Cristina pidió un acuerdo con la oposición por la deuda para conseguir más plazo y otra tasa de interés
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió este miércoles el apoyo tanto del oficialismo como de la oposición en las negociaciones de Argentina con el FMI por la deuda y abogó por lograr un “mayor plazo y otra tasa de interés”, al hablar en un acto por el 24 de marzo en la localidad bonaerense de Las Flores.
“Deberíamos hacer un esfuerzo, el oficialismo y la oposición, para que nos den mayor plazo y otra tasa de interés de una deuda que otros contrajeron”, aseguró en el acto por el Día de la Memoria. La titular de la Cámara de Senadores consideró que Argentina necesita un acuerdo político entre todas las fuerzas para hacerle frente “a cuestiones estructurales como son el endeudamiento externo y la economía bimonetaria”.
Por otra parte, apuntó que “las políticas de memoria, verdad y justicia castigaron a los que violaron los derechos humanos, pero a los que instigaron, apoyaron y empujaron a hacer lo que hicieron nunca les pasó nada”. “Necesitaron de la desaparición y tortura para imponer un modelo económico”, dijo y añadió que incluso “terminaron más ricos, porque además dejaron la estatización de la deuda externa, entre ellos la familia y el grupo económico de ya sabemos quién”, en una clara alusión al expresidente Mauricio Macri y su padre, el empresario Franco Macri.
En ese sentido, la expresidenta agregó: “Fíjese que dos extremos, aquellos que fueron los que interrumpieron un gobierno constitucional son los que los instigaron y generaron la deuda”.
La vicepresidenta consideró que es “una paradoja que los que están en contra del Estado, de las intervenciones, son los mismos que durante la dictadura estatizaron sus deudas”. “Se hicieron los otarios cuando todos los argentinos debimos pagar la deuda de ellos”.
A la vez, en el acto en Las Flores, en el que participó junto al gobernador Axel Kicillof y su hijo Máximo, la vicepresidenta elogió la negociación de vacunas con China y la Federación Rusa en nombre del pragmatismo. “No tenemos anteojeras ideológicas”, manifestó.
Recordó que su familia, con Néstor en vida, elegía vacacionar en Nueva York y Orlando (sede de Disney World). De esa manera buscó enfatizar que el pragmatismo es lo que debería guiar la negociación con Estados Unidos y el FMI. El ministro de Economía, Martín Guzmán, se acaba de reunir en Washington con Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo.
Durante el discurso no hizo referencia al presidente de la nación, pero sí nombró a Cecilia Nicolini por su gestión de la Sputnik V ante el Gobierno ruso. Y se permitió recordar, sin nombrar, la asistencia de Patricia Bullrich a los festejos del 4 de julio en la embajada de Estados Unidos disfrazada de vaquera.
Cristina formuló estas declaraciones al participar en el acto en el que se formalizó la apertura de un Espacio de la Memoria que funcionará en la exBrigada de Investigaciones del lugar.
En su cuenta de Twitter, la expresidenta publicó luego algunas impresiones del acto: “Toda la vida dijeron que nosotros estábamos cerrados al mundo, que no teníamos ninguna conexión. Creo que a nadie se le escapa, tanto a lo que nos quieren como a los que no nos quieren nada que fue la articulación de una Argentina con una visión multilateralista en materia exterior lo que nos permitió contar con las vacunas que nos suministró y nos vendió la Federación Rusa y la que nos está vendiendo la República Popular de China”.
“Si desde los partidos políticos no somos capaces de articular un acuerdo mínimo frente a cuestiones estructurales como es el endeudamiento externo y la economía bimonetaria va a ser muy difícil gobernar la Argentina, sino imposible tal vez”, añadió.
En la ceremonia participaron el gobernador bonaerense, Axel Kicillof; el diputado nacional Máximo Kirchner; y el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla Corti, el subsecretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, Matías Moreno, y el intendente local, Alberto Gelené.
Además, estuvieron presentes Gladis D'Alessandro, esposa del detenido-desaparecido Carlos Labollita, que fue amigo de Néstor Kirchner cuando ambos estudiaban y militaban en la Plata durante los años ’70.
La ex Brigada de Investigaciones de Las Flores, en el centro provincia de Buenos Aires, funcionó como un centro clandestino de detención durante los años del gobierno militar que se inició en el golpe del 24 de marzo 1976.
Cristina consideró que más allá de “las desapariciones y las ausencias de miles de argentinos” impuestas por la represión ilegal que ejerció la última dictadura, el objetivo del terrorismo de Estado fue “modificar la matriz de producción de los argentinos”.
“Tanto Néstor como yo éramos hijos de trabajadores en una Argentina que tenía movilidad social ascendente. Nuestros padres y madres estaban preocupados por trabajar y porque la plata les alcanzara. No pensaban en los dólares ni en los plazos fijos. Ese terminó siendo el sentido común que impuso la dictadura”, subrayó.
En ese sentido, la exjefa de Estado dejó en claro que el gobierno del Frente de Todos “tiene la clara voluntad de pagar la deuda externa” y aseguró que es “el único espacio político que nunca endeudó a la Argentina y pagó las deudas de todos los otros gobiernos”.
La titular de la Cámara de Senadores consideró además que Argentina necesita un acuerdo político entre todas las fuerzas para hacerle frente “a cuestiones estructurales como son el endeudamiento externo y la economía bimonetaria”.
En otro orden, Cristina defendió la política exterior “multilateralista” desarrollada por el kirchnerismo y estimó que en base a ella “con las únicas vacunas” que cuenta hoy el país “son rusas y chinas”. “Nos decían que estábamos fuera del mundo, pero esas gestiones que hicimos cuando fuimos gobierno, son las que nos permiten tener vacunas rusas y chinas para afrontar la pandemia”, afirmó.
La vicepresidenta agregó que no tiene ni ella ni tuvo el expresidente Néstor Kirchner “anteojeras económicas” y que “nunca” confundieron sus “preferencias personales con los intereses nacionales”, al hacer mención a sus viajes a Estados Unidos.
“Sé cómo defender los intereses nacionales. No confundan el durazno con la pelusa. A esos que van a festejar los 4 de julio a la Embajada (de Estados Unidos). Alguna fue vestida de vaquera. Es muy de mamarracho. Disfrazarnos así no nos queda bien”, apuntó la vicepresidenta.
Al respecto, Cristina Fernández recordó el rol de los Estados Unidos en su apoyo al golpe de Estado de 1976, en alianza con Gran Bretaña en la Guerra de Malvinas y en las gestiones que hiciera el gobierno del expresidente Donald Trump para que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le concediera un préstamo de más de 44 mil millones de dólares a Argentina durante la presidencia de Macri.
Además, Cristina Fernández de Kirchner recordó que, cuando fue presidenta, visitó a Las Flores por segunda vez y recorrió el parque industrial que se había inaugurado durante el Gobierno de Néstor Kirchner, algo que logró la gestión que gobernó Argentina entre 2003 y 2015.
En ese sentido, se refirió a las empresas que se instalaron en el lugar y que el objetivo de una política económica debe estar “enfocada en la producción y en las sustitución de importaciones”.
“Las Flores tiene 500 cuadras, bueno, 200 de ellas se pavimentaron entre 2003 y 2015. Queremos que haya más parques industriales como el de Las Flores y generar trabajo. No es que queramos intervenir en la economía, como muchos nos acusan, queremos que haya producción. Esa debe ser la tarea de un gobierno”, recalcó.
Con información de la agencia Télam
CB/CRM
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