Un jefe comunal cordobés denunció que, en un campo de su localidad, se realizó un casamiento con 200 invitados
Las fotos comenzaron a circular en los grupos de WhatsApp y la indignación se hizo pública cuando el intendente de Potrero de Garay, Gerardo Martínez, confirmó y denunció por los medios que en el campo El Refugio se realizó un casamiento al que asistieron 200 invitados, violando el DNU presidencial que restringe la circulación de personas para evitar que se propague el Covid-19: “Ayer (sábado) se llevó adelante el casamiento en la propiedad del artista Leandro Penna. Cuando se estableció el control municipal, los invitados que pasaban nos decían que la fiesta no se iba a suspender debido a su poder económico y sus contactos políticos”, afirmó Martínez a elDiarioAR.
Potrero de Garay es una comuna ubicada 68 kilómetros al sudoeste de Córdoba capital, que bordea el dique Los Molinos. Allí, en el campo El Refugio, ubicado a dos kilómetros de la ruta provincial S-271 -en una zona conocida como “la bajada a Claro de Luna”- vive Leandro Penna, el modelo cordobés que se hizo famoso como “el bañero de Marley”. En esa casa con parque al lago, se casó el sábado por la noche el empresario tecnológico Guillermo Penna -hermano de Leandro-, según denunció el jefe comunal de Potrero de Garay y lo ponen en evidencia las fotos que se tomaron los invitados.
Los hermanos Penna, Guillermo y Leandro, son hijos del exsenador provincial radical Héctor Penna, un dirigente de la vecina localidad de Despeñaderos que, en las elecciones municipales de diciembre de 2020 -para reemplazar al fallecido Juan Carlos Cimadamore- quedó tercero con 8,5% de los votos, como candidato de la alianza macrista Juntos por Despeñaderos.
Sobre el casamiento de Guillermo Penna, el intendente Martínez aseguró que “la situación nos superó, nos vimos desbordados e hicimos la denuncia correspondiente. El día viernes, a través de la Inspectoría comunal y del personal policial, notificamos al dueño de la propiedad donde se iba a realizar el evento, el señor Penna, también notificamos a los novios sobre la prohibición dictada por la Nación. Nosotros sabíamos que la fiesta se iba a realizar, acá somos pocos y nos conocemos todos, un evento así se conoció rápido; no nos hicieron caso, no acataron las advertencias de la Comuna, tampoco el DNU nacional, ni el de la Provincia, ni nuestra resolución comunal.”}
El jefe comunal agregó que “no contamos con elementos fotográficos porque la fiesta se llevó a cabo en un campo privado. Intervino personal policial que labró las actas y debe haber tomado nota de todas las autoridades del COE, inclusive miembros del COE que nos sacaban chapa diciendo que ellos podían estar porque eran miembros del COE”. Sin embargo, el flamante marido, su hermano y algunos invitados subieron las fotos del casamiento a Instagram. Entre las más activas en las redes, se destacó la exmodelo Fabiana Masena, una de las invitadas, que no es familiar del matrimonio.
Frente a la acusación de Martínez, una alta fuente del Comité de Operaciones en Emergencia (COE), señaló a elDiarioAR: “Gente del COE Central no ha habido nadie ahí. Mañana se van a hacer las investigaciones, porque parece que fue personal del COE Regional. Desde el Ministerio de Salud se iniciarán las investigaciones, ninguna persona del COE Central participó de esa fiesta”.
La desmentida de Penna
Leandro Penna, el modelo dueño de El Refugio y hermano del flamante recién casado, se comunicó con el periodista especializado en espectáculos y farándula Pablo Layús y desmintió la realización de la fiesta: “Es mentira. Yo estoy en Chile. Se suspendió todo por las nuevas disposiciones y hasta se rompió la carpa donde se iba a realizar”, le dijo y aportó fotos. Sin embargo, en su cuenta de Instagram, el modelo cordobés radicado en Chile posteó fotos de la boda.
Layús le explicó a elDiarioAR que “Leandro sostiene que la fiesta se suspendió. Finalmente lo que hicieron fue reunirse solamente la familia del novio y de la novia, nada más. No fueron más de 30 o 40 personas. También me contó que el comisario fue hasta el lugar, comprobó, labró un acta. Pero otra gente comenzó a contar que hubo gente que comenzó a subir historias a Instagram y no eran familiares, eran amigos. También me dijeron que la fiesta fue más reducida que la planeada, que se iba a realizar en unas carpas que habían montado; que esas carpas, a raíz de la lluvia se habían venido abajo. Así que, entre lo que no se permitía y las carpas que se habían inundado, finalmente fue una fiesta más pequeña. Pero creo que tampoco estaba permitida.”
GM
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