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La senadora de La Libertad Avanza que contrató familiares se resiste a despedir a todos

La senadora Vilma Bedia junto a Javier Milei y Victoria Villarruel. A dos meses del escándalo sigue manteniendo a dos familiares entre sus colaboradores.

Mariana Verón

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Tema arreglado… Así había dado por cerrado el presidente Javier Milei el escándalo político que se había generado en el oficialismo por el nombramiento de al menos seis familiares de la senadora Vilma Facunda Bedia (Jujuy) como sus asesores.

Tema arreglado… a medias, se podría agregar. A dos meses de la sentencia presidencial, siguen en sus cargos José Jair Mamani, hijo de la senadora, y Daiana Ester Llanes, una sobrina. Así surge del plantel de asesores publicado en la página web del Senado.

Pablo Mamani, otro de los hijos de Bedia que había sido nombrado dentro del equipo de asesores de la senadora libertaria Ivana Arrascaeta (San Luis) ya no figura más en la nómina de empleados de su despacho. Sí aparece Sonia Alicia Mamani, con el mismo apellido, pero sin parentesco con la línea familiar de la pastora evangélica. “No tiene nada que ver con nosotros. Es otra mentira más”, respondió Jair ante la consulta de elDiarioAR. El sigue trabajando con su madre. Efectivamente, Sonia es de Jujuy pero lleva más de 20 años trabajando en el Senado.

Después del escándalo, la senadora Bedia despidió a Benjamin Mamani, otro de sus hijos, y a Mirta Araceli Silsque, la pareja de ese hijo. No se achicó en cantidad de asesores. Tiene 15. De los hijos que se resiste a despedir, Jair Mamani tiene una categoría A1, con un sueldo de $1.522.759, según la última actualización de la escala salarial oficial.

Otro pariente que debió dejar el cargo fue Daniel Ricardo Bedia, un hermano de la senadora, que estaba contratado, en rigor, por otro colega, Juan Carlos Pagotto (La Rioja). No está más en la nómina de empleados. Acá aparecen las esquirlas del caso que hizo enfurecer a sus colegas de bloque. De la revisión de las nóminas de asesores surgen más familiares. El senador riojano, por caso, tiene contratado a Juan María Pagotto, su hijo, también con una categoría A1. Eso ocurre también con el jefe de bloque del oficialismo en el Senado. Ezequiel Atauche tiene entre sus colaboradores a Pedro Patricio Atauche, su hermano, también con la mayor categoría. 

Las desprolijidades de Bedia generaron un cimbronazo para el bloque de La Libertad Avanza. Son apenas siete senadores, pero varios de ellos tenían contratos familiares, o bien, familiares cruzados como asesores. 

Cuando estalló el expediente de nombramientos de familiares, Milei se había pronunciado de manera escueta. Ante la indignación del abogado Alejandro Fargosi, en la red social X, el Presidente había posteado que el tema estaba “arreglado”. Entonces Fargosi había reclamado que el jefe del Estado debía “explicarle a la senadora de LLA que debe cancelar esas contrataciones familiares”.

El Gobierno no especificó si Milei se había reunido o no con Bedia, pero lo cierto es que pasados dos meses, la senadora le hizo caso a medias. Del tema se había incluso quejado la vicepresidenta Victoria Villarruel.    

Los cargos políticos en el Senado están representados en los contratos transitorios. Los empleados de planta permanente son heredados por los legisladores. En el caso de Bedia, tiene 9 asesores transitorios, entre ellos su hijo y su sobrina. Arrascaeta, que quedó en el medio de la polémica por haber nombrado a un hermano de la senadora jujeña, por caso, sólo tiene cinco asesores en esa categoría. 

Dentro de La Libertad Avanza, el que más contratos transitorios tiene es el senador Bruno Olivera Lucero, con 10, de un total de 16 asesores. No hay un tope de empleados. En rigor, depende del presupuesto asignado a cada senador, el mismo para todos los legisladores.

El otro senador que más contratos políticos tiene es Bartolomé Abdala, pero en su caso es el presidente provisional, con más peso que Olivera. También con 10 nombramientos transitorios. Le sigue Atauche, con 8, Francisco Paoltroni, con 7 y Pagotto con 5. La presidenta del cuerpo, Victoria Villaruel, tiene 7 empleados en esa condición.

En algunos casos se ven coincidencias de apellidos. Olivera Lucero tiene entre sus colaboradores a Hernán Aballay y a Luis Maximiliano Aballay, además de Esteban Cuello y Juan Cuello. Pasa algo similar con Arrascaeta, que tienen a tres asesores con el mismo apellido. Héctor Ocaña, Lara Ocaña Spagnuolo y Américo Spagnuolo. 

MV/MG

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