Condenan a Sabag Montiel y Uliarte a un año de prisión en suspenso por tenencia ilegítima de un DNI

Fernando André Sabag Montiel y Brenda Uliarte, dos de los acusados por el intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, fueron condenados a un año de prisión en suspenso como coautores del delito de tenencia ilegítima de un Documento Nacional de Identidad (DNI) ajeno. El mismo fue hallado durante los allanamientos que se realizaron en marco de la investigación por el atentado a la expresidenta.

Así lo dictaminó Héctor Sagretti, juez del Tribunal Oral Federal 5 (TOF) de San Martín, en el juicio desarrollado este jueves en la sede de ese tribunal, hasta el cual fueron trasladados ambos imputados en medio de un fuerte operativo de seguridad.

El documento fue hallado en el segundo allanamiento realizado el 7 de septiembre pasado en el domicilio que Sabag Montiel alquilaba en el partido bonaerense de San Martín hasta el día de su detención, según trascendió en el juicio.

Carlos Cearras, fiscal del juicio, había pedido que ambos fueran condenados a un año y seis meses de prisión como coautores del delito de tenencia ilícita de un documento nacional de identidad auténtico o falso. Consideró que en el juicio quedó acreditado el hecho y la participación de ambos imputados, a pesar de que las defensas insistieron en que Uliarte no estaba al tanto de que Sabag Montiel tenía ese documento en su casa.

Durante su alegato, el fiscal recordó que el DNI fue hallado durante el allanamiento al monoambiente que habitaba Sabag Montiel en la localidad de San Andrés, cuando también se secuestraron varios teléfonos celulares, otros papeles y una notebook.

“El DNI lo encontré semanas antes de mi detención, estaba en el piso, solo. Lo encontré en Avenida de los Constituyentes y General Paz. Yo no ando por Palermo”, declaró Sabag Montiel en su indagatoria, en implícita referencia a que el dueño del documento había informado que lo perdió en 2018 en un recital en el Hipódromo de Palermo.

“Jamás se lo comenté a Uliarte, decidí buscar al dueño pero como en el documento no figuraba un domicilio se me dificultó y no sabía si usaba el mismo nombre en Facebook”, se justificó el imputado en otra parte de su indagatoria. “Es real que Brenda no tenía noción del documento. Ella no sabía las cosas que yo tenía en mi poder. No se lo comenté, lo quiero aclarar para dejarla afuera de esto”, insistió.

Sabag Montiel negó que vivieran juntos, sostuvo que eran pareja hace unos meses y que ella se quedaba eventualmente a dormir, pero aseguró que no compartían la vivienda habitualmente. Sin embargo, la mayor contradicción entre ambos ocurrió cuando se les preguntó desde cuando se conocían: Brenda dijo que se habían conocido en abril del año pasado, poco tiempo antes de que comenzaran a salir, pero Sabag Montiel recordó que la conoció “hace 7 años”.

En su indagatoria, Uliarte declaró: “Si bien yo mantenía un vínculo con Sabag, iba y venía. En su casa tenía pertenencias, computadora, ropa y nada más. De ese DNI no estaba al a tanto”. Acto seguido, en el marco de sus últimas palabras previas al veredicto, afirmó: “Me parecería injusto una condena. No toqué, ni supe del DNI. Teníamos empleada doméstica que venía a limpiar tres veces por semana y seguro que tampoco sabía”.

El proceso se llevó a cabo en un solo día y tuvo, además de las indagatorias, tres declaraciones testimoniales: el hombre que dijo haber perdido su DNI en 2018 en un recital y haber gestionado uno nuevo el mismo día (Francisco Almada); el propietario del monoambiente que alquilaba Sabag Montiel y el oficial de la Policía de Seguridad Aeroportuaria que encabezó el allanamiento donde se encontró el documento.

Los imputados ingresaron al tribunal poco antes de las 10 de la mañana: primero fue Sabag Montiel con su escolta, llevando esposas, casco y chaleco antibalas sobre una campera bordó junto a vistiendo un pantalón visiblemente roto. Luego llegó Uliarte casi en las mismas condiciones, pero sin casco y con un pantalón rosado en buen estado.

Ambos fueron trasladados al tribunal en distintas camionetas, en medio de fuertes operativos de seguridad que incluyeron un importante despliegue de oficiales de la Policía Federal, Gendarmería y del Servicio Penitenciario Federal.

La defensa de Uliarte estuvo encabezada por el abogado Carlos Telleldín, conocido por haber sido juzgado dos veces en la causa AMIA, mientras que a Sabag Montiel lo representó legalmente el defensor oficial, Leonardo Muiño.

En el juicio, no se debatieron elementos vinculados al ataque sufrido por la vicepresidenta Cristina Kirchner el 1 de septiembre pasado, pero esa fecha estuvo presente como referencia temporal, ya que ese día se produjo la detención de Sabag Montiel.

LC con información de agencia Télam