salarios actualizados como habían sido otorgados en paritarias”, lo que generó la “reacción de los trabajadores” en el cese de actividades.

De aquel encuentro en la sede ministerial de Avenida Leandro N. Alem 650, participaro -además del mecionado Fernández, por la UTA- José Troilo (CEAP); Mario Vacca (CETUBA); Fabián Ferreira (CEUTPBA) y Roberto Rodríguez (CTPBA). La reunión duró más de 5 horas. Mientras eso sucedía, desde un acto realizado en la localidad bonaerense de San Bernardo, Sergio Massa apuntó contra las cámaras del rubro.

El ministro y precandidato presidencial de Unión por la Patria describió a los empresarios del transporte como “parásitos del Estado” que “pretenden extorsionar” al Gobierno Nacional. Definió a la medida de fuerza de este viernes como “un paro extraño porque lo forzaron los empresarios”, en línea con sus compañeros del Gabinete.

El Estado les transfirió la plata de los sueldos a los empresarios pero algunos retuvieron la plata de los sueldos para forzar a los trabajadores a salir a la calle”, advirtió Massa. “Creemos en los empresarios argentinos que generan trabajo, en los que arriesgan y apuestan, pero a los que son parásitos del Estado y pretenden extorsionar les decimos: no les tenemos miedo, los vamos a enfrentar para defender el derecho de la gente de viajar para ir a trabajar”, sentenció.

Massa mencionó directamente a dos empresarios : “un tal Faijá y un señor Zbikosky, que lo que pretenden es tomar de rehenes a los trabajadores”. Se refería a Andrés José Faijá, dueños mayoritarios de DOTA. También mencionó a Javier Zbikosky, CEO del grupo Metropol, sobre quien acotó que le dicen “el amarillo”.

Por otra parte, Marcelo Pasciuto, director de la línea 60 de DOTA, dijo a Radio Rivadavia: Los costos del transporte están congelados desde diciembre, con una inflación galopante. Hay una deuda de 40 mil millones de pesos y otros $7 mil millones de subsidios de marzo. El Gobierno no gira los fondos y los trabajadores no reciben el aumento que merecen”.

Luego, a media tarde, Massa convocó a seguir las negociaciones en el Palacio de Hacienda, junto a Giuliano; Olmos; el ministro de Transporte bonaerense, Jorge D'Onofrio; el secretario general de la UTA y los empresarios Troilo (CEAP), Vaca (CETUBA), Ferreira (Ceutpba) y Rodríguez (CTPBA).

En una transmisión que siguió al encuentro, el ministro de Economía anunció el levantamiento desde las 17:30 de hoy del paro de colectivos, tras la firma del acta paritaria. Además, anticipó: “Desde el lunes va a haber una mesa para ir buscando solución a los problemas que tienen las empresas de transporte”.

Por su parte, Giuliano explicó que “el diálogo con las cinco cámaras tuvo tres conclusiones: la primera, a partir de las 17:30 se levanta el paro del transporte automotor. Segundo, significa el pago del salario actualizado a los trabajadores. Y finalmente generar una mesa de trabajo desde el día lunes para trabajar directamente con las empresas para verificar costos y dificultades que puedan existir”.

La Ciudad de Buenos Aires mostró formaciones de subtes abarrotadas de pasajeros, una alta demanda de taxis y de otros servicios de movilidad a través aplicaciones digitales, así como denuncias por el aumento desmesurado de las tarifas en esos servicios. La situación se complicó aún más esta mañana con un paro sorpresivo del ferrocarril Sarmiento.

En el regreso a casa de miles de personas, los accesos tanto en sentido a la Capital como a la provincia, estuvieron previsiblemente colapsados.

LC con información de agencia Télam

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