Que el Macri no tape el Fondo
El imperialismo, el poder real siempre operó igual. Usaron a las Fuerzas Armadas para las tareas sangrientas, destruyeron y saquearon Latinoamérica de ese modo... degradaron una institución necesaria para cualquier proyecto de país, para cualquier perspectiva continentalista, sudamericana, degradaron hasta la peor abyección a los ejércitos que una vez comandaron Artigas, San Martín, Bolívar, Belgrano, O'Higgins, Güemes, la Generala Juana Azurduy, la Sargento negra María Remedios del Valle y el Comandante indio Andresito.
Así fueron los sucesivos golpes de estado con olor a petróleo o farmacéuticas, pero fundamentalmente el Plan Cóndor y el “Proceso de Reorganización Nacional”. Una vez destruida, saqueada, endeudada, desmoralizada, animalizada la Patria, convertido el ejército de San Martín en una banda de repulsivos torturadores encapuchados, los imperialistas -gerenciados por elegantes caballeros de impoluto traje que brindan copetines en blancas recepciones- descartaron a sus ensangrentados instrumentos, para luego con gesto lacrimosos condenar las violaciones a los DDHH y homenajear con suma hipocresía a las víctimas (Ay de ustedes!, porque construyen monumentos para los profetas que los antepasados de ustedes mismos mataron Lc 14:47).
El informe del FMI ex-post muestra que el imperialismo mantiene el mismo modus operandi. Utilizó a Macri como su instrumento para destruir los avances en la integración latinoamericana, establecer la Argentina como cabecera de playa contra los procesos políticos que les molestaban, blindar el golpe de estado en Bolivia, la persecución a Lula y Cristina Kirchner, avalar la estrafalaria designación de Guaidó, saquear las arcas públicas nacionales con la transferencia de miles de millones de dólares a fondos buitre como Eliot Management y algunas otras pequeñas operaciones necesarias a sus intereses.
En el último tramo, este inédito préstamo del Fondo Monetario Internacional aparece para cubrir diversos objetivos geopolíticos y financieros en el marco de una estrategia de dominación. Intentaron combinar la victoria de Macri con la salida de capitales que buscaban comprar dólares baratos en los remates -fueron, literalmente, remates- de dólares a precio vil que realizaba el gobierno argentino. Nada bueno para nuestro país surgió de este préstamo. Hoy, el propio Fondo hace un informe crítico ex-post diciendo estas cosas que eran obvias a-priori y que muchos de nosotros señalamos en declaraciones públicas, cartas al propio staff del Fondo, etc. En este informe “técnico” la culpa de todo la tiene Macri y la mala gestión del precio. Pamplinas. Me sorprende ver algunos compañeros regodeándose con esto. No seamos tan giles. A ver cuándo lo vamos a entender. Que Macri no tape el Fondo.
Macri es el instrumento descartable; siempre va a haber un Macri disponible en el almacén de cipayos, como hubo un Videla en su tiempo. Los violadores de nuestra Patria, de Nuestramérica, son los proyectos imperiales, los buitres financieros y su órgano de penetración global como el Fondo Monetario Internacional. Hasta que no entendamos eso y nos decidamos a luchar por nuestra dignidad nacional y regional, seguiremos siendo colonia y patio trasero. Esto lo enseñaron los padres de la patria y lo dijo con absoluta claridad del General Perón. No es ideología, es historia. Una historia que se repite tan calcada que solo nuestra ceguera nos permite ignorarla.
La decisión no es fácil, porque la libertad, la verdadera libertad, conlleva enormes sacrificios, grandes pruebas para las que tal vez nuestra dirigencia no esté preparada y me atrevo a decir, tal vez nuestro propio pueblo no esté preparado ni dispuesto a sufrir; pero el resultado es dejarle a las futuras generaciones la Argentina Grande que San Martín soñó y que en algunos momentos de nuestra historia, en el siglo XX, en el siglo XXI, estuvo más cerca de ser real. Trabajemos, luchemos por eso. No nos entreguemos. Si no, sepamos que habrá pobreza, ultraje, exclusión e indignidad en nuestro horizonte.
La Argentina dejará de ser colonia o la bandera flameará sobre sus ruinas.
JG
0