Reprimen protesta frente al Congreso con gases lacrimógeno y camiones hidrantes

El clima social volvió a tensarse este miércoles en las inmediaciones del Congreso de la Nación, donde confluyeron distintas columnas de protesta: jubilados, Abuelas de Plaza de Mayo, trabajadores del Hospital Garrahan, empleados del INTA, INTI y Vialidad Nacional, docentes universitarios y científicos. La movilización coincidió con la sesión en la Cámara de Diputados, que debate el financiamiento de las universidades públicas y los fondos para el hospital pediátrico.

Desde temprano, fuerzas de seguridad rodearon con vallas el edificio legislativo y desplegaron un operativo con camiones hidrantes y agentes de infantería. Minutos después de las 16, la Policía de la Ciudad avanzó sobre la calle Paraná y roció con gas lacrimógeno a un trabajador de prensa. Testigos denunciaron que, cuando varias personas intentaron asistirlo, fueron alcanzadas por chorros de agua a presión.

Entre los agredidos estuvo el fotógrafo Rodrigo Abd, quien relató a medios presentes que un impacto de agua en la oreja lo derribó: “Me tiró al piso, ahora no escucho bien, pero sigo trabajando. Es como un golpe seco”.

Reclamos acumulados

La Mesa Coordinadora de Jubilados, que se manifiesta cada miércoles frente al Congreso, volvió a exigir la derogación del veto presidencial al aumento de haberes y la prórroga de la moratoria previsional.

Delegados del INTI exhibían carpetas con informes y proyectos para rechazar el cierre del organismo. Trabajadores de Vialidad Nacional remarcaron que su labor “no es un gasto”, sino clave para la infraestructura y seguridad vial.

Desde el Garrahan advirtieron que la falta de recursos golpea en plena emergencia pediátrica. Los universitarios, por su parte, reclamaron un aumento inmediato del presupuesto para garantizar el funcionamiento del segundo semestre.

Congreso y calle

Mientras en la Cámara baja se discutían proyectos para derogar los decretos que disuelven organismos estatales, impulsados por la oposición, afuera persistía la tensión entre manifestantes y fuerzas de seguridad.