En 2026, el salario mínimo en Uruguay será más del doble que en la Argentina
En julio de 2026, el salario mínimo de Uruguay será 2,44 veces más alto que el de la Argentina, una diferencia que refleja la creciente asimetría entre los ingresos mínimos legales en ambos países. Según los cronogramas oficiales ya establecidos, el ingreso mínimo uruguayo será de US$620, mientras que el argentino, de $372.400, equivaldrá a US$254,20 al tipo de cambio oficial (precio de venta en la pizarra del Banco Nación) de $1.465 por dólar. La brecha será de US$365 mensuales, o un 143,9% a favor del país vecino.
La cifra surge al comparar los valores que regirán en julio de 2026, cuando ambos países habrán aplicado sus últimos aumentos previstos. En Uruguay, el gobierno de centroizquierda encabezado por Yamandú Orsi (Frente Amplio) dispuso un aumento anual del 7,54% dividido en dos tramos, que llevará el salario mínimo a 25.383 pesos uruguayos. En palabras de la directora nacional de Trabajo, Marcela Barrios, se trata de una política para “aumentar los salarios más sumergidos” en un contexto de inflación controlada.
En la Argentina, donde gobierna el libertario Javier Milei, el aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) se fijó por decreto tras el fracaso del Consejo del Salario, que no logró consensuar una cifra entre representantes sindicales y empresarios. La Secretaría de Trabajo estableció un cronograma de subas mensuales que elevará el salario mínimo de $334.800 en diciembre de 2025 a $376.600 en agosto de 2026, con el valor de julio ($372.400) como referencia para esta comparación.
Aún con todos los aumentos aplicados, el salario mínimo argentino será muy inferior al uruguayo en términos reales.
Además, el valor en dólares del SMVM argentino viene en caída desde 2023, empujado por la inflación local y la devaluación progresiva. Hoy, el ingreso mínimo no cubre la canasta básica y ha dejado de ser un verdadero “salario vital y móvil”, como lo define la ley. Esto impacta en millones de trabajadores, tanto registrados como informales, que lo toman como base para sus ingresos.
En Uruguay, aunque el salario mínimo actúa como referencia general, las negociaciones sectoriales se ubican por encima de ese piso, gracias al funcionamiento activo de los Consejos de Salarios. También se prevé avanzar en 2026 con la adopción de normativas internacionales en materia de trabajo decente.
JJD
0