Según Interpol, el supuesto empresario singapurense que fue recibido en la Casa Rosada por Javier Milei no existe

El supuesto empresario singapurense que fue recibido en la Casa Rosada por el presidente Javier Milei no existe. Esa fue la conclusión que este martes envió Interpol a la Justicia argentina, luego de que se constatara oficialmente que no hay ningún ciudadano en Singapur llamado Julian Peh, nombre con el que se presentó quien ingresó a la sede del Poder Ejecutivo y posó para una foto con el mandatario libertario.
La revelación, que fue confrmada a elDiarioAR por parte del entorno de Juan Grabois, abogado querellante en la causa en representación de afectados, da cuenta de que quien fue presentado como un inversor internacional utilizó una identidad falsa y, según fuentes de la causa, habría sido clave en la operatoria de la estafa denunciada en la causa conocida como $LIBRA. La foto con Milei, que se difundió como parte del respaldo gubernamental a supuestas inversiones en criptomonedas, fue el punto de partida de una trama que ahora tiene nuevos ribetes judiciales.
En paralelo, el fiscal Eduardo Taiano, que encabeza la investigación, dio curso a una presentación de la querella de Grabois y ordenó avanzar sobre un aspecto central del expediente: el destino de los US$500.000 transferidos por Hayden Mark Davis luego de su encuentro con el Presidente. La hipótesis que se fortalece en tribunales es que esa transferencia fue parte de un esquema fraudulento.
Taiano instruyó a la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci) para que realice un estudio de trazabilidad sobre las operaciones realizadas por Davis tras la reunión en Casa Rosada. El objetivo es claro: identificar a los verdaderos beneficiarios de los fondos que fueron canalizados a través de las plataformas Gate.io y Bitget, dos exchanges internacionales del mundo cripto.
En ese sentido, la resolución judicial apunta a determinar quiénes están detrás de esas sociedades receptoras de los fondos, y cuál fue su vínculo con el simulacro de empresario que accedió a la primera plana del Gobierno argentino. Las plataformas Bitget y Gate.io recibieron directamente la transferencia de medio millón de dólares, y ahora deberán ser auditadas por los expertos de Ufeci, tanto en sus estructuras jurídicas como en sus movimientos financieros.
El pedido de trazabilidad representa un giro en la investigación, que hasta ahora se había centrado en el carácter fraudulento de la empresa $LIBRA y su operatoria de promoción mediante figuras públicas y avales oficiales. Ahora, la Justicia pone el foco en el flujo financiero posterior al acto de respaldo presidencial, en busca de responsabilidades penales y eventuales encubrimientos.
La confirmación de la identidad falsa de Julian Peh no sólo complica aún más la situación legal de los implicados, sino que también profundiza los interrogantes sobre los controles institucionales en la Casa Rosada. ¿Cómo pudo ingresar una persona con nombre ficticio y salir con una foto junto al Presidente? ¿Quién gestionó ese acceso? ¿Y quiénes se beneficiaron con la operación?
El caso $LIBRA se transforma así en una caja de Pandora para el oficialismo, no solo por la eventual comisión de delitos económicos, sino también por la posible vulneración de protocolos de seguridad y legitimación institucional. La resolución de Taiano, con el impulso de la querella de Grabois, marca que la Justicia decidió avanzar sobre las ramificaciones económicas y políticas del caso.
El expediente ahora queda a la espera de los informes de la Unidad de Ciberdelincuencia, que deberán desentrañar la ruta del dinero para establecer quiénes se beneficiaron de una operatoria que, a esta altura, ya no puede desligarse del entorno del Presidente.
0