Macri recupera protagonismo y empuja a Juntos por el Cambio hacia la oposición dura
Se conectó desde su casa en Acassuso a las 9 de la mañana. Si la cita virtual de Juntos por el Cambio hoy hubiera sido un poco más tarde, Mauricio Macri habría entrado al Zoom desde su oficina en Olivos. Ahí, desde el tercer piso de un edificio con vista a la avenida Libertador, el expresidente hace base de lunes a viernes. Es su Instituto Patria al revés.
En el día a día, a Macri lo acompaña un grupo de cinco personas. Son su núcleo duro y sus asistentes operativos. Cinco varones, tras la jubilación de Ana Moschini, la secretaria que lo conoce desde que era un nene. Los ángeles mauricistas del despoder son ex funcionarios de segunda línea: Hernán Iglesias Illia, Gustavo Gómez Repetto, Julián Gallo y Darío Nieto (investigado en las causas sobre espionaje ilegal de la AFI amarilla). Le manejan la agenda y las redes sociales, le llevan ideas y temas que le podrían interesar, además de responder a sus consultas, demandas de informes y datos.
En el ranking de interlocutores habituales, pica en punta Patricia Bullrich y Miguel Ángel Pichetto. Aunque después de meses de congelamiento y poco contacto, en las últimas semanas recuperó fluidez en el diálogo con Horacio Rodríguez Larreta. También aceleró las bilaterales con sus ex ministros, con diputados provinciales y con empresarios agropecuarios.
En la reunión matinal de hoy no hubo fricciones. Duró menos de una hora. Tampoco se evidenciaron resquemores acumulados entre la jefatura de la coalición opositora. No había motivos. Cuando el clima político se agrieta, se diluyen los matices y los choques de perfiles dentro de la oposición. Más específicamente: si Cristina Kirchner cobra protagonismo, a través de sus gestos y acciones, se achica la brecha ideológica entre Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich. El recorte en la coparticipación a la Ciudad a su vez los vuelve menos distintos. Para la ex ministra de Seguridad, sin embargo, el alcalde podría ser aún mucho más combativo con la Rosada.
El viernes pasado, el PRO ya había dado su mensaje de unidad en el centro Asturiano de Vicente López, con Jorge Macri como anfitrión. Hoy, como cada dos semanas, les tocaba verse las caras a los representantes del PRO, la UCR y la Coalición Cívica. Existía un consenso previo respecto a difundir un comunicado de tono durísimo contra el gobierno, metiendo cizaña en la relación entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner.
“El ataque a la Corte es un golpe a nuestra Constitución”, advirtió la mesa nacional de JxC. “La carta de la Vicepresidenta, avalada por el Presidente, es un intento de cambio del sistema Constitucional de división de poderes por un sistema de reforma constitucional que rompa definitivamente el sistema republicano”, concluyó.
La música del texto estaba cantada de antemano. Sobre todo después de que Cristina Kirchner le dedicara misiles personalizados a cada uno de los cinco supremos. Pero hubo un dirigente encargado de ponerle la letra fina: el diputado Alfredo Cornejo, presidente de la UCR y pre-anotado para ser candidato a Senador por Mendoza en 2021.
“Alberto Fernández no puede, por su alta investidura y representación, tolerar ni consentir un menoscabo institucional de esta naturaleza”, aguijonea el comunicado.
“Es por ello que Juntos por el Cambio tendrá la firmeza institucional para impedir que este clima hostil contra el máximo tribunal se transforme en hechos concretos de ataque y cambios constitucionales”, difundió la coalición, una vez terminado el Zoom matinal.
En la cita estuvieron Macri, Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y Humberto Schiavoni; los radicales Alfredo Cornejo, Mario Negri, Luis Naidenoff y Martín Lousteau; más los lilitos Maximiliano Ferraro, Juan Manuel López y Maricel Etchecoin. “Estamos con mucha cohesión, con una firmeza inquebrantable”, aseguró el senador Naidenoff ante elDiarioAR.
Cinco horas después de finalizada la teleconferencia, la Coalición Cívica le puso su sello personal al contraataque de JxC. De la mano de López y Paula Oliveto, llegó el anuncio del juicio político contra la vicepresidenta.
“Durante este año el bloque de diputados de la Coalición Cívica presentó en distintas instancias de la Organización de los Estados Americanos y ante la Justicia argentina, una serie de hechos que dan cuenta del avasallamiento a las instituciones argentinas por parte de Cristina Kirchner. Sus ataques contra orden institucional y el sistema democrático están previstos en el artículo 36 de la Constitución Nacional”, afirmaron los soldados de Elisa Carrió en un comunicado.
Si bien Lilita había publicitado su enojo con Macri, en los últimos días recompusieron la relación. El sábado pasado, se realizó el congreso federal de la CC ARI, en el Palais Rouge de Palermo. Ahí fue reelecto Maximiliano Ferraro como presidente del partido, con la diputada Mariana Zuvic como vice.
Macri mandó un video de saludo y felicitación al evento. “Nuestra unidad, después de cinco años, está más consolidada que nunca”, se entusiasmó el expresidente. Deseó que “muchos de ustedes puedan representar a Juntos por el Cambio en 2023”, y al final afirmó: “Hoy hay una alternativa lista para volver a retomar el rumbo correcto que llevábamos en nuestro Gobierno”.
Cerca de Macri afirman que el expresidente está confiado en la posibilidad de volver al poder en 2023. La crisis económica, mezclada con la agenda judicial que promueve Cristina Kirchner, le hizo reforzar su autoestima y presencia mediática. En sus planes no está ser candidato a diputado en las legislativas del año próximo. Respecto a 2023, responde lo que dicen todos los que miran el futuro electoral de reojo: sería irresponsable pensar eso.
AF
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