El ejército de Israel se prepara para interceptar la flotilla a Gaza

El Ejército israelí se prepara para interceptar los más de cuarenta navíos de la flotilla con el fin de llevarlos al puerto de la ciudad de Asdod, en el centro de Israel, donde serán interrogados y deportados como en ocasiones anteriores, según ha informado la radio pública israelí Kan.
La Global Sumud Flotilla que lleva ayuda para Gaza ha comenzado sus últimas horas de travesía tras acceder a la “zona de alto de riesgo” hacia el enclave palestino, una zona en la que las misiones anteriores fueron abordadas por las fuerzas de Israel. Tras activar durante la madrugada la “alerta máxima” al detectar un incremento en “la actividad de drones”, a primera hora de la mañana ha denunciado una “operación intimidatoria” contra varios de sus barcos por parte de un buque de guerra israelí.
En concreto, el capitan del Alma tuvo que llevar a cabo una “maniobra evasiva” para evitar una colisión. “Las fuerzas navales de ocupación israelíes han lanzado una operación intimidatoria esta madrugada”, ha indicado en un comunicado, en el que especifica que el Alma fue “rodeado de forma agresiva durante varios minutos por un buque de guerra israelí”. “Poco después, el mismo buque de guerra se dirigió hacia el Sirius, repitiendo maniobras de acoso similares durante un largo periodo de tiempo, antes de marcharse finalmente”, ha explicado
Los activistas tachan estas maniobras de “imprudentes e intimidatorias” y aseguran que han puesto “en grave peligro” a los participantes: “A pesar de estos actos de agresión, continuamos rumbo con determinación”. “La Flotilla Global Sumud es una misión pacífica y no violenta que transporta ayuda humanitaria y civiles de más de 40 países. Interferir en nuestro paso es ilegal y cualquier ataque o interceptación constituye un crimen de guerra. Nuestra misión sigue siendo clara: desafiar el asedio ilegal de Israel a Gaza, apoyar al pueblo palestino y entregar ayuda a una población sitiada que se enfrenta al hambre y al genocidio”, han explicado.
Las comunicaciones a bordo, incluidas las transmisiones de circuito cerrado, quedaron “deshabilitadas de manera remota” y el capitán se vio obligado a realizar “una brusca maniobra evasiva para evitar una colisión frontal”, detalló la organización en un comunicado.
En una entrevista en Catalunya Ràdio, la exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que viaja a bordo de uno de los barcos, ha relatado que el primer acercamiento se ha producido sobre las 4 de la madrugada cuando varias embarcaciones se han acercado y, una hora más tarde, lo ha hecho un submarino. “No sabemos si simplemente quieren estresarnos o si quieren esperar a que exista la luz del sol para que sea menos peligroso abordarnos”, ha explicado al tiempo que ha subrayado que se prevé que este jueves lleguen a tierra.
En una rueda de prensa al mediodía del miércoles desde dos de los barcos de la flotilla, los activistas Thiago Ávila, a bordo del barco 'Alma', y Lisi Proença, desde el 'Sirius', han relatado su vivencia de las maniobras israelíes, que ambos han tachado de “guerra psicológica”. Han dicho que los barcos israelíes han realizado maniobras de intimidación, enfilando en rumbo de colisión a gran velocidad y apartándose en última instancia, además de interrumpir las comunicaciones de la flotilla. “Querían claramente que los viésemos”, ha señalado Proença.
La relatora de la ONU para Palestina, Francesca Albanese, ha intervenido también en la conferencia. Ha mostrado su “admiración” por los delegados“ y ha dicho sentirse ”avergonzada“ como italiana por la actitud de su Gobierno, que el martes por la tarde instó a los activistas a abortar la misión antes de abandonar sus labores de escolta a la flotilla.
“Sabemos que esto es una gota en el océano”, ha reconocido Albanese sobre la inciativa, pero ha destacado el “coraje” de la misión para hacer cumplir la legislación internacional y quebrar el bloqueo ilegal de Gaza ante lo que, en el mejor de los casos, es la “tolerancia” de los Estados ante el comportamiento israelí.
Pese a las maniobras israelíes y a que los buques de España y de Italia no acompañarán a la flotilla en la zona de exclusión definida por Israel, la misión aseguró este miércoles que continúa “su rumbo con determinación” para “abrir un corredor humanitario”. En concreto, el Gobierno de España pidió este mismo miércoles que no se adentre en la zona de exclusión decretada por Israel. El Ejecutivo ha trasladado esa petición a pesar de haber enviado un buque de la Armada con la pretensión de que protegiera a los integrantes de la misión ante los ataques de Israel.
En concreto, el buque ya se encuentra en un radio operativo para realizar operaciones de rescate si fuesen necesarias aunque no podrá entrar en la zona de exclusión establecida por el Ejército israelí puesto que hacerlo “pondría en riesgo la integridad física de su tripulación y de la propia Flotilla”, motivo por el que recomienda “encarecidamente” que “no se adentre en la zona de exclusión, porque hacerlo pondría en riesgo severo su propia seguridad”, según fuentes de Moncloa.
Siguiendo la flotilla a Gaza, día a día
Localiza la posición de los 50 barcos de la flotilla a Gaza, día a día, según Global Sumud
Fuente: Global Sumud
Ante esta decisión, la Global Sumud Flotilla ha afirmado que el Ejecutivo español ha renunciado a ejercer “su responsabilidad de proteger”. “En lugar de inhibirse, debería garantizar nuestra seguridad hasta llegar a Gaza y exigir la apertura de un corredor humanitario”, ha explicado. “Aceptar como normal esta amenaza de asalto a una acción pacífica y humanitaria equivale a avalar la impunidad de Israel y silenciar la denuncia del genocidio”, ha señalado la iniciativa, que ha recordado que es “una misión pacífica y no violenta que transporta ayuda humanitaria y civiles procedentes de más de 40 países”.
“Interferir en nuestro paso es ilegal, y cualquier ataque o intercepción constituye un crimen de guerra. A pesar de estos actos de agresión, la flotilla continúa su rumbo con determinación”, ha recalcado, al tiempo que ha incidido que su misión es “clara” y consiste en “desafiar el ilegal bloqueo de Israel sobre Gaza, estar al lado del pueblo palestino y abrir un corredor humanitario para la entrada de ayuda para una población sitiada que enfrenta hambre y genocidio”.
La Global Sumud Flotilla partió a principios de septiembre desde costas españolas y se unió a embarcaciones desde Túnez, Italia y Grecia hasta conformar la misión marítima humanitaria más amplia organizada hasta el momento con más de cuarenta barcos y 500 voluntarios. En paralelo, el barco Conscience —que el pasado mes de mayo fue atacado con drones en aguas de Malta— zarpó este martes desde el puerto italiano de Otranto hacia la Franja, para unirse a otros ochos barcos que salieron el sábado de la Flotilla de la Libertad, que desde 2008 ha impulsado una decena de misiones para Gaza.
elDiario.es / Agencias
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